Mando cubano se reunió para mejorar su «economía de guerra»

Los expertos recuerdan que los precios topados no han traído nada bueno a la economía cubana. / 14ymedio

HAVANA TIMES – Este lunes 1 de julio, cuando comienza el tope a los beneficios del sector privado en las ventas a las empresas estatales, el diario oficial Granma abre con una información dedicada a analizar el más reciente Consejo de Ministros, en el que se evaluaron “temas de importancia vital para la estabilización” en un escenario de «economía de guerra». Nada en la nota del órgano oficial del Partido Comunista indica que se haya adoptado medida alguna para poner fin a la crisis inflacionaria que afecta al país, ni siquiera lo que se vende como tal. 

“Entre otras medidas, se establecerá una política de precios única, inclusiva y en igualdad de condiciones para todos los sujetos de la economía, que incluye tanto al sector estatal como al no estatal”, indica el texto cuando quiere bajar a lo concreto. Sin embargo, basta un breve viaje al pasado para encontrar la misma frase en al menos dos ocasiones: una en 2020, cuando se anunció la búsqueda de diseñar una política de precios única e inclusiva en igualdad de condiciones para todos los sujetos económicos y que cuente como eje fundamental con los productos y servicios generados.

En 2021, ya con la Tarea Ordenamiento, se volvió a hacer uso del concepto, cuando en una reunión similar a esta, el primer ministro Manuel Marrero ratificó que “la actualización de la política de precios en Cuba, bajo el principio de ser única, inclusiva y en igualdad de condiciones para todos los sujetos de la economía, era una de las prioridades de trabajo del Ministerio de Finanzas y Precios”. 

Cuatro años más tarde, el anuncio sigue siendo el mismo, aunque la economía está aún más hundida. Miguel Díaz-Canel citó entre las peores repercusiones de la crisis los atrasos en la entrega de la canasta básica, la “inestabilidad” del Sistema Eléctrico Nacional o la inflación “desmedida” que, a su juicio, “no siempre es producto de la oferta y la demanda y es un asunto totalmente especulativo”. La afirmación no se puede probar en ningún caso, ya que la ausencia de oferta y la nula productividad marcan la realidad cubana, como las mismas autoridades han reconocido y de la que existe amplia documentación estadística publicada por la propia Oficina Nacional de Estadística e Información (Onei).

El primer ministro, que atribuyó a “la burocracia y el ineficiente control” buena parte de los problemas, llamó a “implementar las proyecciones de Gobierno diseñadas para hacerles frente”, aunque nada se sabe del traído y llevado paquete de estabilización macroeconómica que pocos creen que realmente exista

Mildrey Granadillo de la Torre, viceministra primera de Economía y Planificación, dijo que hay un grupo de medidas que buscan “corregir desequilibrios macroeconómicos, incrementar la captación de divisas al país por diferentes vías y conceptos, incentivar la producción nacional, con énfasis en la producción de alimentos; y ordenar el funcionamiento de las formas de gestión no estatal”, el eufemismo del régimen para designar el sector privado.

Entre ellas está, justamente, la que entra hoy en vigor “para acotar la ganancia en las compras de productos y pagos de servicios e insumos que realiza el sector estatal al no estatal” e instó a “fomentar el encadenamiento y no ceder capacidades productivas”. Díaz-Canel instó en el Consejo de Ministros a las administraciones locales a realizar, a través de las empresas estatales, compras a las empresas privadas de lo que sea preciso según las necesidades particulares del territorio, “pero de manera eficiente”, ya que, consideró, se están haciendo “pagos excesivos”, también al propio Estado.

El mandatario afirmó que en sus múltiples paseos por las distintas provincias cubanas siempre encuentra ejemplos de que se pueden hacer las cosas bien. “Cada uno, entonces, que propicie que se puedan multiplicar, con la convicción de que aquí todos nosotros estamos para salvar la Revolución y para salvar el socialismo”. Díaz-Canel, al que organizan siempre alguna visita a un productor o empresario con éxito, no parece haber notado, sin embargo, que esos casos son la excepción y se deben generalmente a privilegios concedidos por el Estado.

En la cita se habló del próximo presupuesto nacional, que ya se empieza a confeccionar, pero aún se está –más urgente– con el ajuste del actual a las “ condiciones de economía de guerra” y en este punto se confirmó la pésima evolución de la economía, que lejos de recuperarse a medida que se deja atrás la pandemia, sigue empeorando. El ministro de Economía y Planificación, Joaquín Alonso Vázquez, dijo que en 2023 hubo “un decrecimiento respecto al año anterior y del estimado del primer semestre de 2024”.

Se cumplieron las exportaciones de tabaco mecanizado, carbón, langosta, angula y otros productos pesqueros, así como los biofarmacéuticos pero ni el níquel, ni la miel de abeja ni el tabaco torcido y en rama alcanzan las previsiones del semestre. También mejoraron los ingresos por la exportación de servicios médicos y el turismo –aunque debajo de las expectativas en este último sector–, pero bajó la de telecomunicaciones.

“Más que enmarcarnos en lo que pasó durante los primeros seis meses del año, es importante evaluar las causas para enfocarnos en lo que debemos hacer en el segundo semestre”, dijo el ministro. 

Faltó el dato sobre el déficit fiscal, aunque cabe temer lo peor, ya que se advirtió de que el primer semestre está “marcado por lo elevado” de esa cifra. 

“Teniendo en cuenta que los recursos que se demandan en la economía superan a los que se generan, se trazaron como objetivos generales» las buenas intenciones de siempre, que nunca han dado resultados.

Mientras, en redes sociales circulan cada vez más los rumores de topes a los precios en las ventas de las mipymes. 14ymedio ha indagado en varias provincias y solo ha podido confirmar que en Cienfuegos algunos inspectores han visitado a los negocios privados para trasladarles que deben limitar sus precios si quieren evitar ser multados, pero las autoridades no se han pronunciado al respecto.  

El economista Pedro Monreal comentaba este domingo las tablas de precios que se mueven en internet. “No los divulgo porque no me consta que sean datos fiables, pero son los datos que debería informar el Gobierno. La medida repite el equívoco del Ministerio de Finanzas y Precios de asumir una metodología errada para la formación de precios a nivel de la economía (local y nacional) tratando de imponer una ganancia ‘planificada’ que menosprecia relaciones reales de oferta y demanda”, señala. “Si alguna lección evidente deja en Cuba la historia de los precios topados es que no funcionan bien. La ‘contención’ de precios que se logra en documentos oficiales se convierte en inflación ‘reprimida’ que coexiste con desabastecimiento y con precios de mercado negro”, augura.

Lea más desde Cuba aquí en Havana Times.