Nicaragua avanza hacia un sistema de partido único
La adjudicación de todas las alcaldías del país al FSLN deja a los nicaragüenses sin más opciones políticas y genera temor de “más represión”, alertan
HAVANA TIMES – El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo demostró, con la adjudicación de las 153 alcaldías del país al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que “avanza” hacia la imposición de un sistema de partido único en Nicaragua, advirtieron analistas políticos y organizaciones opositoras.
Indicaron que este no es un tema que se produzca “de hecho”, ya que habría que reformar la Constitución y las leyes, pero en la práctica los nicaragüenses han quedado “sin opciones” políticas.
El exdiputado liberal y analista político, Eliseo Núñez, valoró que, ante los resultados de la “farsa electoral municipal”, del pasado 6 de noviembre, el Frente “va a decir que tiene un mandato de la ciudadanía y que es el único partido viable en Nicaragua”. Esta situación “va a llevarlos a valorar el tema del partido único”, apuntó.
Núñez recordó que la idea de un partido único en Nicaragua es un tema que el mismo Ortega mencionó el 22 de abril de 2009, en unas declaraciones que brindó al programa cubano Mesa Redonda, en las que entre otras cosas aseguró que “el pluripartidismo no es más que una manera de desintegrar a la nación. Ese es el pluripartidismo, desintegrar a la nación, confrontar a la nación, dividir a la nación, dividir a nuestros pueblos”.
El analista comentó que “hay mucha gente que cree que esto (la imposición del partido único) es un tema simplemente de hecho y no lo es, porque cuando tenés un partido único y lo convertís en el centro del sistema, tenés que incluirlo dentro de la ley y lo que se haga dentro del partido es parte de lo que se hace en el Estado. Es un sistema como el cubano, norcoreano y de la (extinta) Unión Soviética”.
De igual forma, el exdiputado y analista político, Enrique Sáenz, estimó que al adjudicar todas las alcaldías al FSLN, el régimen de Ortega “propinó el zarpazo que necesitaba y por el que venía trabajando desde hace años, para imponer un régimen de partido único en Nicaragua”, similar al régimen cubano.
Al liquidar completamente la democracia representativa en Nicaragua, el régimen está dejando a la ciudadanía “sin opciones” políticas, señaló Núñez. “Esto lo que persigue es lograr que la gente baje la guardia, pues al no haber opciones representativas la gente no tiende a tirarse al vacío y esto genera la sensación de colapso de las esperanzas”.
CSE confirma adjudicación
El Consejo Supremo Electoral (CSE) confirmó al final de la tarde de este lunes 7 de noviembre la adjudicación del 100% de las alcaldías al FSLN, como parte de un proceso carente de credibilidad en el que el Frente Sandinista participó solo con sus históricos colaboradores: Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Alianza por la República (APRE), Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), Partido Liberal Independiente (Alianza PLI) y Yapti Tasba Masraka Nanih Asla Takanka (Yatama).
En un segundo reporte, con el 99.13% de las juntas escrutadas, la presidenta del CSE, Brenda Rocha, señaló que en las #Municipales2022 participaron 2.1 de los 3.7 millones de nicaragüenses que estaban convocados a las urnas. Lo que arroja una abstención del 42.9%.
Los datos del CSE contrastan con los del observatorio ciudadano Urnas Abiertas, que registró un abstencionismo del 82.7%. Ese nivel de abstención supera al observado en la “farsa electoral” de 2021, que fue del 81.5%. Esta información fue calculada con base a los datos recibidos de 366 Centros de Votación (CV) de toda Nicaragua, donde la participación ciudadana alcanzó un raquítico 17.3%.
Horas antes de conocerse el segundo conteo del CSE, la Policía orteguista agredió y asedió a simpatizantes del partido regional Yatama mientras hacían un conteo paralelo de las #Municipales2022 en el municipio de Puerto Cabezas, en la Región Autónoma del Caribe Norte.
De acuerdo con un reporte de Urnas Abiertas, los simpatizantes de Yatama reclaman que su partido ganó varias alcaldías en el Caribe Norte, entre ellas la de Waspán, y que el FSLN intenta robarles. Ante los reclamos de la ciudadanía la Policía reaccionó con agresiones.
