Laicos cubanos piden cambios políticos
HAVANA TIMES, 6 marzo (dpa) — La revista católica cubana “Espacio Laical” criticó hoy la recién celebrada Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC) y pidió un nuevo “consenso político” que agrupe a amplios sectores del país.
En un editorial publicado con motivo de la próxima visita del papa Benedicto XVI a la isla caribeña, la revista del consejo de laicos de La Habana, cercana a la Iglesia, criticó asimismo a la cúpula política del país por no facilitar el consenso político de “toda la diversidad” cubana.
La “construcción de una sociedad más justa”, señaló la publicación, “implica un quehacer político de todas las partes del espectro nacional”. Las críticas se centran especialmente en la Conferencia del PCC celebrada a finales de enero, un inédito cónclave convocado en abril de 2011.
Los resultados de la conferencia del 28 y 29 de enero “han provocado frustración en amplios sectores nacionales”, indicó la revista.
En el evento, el PCC “aprobó cambios importantes, pero no alcanzó a dar el salto necesario y suficiente para enrumbar a la nación por el camino del cambio que anteriormente sus propios dirigentes habían anunciado”, agregó.
Pese a las expectativas iniciales, la celebración de la conferencia en la que se esperaba la renovación de la cúpula comunista pasó casi desapercibida para la mayoría de la población.
El presidente Raúl Castro hizo entonces una encendida defensa del monopolio del poder del PCC y descartó la autorización de otros partidos políticos en la isla. Sobre todo sectores cercanos a la Iglesia católica abogan por una mayor participación política.
“Cuba es un país plural, donde la mayoría de sus ciudadanos, al margen de las diferencias políticas, económicas, sociales y religiosas, abogan por una patria independiente, democrática, desarrollada, con justicia social y sin interferencias externas”, señaló hoy el editorial de “Espacio Laical”.
El gobierno castrista alude al embargo y la política hostil de Estados Unidos como factores determinantes para el sistema del partido único en Cuba. La disidencia acusa sin embargo al régimen de excusarse en ello para recortar las libertades fundamentales de sus ciudadanos.
Los laicos cubanos invitaron además al exilio cubano a peregrinar a la isla de cara a la próxima visita de Benedicto XVI. “Llamamos a nuestros compatriotas en la diáspora a visitar la isla con motivo del Año Jubilar, en particular durante los días de la visita papal”.
El Papa, el segundo pontífice católico que visita la nación caribeña, estará en Cuba entre el 26 y el 28 de marzo con motivo del 400 aniversario del hallazgo de la virgen de la Caridad del Cobre, la patrona de la isla caribeña.
La visita de Joseph Ratzinger ha generado expectativas en la sociedad cubana, sumida en un profundo programa de reformas de apertura económica. El gobierno de Raúl Castro lleva a cabo amplios ajustes con elementos de mercado para superar la crisis económica en la isla.
Sobre todo sectores religiosos piden cambios políticos adicionales a la “actualización” económica. Algunos representantes de la difusa disidencia cubana, sin embargo, se oponen a la visita del Papa por considerarla una señal errónea frente al gobierno.
La Iglesia se ha convertido en los últimos años en un importante actor social en la isla. La visita de Juan Pablo II en 1998 devolvió la fe cristiana a la isla comunista tras décadas de prohibición.
Jaime fue creado Cardenal por Su Santidad el Beato, Juan Pablo II en el Consistorio del 26 de Noviembre de 1994, y recibido por más de 10 mil cubanos como Cardenal en la S.M.I. Catedral de La Habana el 11 de diciembre de 1994.Yo, uno entre aquellos diez mil…me embargaba la alegría, teníamos nuevamente, otro príncipe de la Iglesia, en nuestra pequeña Isla…pero que decepción, con el paso de los años, “el príncipe” ha descendido a Barón, o menos, casi plebeyo…se ha convertido , paulatinamente, en un cooperador de la Dictadura, y ha olvidado a su enemigo natural, y a sus precesores que han enseñado sobre este particular (“Roma o Moscú”, “Con Cristo o Contra Cristo” de Mons. Enrique Pérez Serante, por sólo citar un par de Pastorales, de ese Titán del Episcopado Cubano y que fuera Arzobispo de Santiago de Cuba, y a quien este obispito rojo, no le llegaría ni a abotonar la sandalia ; enemigo al que debía combatir, y entregar hasta su sangre (por eso el purpurado de su ropa) por su pueblo, por su Iglesia. Este curita, colaboracionista, ha hecho de cuanto malabar se puede para agradar a los hermanos biranenses. Todavía estamos esperando la protesta por los cubanos muertos en huelga de hambre, todavía estamos en espera de las exequias públicas por el descanso de la asesinada Dama de Blanco, Laura Pollán…en cambio, sí …el pasado 4 de marzo, celebro una pontifical publica pidiendo por la salud del tirano bolivariano. Raquíticos cambios para nuestra gente, mientras este curita, se asegura, con cucharón, un puesto privilegiado en la Cuba del futuro, olvidando que la Iglesia, solo ha obtenido “espacios”, en los corazones de los hombres (que son los más importantes) cuando ha sido martirizada, no acomodada. No olvidaremos su tibieza, su genuflexión, su juego con los tiranos, el silencio cómplice y la comodidad, con que ha vivido todos estos años, mientras su grey, sufre indeciblemente.