Nicaragua: Sobrevivientes de violencia sexual nombran agresores

Ilustración: Cortesía Dijema Méndez | Confidencial

A través de Twitter, centenares denunciaron casos de violación, acoso sexual, pornografía infantil y pederastia, de acuerdo con su informe

Por Keyling T. Romero  (Confidencial)

HAVANA TIMES – “Tenía 14 años cuando difundieron mis fotos. Yo estudiaba en un colegio católico, todos y todas me decían “zorra”. Él tenía 17 años cuando me empezó a escribir, yo me creía todo lo que me decía. Aunque ya han pasado cuatro años, me tiemblan los dedos mientras escribo esto. Todavía me cuesta hablarlo, me da miedo que mi familia se entere”.

Este testimonio es parte del informe “430 voces” que publicó el colectivo feminista “Devuelvan lo robado”, quien sistematizó las denuncias de agresiones y violencias machistas que fueron publicadas en Twitter, entre el nueve y el dieciséis de abril, por mujeres, adolescentes y también por hombres que denunciaban abusos cometidos por otros hombres.

“Todas las historias de mujeres que han decidido nombrar las violencias que han vivido, hoy nos permiten ver las grietas de la impunidad. Sabemos que no son todas, sabemos que somos más; creemos importante volver la mirada hacia la magnitud de las violencias que nos atraviesan y que desveló este temblor”, señalan el colectivo.

El movimiento de denuncias colectivas surgió después que se revelara la existencia de un grupo de WhatsApp llamado “La Liga”; en el que una veintena de hombres se dedicaba a compartir fotografías íntimas, sin consentimiento, de sus novias, amigas y jóvenes que convencían para intercambiar “nudes” o “packs”. Tras leer las historias de violencia, más mujeres se sumaron a señalar a sus agresores.

Avalancha de denuncias

Del total de denuncias que se sistematizaron, 201 fueron publicadas desde cuentas personales y 228 a través de otras cuentas como El blog de la denuncia, cuentas de personas cercanas a ellas o perfiles que fueron creados específicamente para este fin.

En el informe, las denuncias fueron clasificadas de acuerdo a los actos de violencia que sufrieron, y entre los primeros cinco tipos de denuncia hubo:

  • 127 de acoso sexual
  • 123 de abuso sexual
  • 116 violencia psicológica
  • 71 ciberacoso
  • 69 violencia sexual.

En menor proporción hubo denuncias que incluyen delitos de pornografía infantil, pederastia y acoso a menores. Sin embargo, explican que en la narración de las mismas, las denunciantes señalan más de un tipo de agresión.

Ana cuenta su caso

Ana, de 24 años, es una de las denunciantes. En su testimonio cuenta que a los 16 años asistió a una fiesta de bienvenida universitaria, allí perdió el conocimiento después de tomar una cerveza.

“(Yo) sólo conocía a una persona en todo el lugar. Bebí una cerveza, al poco tiempo comencé a sentirme mareada. Me levanté al día siguiente en mi casa”, dice.

Producto de esta situación, Ana quedó embarazada y cuando confrontó al hombre con quien la vieron por última vez esa noche, le dijo que estaba loca, que seguramente el hijo era de alguien más. Meses después, tras el acuerpamiento de una amiga que la animó a denunciar, decidió ir a la Policía, pero al llegar la cuestionaron por no haber acudido antes y le insinuaron que seguro su intención era sacarle dinero. Ante estos señalamientos, desistió y asumió su maternidad sola. Pero incluso al momento de dar a luz, Ana sufrió violencia obstétrica.

En la sala de partos el doctor me pedía constantemente que pujara. Yo seguía quejándome del dolor. Y me dice: “Niña, estás retrasando el proceso, ¿así te quejabas cuando estabas cogiendo?”.

75% de las sobrevivientes nombró a su agresor

La ola de denuncias tuvo dos elementos importantes. El primero fue que el 41% de las denunciantes se animó a contar sus historias desde sus cuentas, sin anonimato, y el segundo fue que en el 75% de los casos señalaron con nombre y apellido a los agresores.

De acuerdo al análisis realizado por Devuelvan lo robado:

  • 141 de los agresores fueron personas que ellas conocían
  • 57 fueron amigos
  • 49 fueron autoridades escolares
  • 49 personas con las que tienen relaciones sexo afectivas.

La mayoría de situaciones de abuso de las que se tuvo detalles ocurrieron en casa (del agresor, amigos, de familiar o casa de playa), en colegios y en bares, discotecas y fiestas.

“Consideramos importante mencionar que dentro de estas denuncias se encontraron 7 testimonios de hombres denunciando a hombres (siendo menores de edad) y una denuncia de una mujer hacia su expareja, también mujer”, señalan.

De las 430 denuncias, solo en 122 hubo detalles de las edades de las sobrevientes y de los agresores. De esa cifra, 94 corresponden a sobrevivientes de entre 11 y 18 años; 22 a niñas de entre cuatro a diez años, tres a mujeres de entre 19 a 30 años. Por su parte, las edades de los agresores incluyen a 20 que tenían entre 12 a 19 años, 15 entre 20 y 28 y siete hombres que tenían entre 30 y 60 años.

Guía para denunciar de forma segura

Ilustración: El gato negro Lunar | Confidencial

1. Tené una conversación con vos misma: Pregúntate: ¿Me siento lista para denunciar ahora? Recordá que tus ritmos son importantes, tu denuncia es tu historia y merece espacio, tiempo y escucha.

2. Investigá las plataformas de denuncias que tenés a tu disposición: ¿Podés hacerlo desde una página externa? ¿Preferís hacerlo desde tu cuenta personal?

3. Evaluá todas las implicaciones que tiene hacer una denuncia pública personal: ¿Estás usando herramientas de seguridad para proteger tus datos? ¿Contás con una red de apoyo?

“Si tu denuncia nombra a otra persona que vivió violencia, recordá preguntar por su consentimiento primero o evitá mencionar su información personal y datos que puedan violar su privacidad”, sugieren.

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