Los supremacistas blancos, el peligro amarillo y el “virus chino” se suman a una mezcla volátil

Por Thalif Deen  (IPS)

Foto: ONU

HAVANA TIMES – Cuando el presidente Donald Trump, caracterizó reiteradamente al Covid–19 de rápida difusión como un “virus chino”, provocó que algunos supremacistas blancos resucitaran un antiguo insulto étnico contra chinos y asiáticos orientales: el “peligro amarillo” que, en una era pasada, se promocionó como una amenaza xenófoba para el mundo occidental.

Pero Tendayi Achiume, relator especial de la ONU sobre las formas contemporáneas de racismo, discriminación y xenofobia, es muy crítico con la interpretación racista de una enfermedad que ha causado más de 19,000 muertes en todo el mundo y ha representado más de 438,000 infecciones, con el epicentro cambiando de China a Europa.

Señalando a Trump, dijo: sin embargo, es desalentador “presenciar a funcionarios estatales, incluido el presidente de los Estados Unidos, adoptar nombres alternativos para el coronavirus Covid–19”.

“En lugar de utilizar el nombre internacionalmente reconocido del virus, estos funcionarios han adoptado nombres con referencias geográficas, que generalmente se refieren a su aparición en China”, dijo Achiume, quien es profesora asistente de derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad de California, Los Ángeles.

Este tipo de uso calculado de un nombre geográfico para este virus tiene sus raíces en el racismo y la xenofobia y, por consiguiente, los fomenta. En este caso, sirve para aislar y estigmatizar a aquellos que son, o son percibidos como personas de ascendencia china u otra nacionalidad de Asia oriental”, agregó.

Mientras tanto, los grupos de supremacía blanca en los Estados Unidos han justificado la etiqueta, principalmente en publicaciones en Facebook, argumentando que si enfermedades como el sarampión alemán (1814), la gripe española (1918) y la enfermedad de Lyme (1975) son ampliamente aceptadas, ¿por qué no un “virus chino”?

Cuando se le preguntó por su respuesta, Achiume dijo a IPS que es equivocado tratar de hacer de esto una cuestión de semántica, donde los defensores de los nombres de enfermedades raciales señalan ejemplos históricos de prácticas de nombres relacionadas.

“Actualmente, existen individuos que están siendo atacados y abusados por motivos raciales y étnicos, en parte porque sus atacantes están envalentonados por líderes xenófobos que alimentan la intolerancia sobre la base del origen nacional”.

Dijo además que estos no son momentos de semántica.

“Estamos ante una pandemia global que requiere que los líderes defiendan y protejan la dignidad de todas las personas, independientemente de su raza o etnia”, declaró Achiume, quien también es investigador asociado del Centro Africano para las Migraciones y la Sociedad en la Universidad de Witwatersrand en Sudáfrica”.

Según la National Broadcasting Company (NBC), uno de los principales canales de televisión en los Estados Unidos, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) reveló, en una sesión informativa de inteligencia el mes pasado, planes que involucran a grupos de supremacistas blancos que supuestamente intentan usar el coronavirus para atacar a los no blancos y las minorías, a través de saliva infectada, botellas de spray y otros artículos.

Y en un reporte de Yahoo News, Hunter Walker y Jana Winter escriben: “Los extremistas violentos continúan haciendo del bioterrorismo un tema popular entre ellos”, se lee en el informe de inteligencia escrito por el Servicio Federal de Protección, que cubrió la semana del 17 al 24 de febrero.

“Los extremistas blancos violentos motivados racialmente han comentado recientemente sobre el coronavirus, afirmando que es una “OBLIGACIÓN” difundirlo, en caso de que alguno de ellos contraiga el virus”, para propiciar respuestas por su parte, se afirmó en el informe.

Matthew Lee, investigador de políticas de salud y candidato a doctorado en ciencias socio-médicas en la Facultad de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia, señala que, durante los brotes de enfermedades, los ataques a grupos marginados no son una excepción, sino la norma.

Este racismo y xenofobia también se avivan por el discurso que arroja los cuerpos y los comportamientos de los estadounidenses de origen chino y otros asiático – americanos como sospechosos, e incluso culpables, de propagación de enfermedades, señaló.

“Si bien los virus y otros patógenos no discriminan entre los anfitriones en función de la raza, el origen étnico, la nacionalidad o el estado migratorio, el estigma y la información errónea sí lo hacen”, agregó Lee.

Achiume dijo que la retórica estatal irresponsable y discriminatoria no es un problema menor.

Como señaló la Organización Mundial de la Salud en 2015: los nombres de enfermedades realmente importan a las personas directamente afectadas… ciertos nombres de enfermedades provocan una reacción violenta contra miembros de comunidades religiosas o étnicas particulares… Esto puede tener graves consecuencias para las personas, vidas y medios de subsistencia.

Estas consecuencias ya se han hecho realidad. En los últimos dos meses, las personas que se perciben o se sabe que son de ascendencia china u otra de Asia oriental han sido objeto de ataques racistas y xenófobos relacionados con el virus. Estos ataques van desde insultos de odio hasta la denegación de servicios y actos brutales de violencia”, agregó.

Las expresiones de racismo y xenofobia relacionadas con el COVID – 19 en las redes, han incluido acoso, discurso de odio, proliferación de estereotipos discriminatorios y teorías de conspiración.

No es sorprendente, argumentó, los líderes que intentan a atribuir Covid–19 a ciertos grupos nacionales o étnicos son los mismos líderes populistas nacionalistas que han convertido la retórica racista y xenófoba en el centro de sus plataformas políticas.

“Las respuestas políticas al brote de Covid–19 que estigmatizan, excluyen y hacen que ciertas poblaciones sean más vulnerables a la violencia, son inexcusables, inconcebibles e incompatibles con las obligaciones de los Estados en materia de derechos humanos internacionales”.

Además, la retórica política y la política que aviva el miedo y disminuye la igualdad de todas las personas es contraproducente. Para tratar y combatir la propagación de Covid–19 de manera efectiva, las personas deben tener acceso a consejos de salud precisos y atención médica suficiente sin temor a la discriminación”, declaró.