Mirando a través de los portales en Cuba (57 fotos)

 

Reportaje fotográfico por Jenny Cressman

HAVANA TIMES – Soy una canadiense que ha estado visitando y fotografiando Cuba durante una década. Al revisar, recientemente, mi colección de fotos noté un tema no intencionado: portales.

Desde una perspectiva fotográfica, los portales pueden proporcionar marcos y establecer límites para las imágenes. Las ventanas y las puertas son las estructuras con marcos más comunes, pero también se pueden usar otros elementos para ese propósito. A veces, las barras, las enredaderas y las hojas pueden servir como marcos y agregar interés a una imagen, al crear la sensación de mirar a través de un velo.

Como persona curiosa por naturaleza que soy, a menudo me siento atraída por las ventanas y las puertas, porque me pregunto qué hay al otro lado. ¿Qué veré cuando mire? Estoy aún más intrigada cuando observo un espacio oscuro más allá de la entrada. ¿Qué secretos hay más allá de esa puerta oscura? ¿Qué hay ahí?

En una de las fotos notarán una entrada arqueada de hormigón. Está ubicada junto a la carretera trazada a lo largo de la costa sur de la Isla, entre el poblado de Marea del Portillo y la provincia de Santiago de Cuba; es la boca abierta de un túnel que nunca se completó. El terreno resultó demasiado inestable y peligroso, por lo que el camino fue construido al lado de la montaña, en lugar de debajo de ella. No pude evitar preguntarme qué tan profundo era el túnel y qué vería si entraba con una linterna. Sin embargo, ¡probablemente no hubiera sido seguro que yo lo explorara!

Pero sí exploré un poco más profundamente dentro de una casa que visité en la ciudad de Matanzas, como podrán ver en una serie de tres fotos. Tomé una imagen en la entrada principal y luego, siguiendo la luz, caminé hacia adelante e hice una segunda. La tercera fotografía revela un cielo azul sobre un patio interior de lo que una vez fue una vivienda palaciega.

Otro conjunto fotográfico, realizado en el campanario Manaca Iznaga, muestra cuán diferentes pueden parecer las mismas escenas temáticas, según la hora del día y el juego de luces. Una vez, cuando visité ese mismo sitio, la gloriosa luz del sol convirtió los portales en un hermoso tono de naranja dorado. Sin embargo, en otra ocasión diferente, el cielo estaba algo nublado, por lo que los marcos del portal tenían un tono beige apagado, pero las escenas externas eran más vívidas.

Para mí, eso es un recordatorio de que lo que ves más allá de un portal puede cambiar drásticamente de un momento a otro. El tiempo marca la diferencia para la fotografía, como lo hace para casi cualquier cosa, y eso también es cierto para el propio tiempo. “El tiempo hace que todo pase”, según Esquilo, antiguo dramaturgo griego. ¿Qué traerá el año nuevo?

A medida que cruzamos el umbral hacia otra década, en cierto sentido, estamos avanzando a través de un portal del tiempo. Tengo curiosidad por saber qué hay más allá, ¡y estaré ansiosa por tomar más fotos!

 

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