Las gallinas cubanas ponen pocos huevos porque comen poco

En el mercado informal, un cartón de huevos puede alcanzar los 1.700 pesos, una cifra que equivale a más de la mitad del salario mínimo de un trabajador cubano. (14ymedio)

En Ciego de Ávila, de cien gallinas solo 43 dan un huevo al día, mientras que 57 no lo hacen

Por 14ymedio

HAVANA TIMES – Hace apenas un mes, los medios oficiales sorprendían promoviendo el consumo de los huevos de codorniz como alternativa más eficaz, rentable y nutritiva que los de gallina. Aunque la escasez de este alimento lleva meses siendo palpable en los mercados y bodegas de la Isla, la cifra se conoce este viernes gracias a un reportaje del diario provincial de Ciego de Ávila, Invasor.

“El país para sus encargos priorizados necesita diariamente unos seis millones de huevos y apenas andamos por los dos, tres”, dice Katia Leyda Martínez Arnáez, directora de la Empresa Avícola de la provincia.

La nota expone la crítica situación. Solo en Ciego de Ávila, una de las tres provincias de Cuba con mejores datos en avicultura, más de la mitad de gallinas no pone. Concretamente, de cien gallinas solo 43 dan un huevo al día, mientras que 57 no lo hacen. Aunque el dato es dramático, la información destaca que ya es casi un milagro que las que ponen, lo hagan.

“Si decimos que se han quedado varios días sin comer, que otras han picoteado una mezcla escasísima de proteína, que algunas no han tenido el agua a tiempo por falta de corriente y –de paso– tampoco suficiente luz para estimular la puesta, que han comido fuera de horario por atrasos en el alimento, que hay decrépitas que siguen en producción 14 meses después de lo indicado, pero aun así de cada 100 gallinas 43 logran sobreponerse a ese estrés y poner un huevo, la noticia puede sonar hasta alentadora”, reza el texto.

Solo en Ciego de Ávila, una de las tres provincias de Cuba con mejores datos en avicultura, más de la mitad de gallinas no pone

La empresa, no obstante, se muestra comedida, ya que admite que, si bien ha logrado producir 126 millones de huevos en un año, se puso la meta de 100 millones para 2022 y, a finales de septiembre, sólo había entregado 60 millones. En palabras de su directora: “Va siendo el peor año, sin dudas”.

Según su jefe de producción, los huevos de la canasta correspondientes a septiembre no llegaron a Ciego de Ávila hasta el día 29, después de que durante varios meses no hubieran llegado los adicionales, que se habían reducido en cantidad. El producto se distribuye en distintas provincias y la situación fue peor aún para ellas. Por ejemplo, a Holguín y Santiago llegaron los de agosto el 7 de septiembre.

En Guantánamo, cita el propio diario, los retrasos ya acumulan los cinco meses, que recuerda que la prensa local advirtió de que hasta junio no llegaron los de abril o mayo.

El caso de Ciego de Ávila no es aislado. Martínez Arnáez afirma que la situación en Santiago de Cuba es aún más crítica por la falta de comida, “las dificultades para importar las materias primas, hacer los piensos y trasladarlos luego”. Allí solo 10 de cada 100 gallinas ponen huevos a diario.

“En consecuencia, la Empresa Avícola no solo se ha quedado sin utilidades tratando de darle de comer a sus aves al costo que sea, sino que han incurrido en pérdidas: ocho millones”

Los traslados de los piensos son uno de los motivos con los que la funcionaria explica la situación. El alimento se trae normalmente desde Cienfuegos, aunque ahora llegan hasta Santiago intentando abaratar costos. Sin embargo, la situación es peor todavía, porque el gasto de combustible eleva el precio del huevo, que ha pasado de los dos pesos aprobados por el plan anual a casi tres pesos.

“En consecuencia, la Empresa Avícola no solo se ha quedado sin utilidades tratando de darle de comer a sus aves al costo que sea, sino que han incurrido en pérdidas: ocho millones”, dice la directiva.

Para paliar el golpe a la avicultura se intenta ahora apoyar el abastecimiento con el llamado huevo criollo, criado por particulares, que no tendría que enviarse a otras provincias para la canasta, y fomentar su comercialización para reducir pérdidas. Es una estrategia prevista para el próximo año, y aunque ya se está criando gallina rústica que será entregada en zonas rurales, por ahora no se sabe en qué condiciones.

Por otra parte, el huevo criollo es un alimento que se produce principalmente a nivel doméstico y para el autoconsumo de las familias. Para dar de comer a las gallinas se utilizan de forma tradicional los restos de la cocina que, en medio de la crisis económica, están severamente menoscabados.

La otra alternativa para la familia es acudir al mercado informal, donde un cartón de 30 huevos puede alcanzar los 1.700 pesos, una cifra que equivale a más de la mitad del salario mínimo de un trabajador cubano.

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