La Policía cubana detiene a vendedores de huevos y pollo

Las autoridades decomisaron paquetes de pollo y más de 400 cartones de huevos.(Facebook)

En la operación, las autoridades capturaron a 30 comerciantes e incautaron un camión cargado de alimentos

Por 14ymedio

HAVANA TIMES – Al menos 30 personas fueron detenidas por la Policía cubana por revender productos de primera necesidad en la zona conocida como Feria de 100 y Boyeros, en La Habana. En el procedimiento policial, realizado este jueves, se decomisaron cientos de cartones de huevos, paquetes de pollo y picadillo, confirmaron los medios oficiales.

En la requisa participaron elementos de la Policía y del Departamento Técnico de Investigaciones (DTI), una dependencia del Ministerio del Interior. Los uniformados llegaron por la mañana a la popular feria, cuando “de un momento a otro, comenzaron a llevarse a todos los revendedores que siempre andan por la zona”, señaló La Página de Mauro Torres, afín al régimen.

Un testigo del operativo aseguró que los comerciantes vendían los productos a precios exorbitantes, según la prensa oficial, que reproduce el texto del usuario en Facebook. Entre estos, el cartón de huevos a 2.000 pesos y el paquete de pollo -que en las tiendas cuesta 90 pesos- a 1.500. “Lo de esa gente era un abuso, así que muy bien por la policía y el DTI”, añadió, presuntamente, la vecina.

Otro testigo señaló que el operativo llegó hasta una vivienda cercana a la feria, en donde sacaron un camión cargado de paquetes de pollo y picadillo. Esta persona aseguró que “contó más de cuatrocientos cartones de huevos”, que fueron incautados por los uniformados.

La publicación señala que este tipo de operativos gozan de “respaldo popular” porque se detiene a personas que se “lucran con la necesidad ajena”, al vender productos básicos de la canasta alimenticia de los cubanos a precios diez veces por arriba del valor de mercado.

La escasez de alimentos y productos básicos en la Isla provoca distorsiones que contribuyen a alimentar el mercado negro, donde se pueden encontrar desde artículos de tecnología hasta almohadillas sanitarias para mujeres a elevados precios.

La noticia del operativo ha sido aplaudida por muchos lectores del periódico oficial, pero no han sido pocos quienes han reclamado a las autoridades por la ineficiencia en el control del “acaparamiento” y para garantizar el suministro de productos básicos. “Al fin vemos algo que ayuda a cortar la cadena delictiva, aunque deben llegar al fondo porque 400 cartones de huevo no salen de la nada, y menos ahora, que no hay en ningún lugar”, cuestionó un usuario.

“Los revendedores son unos abusadores, ¿pero quién tiene la culpa que esto suceda? ¿De dónde salen los productos en esa magnitud? ¿En verdad son los revendedores?”, cuestiona Elina Mendoza. Otro usuario, identificado como Freddy, pidió que se investigue también a quienes compran dólares en las casas de cambio (Cadeca) y luego los revenden en la calle.

El oficialismo, por su lado, adelantó que se trata de una de las investigaciones que realizarán en La Habana contra los “revendedores que tanto daño hacen a la población”.

La popular Feria, también conocida como “la candonga de 100 y Boyeros” se especializa en la venta de productos de ferretería, plomería, útiles del hogar y otros insumos de mucha demanda que escasean en las tiendas estatales. Aunque, según la ley, los comerciantes o merolicos que ofrecen sus mercancías en el lugar solo podrían vender productos de manufactura nacional o artesanías, lo cierto es que lo más común es toparse con accesorios y piezas importados o sacados de los almacenes estatales.

Entre las mesas de los que ofrecen pegamentos instantáneos, juguetes para niños y uniones para tubos, merodean con frecuencia otros vendedores que pregonan en voz baja paquetes de pollo congelado, huevos, leche en polvo y otros alimentos. La práctica es tan extendida que la Feria tiene la reputación de ser un lugar donde “se puede conseguir todo o casi todo”.

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