Temen “más represión”
Para la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) a esta “farsa electoral municipal” ni siquiera puede llamársele elección, puesto que ocurrió en un contexto “de crisis en el que las violaciones a los derechos humanos son el pan de cada día” y sus resultados aumentan la “preocupación” por el “control total” del régimen sobre el territorio nacional.
El secretario ejecutivo de la CPDH, Marcos Carmona, advirtió que la adjudicación de las 153 alcaldías del país al partido de gobierno generará “más represión, más organización de paramilitares” y “los nicaragüenses van a seguir saliendo del país” huyendo de la crisis.
Carmona también destacó que el alto nivel de abstención en las #Municipales2022 es el reflejo de una sociedad “que no tiene por quién votar, que los candidatos que participaron son los mismos de siempre” y que “el pueblo de Nicaragua está consciente de que estas elecciones no tienen ningún valor, no tienen ninguna seriedad, porque no se contó con los parámetros internacionales de un verdadero proceso electoral”.
De igual forma, el miembro de la CPDH, Denis Darce, enfatizó que “no podemos llamar elecciones a esta farsa electoral”, puesto que “es imposible pensar que el pueblo de Nicaragua —con una dictadura como la que tenemos en este momento— pueda elegir” libremente a sus autoridades. Quienes asistieron a las urnas lo hicieron bajo “intimidación” por parte del régimen y su aparato de represión.
La CPDH también señaló en un comunicado de prensa que la “farsa” de las elecciones municipales fue la confirmación de que “en Nicaragua no hay condiciones y no hay garantías” mínimas de transparencia.
“La dictadura no mostró ni la más mínima vergüenza al acreditarse el triunfo electoral en las 153 alcaldías del país, aumentando la centralización de poder y el fortalecimiento de las estructuras de control y represión partidaria a todos los niveles”, subrayó.
UNAB insta a continuar presiones al régimen
Mientras tanto, la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), después de conocer los resultados de la secuela de la “farsa electoral”, instó a la comunidad internacional “a continuar ejerciendo presiones políticas, diplomáticas y económico financieras” sobre el régimen de Ortega y Murillo.
“La farsa electoral municipal fue rechazada por la población que se ausentó de los centros de votación y como hace un año (en las votaciones generales), cerró las puertas y vació las calles. La soledad y el aislamiento del orteguismo fue evidente una vez más”, apuntó la UNAB en un comunicado de prensa.
Al respecto, la Unidad Nacional denunció que el oficialismo, “en su afán de lograr alguna afluencia a las urnas y en consecuencia intentar dar alguna legitimidad a la farsa, en los días previos encarceló al menos a 19 personas”.
Además “chantajeó y presionó a ciudadanos independientes, ordenó a trabajadores del Estado, a soldados y policías, para que participaran de la farsa”, continuó.
En Nicaragua, advirtió la UNAB, “no hay elecciones bajo el orteguismo” y “no las puede haber mientras hay más de 220 personas presas políticas y las libertades ciudadanas están conculcadas, mientras se mantiene un Estado policíaco de facto y decenas de miles de nicaragüenses se exilian y migran por razones políticas”.
La organización invitó “a la ciudadanía a mantener la resistencia cívica y la denuncia del régimen en cada palmo de la patria”, y exigió “a la dictadura la liberación total, incondicional y con garantías de todas las personas presas políticas, incluyendo los 19 secuestrados en el contexto de la farsa electoral”.
La presidenta del cancelado partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), Kitty Monterrey, evitó referirse a la “farsa electoral” y únicamente comentó en su cuenta Twitter que “los nicaragüenses debemos seguir demandando elecciones libres, transparentes y observadas”.
La situación cada vez se vuelve más ridícula, parece ser una película de terror y desgraciadamente la realidad supera la ficción, En serio me pregunto si personas literalmente fanáticas del orteguismo son capaces de preguntarse y reflexionar un poco sobre la realidad en la que están viviendo.