Nicaragua: FSLN “gana” farsa electoral de la Costa Caribe

Conferencia de los magistrados del Consejo Supremo Electoral (CSE). Foto: CCC

Por Confidencial

HAVANA TIMES – El Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) obtendrá el control total de los Gobiernos de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe de Nicaragua, después de que el Consejo Supremo Electoral (CSE) proclamó su victoria con el 88.95% de los votos, en su informe preliminar tras las votaciones regionales. Los resultados ocurren después de que el partido de Gobierno nuevamente anuló la competencia para unos comicios a su medida, y de las persistentes irregularidades de la jornada, entre las cuales están distintas formas de coacción del voto.

Brenda Rocha, presidenta del CSE, leyó los resultados con el 99.20% de las juntas escrutadas, en las cuales el partido del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo se asegura el control total de los Consejos Regionales en el Caribe Norte y Sur con 147,762 votos.

El FSLN controla el Poder Ejecutivo y demás poderes del Estado, incluyendo mayoría absoluta en la Asamblea Nacional. Además, en 2022 se hizo con el control de los gobiernos municipales en los 153 municipios del país. Ahora, tras esta nueva «farsa electoral», administrará también los Consejos y Gobiernos Regionales Autónomos en las dos regiones de la Costa Caribe de Nicaragua. Así, instaura el sistema de partido único de facto, según han denunciado organizaciones opositoras.

La directora del observatorio ciudadano Urnas Abiertas, Olga Valle, calificó estas elecciones regionales como el “golpe final” a la democracia por parte de la dictadura, que busca imponer un control totalitario en el país.

Partidos colaboracionistas con pocos votos en Costa Caribe

En estos comicios se elegían 45 miembros de Consejos Regionales en el Norte y otros 45 en el Sur de esa región caribeña de Nicaragua, que es la más pobre y menos poblada del país, sin la participación del partido indígena Yapti Tasba Masraka Nanih Aslatakanka (Yatama, que significa “hijos de la madre tierra” en lengua miskita), ilegalizado en octubre de 2023.

Según el informe del CSE, el segundo partido más votado es el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) con 7.83% del total).

Le sigue la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) con 1.83%, el Partido Liberal Independiente (PLI) con 0.76% y la Alianza por la República (APRE) habría obtenido 0.62% votos.

Las autoridades electorales sostienen que hubo una participación del 48.30% del total de electores. Sin embargo, de acuerdo a Urnas Abiertas los datos del CSE no responden «al flujo de votantes que se observó durante la jornada».

El proceso de observación ciudadana de Urnas Abiertas «indica que la participación ciudadana fue de aproximadamente 13.28% en los 15 municipios y 30 circunscripciones llamadas a votar». La abstención sería, según esta organización, de 86.72%.

Presiones y espionaje de votos del FSLN

Durante el proceso los operadores políticos del FSLN entregaron códigos para “confirmar” que los ciudadanos votaron a favor del partido oficialista, durante las elecciones regionales de la Costa Caribe. Los pobladores estaban obligados a apuntar esos “códigos” en las boletas electorales, denunció Urnas Abiertas.

“La indicación ha sido que todas las personas tienen que escribir este código en la boleta para posteriormente verificar su voto a favor del FSLN. Aunque ciertamente esta práctica ha sido utilizada en elecciones pasadas, es la primera vez que se observa de manera generalizada”, destacó el organismo.

Esta práctica se observó en ocho de los 15 municipios de llamados a votar el pasado 3 de marzo de 2024, entre ellos: Kukra Hill, Corn Island, Bluefields, Siuna, Desembocadura de Río Grande, Waspam, Paiwas y Prinzapolka.

“Con esta práctica, además de ejercer presión para que la ciudadanía acuda a votar, están violando el derecho a que todo ciudadano ejerza su voto de manera secreta”, denunció Urnas Abiertas.

El observatorio advirtió también de la presencia de oficiales armados de la Policía Nacional dentro de los centros cívicos. Asimismo, reportan la instalación de puestos de control en las afueras.

Ante la escasa afluencia de votantes, también se reportó que los operadores políticos usaron vehículos y lanchas del Estado para movilizar a la población presionada para votar, entre ellos beneficiarios de programas sociales y trabajadores de instituciones estatales.

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