Joven cubano pasa a campamento de trabajo forzado

Luis Robles llamó a su madre desde la prisión para comunicarle la noticia. (Facebook/Yindra Elizastigui)

Por EFE / 14ymedio

HAVANA TIMES – Luis Robles, manifestante cubano preso desde diciembre de 2020, ha recibido un permiso carcelario para cumplir el resto de su pena de cinco años en un campo de trabajo correccional, confirmó este domingo a EFE su madre, Yindra Elizastigui.

Robles, considerado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) como un preso político, así también por organizaciones como Prisoners Defenders (PD), con sede en Madrid, fue sentenciado en la Isla por los delitos de propaganda enemiga y desobediencia.

Según informó Elizastigui, el joven de 31 años ha sido trasladado a una zona especial del Combinado del Este, un centro penitenciario a las afueras de La Habana, en donde ya se encontraba antes.

«Luis nos llamó el viernes a las cinco y media de la tarde (para informarnos de la decisión). Él acogió este traslado contento porque es algo que se esperaba. Son ya cuatro meses desde que le dijeron que se había aprobado», alegó.

El traslado llega días después de que Elizastigui depusiera una huelga de hambre que había comenzado para solicitar el traspaso a mínima seguridad de Robles. Tras entrevistarse con el «director general» de Prisiones, este le aseguró entonces que » el trámite sobre el expediente de Luis estaba bastante avanzado y que pronto se le daría a conocer el veredicto final».

Robles, conocido también como el «joven de la pancarta», se hizo notar tras manifestarse en solitario con un letrero en un céntrico paseo peatonal de la capital cubana en el que pedía la liberación del rapero disidente Denis Solís, quien había sido condenado a ocho meses por desacato. Luego de cumplir la condena, el músico abandonó el país rumbo a Europa. 

El manifestante fue detenido tras caminar con su pancarta unos pocos minutos. En aquella ocasión, Televisión Cubana justificó el arresto al alegar que Robles se había resistido y protagonizó un «franco acto de provocación». Sin embargo, los videos publicados entonces en redes sociales y los testigos concuerdan en que fue una actuación totalmente pacifista y que el joven no se resistió en ningún momento a los agentes que le cayeron encima con un gran despliegue de violencia.

Para su madre, el traslado al centro de trabajo correccional es un «gran paso» para que posteriormente «le toque su libertad condicional».

Aseguró también que su hijo «en realidad no debió pasar por eso». «Le deberían dar la libertad porque está preso injustamente (…) esperemos que en 2024 por fin Dios me conceda la gracia de que mi hijo sea libre», lamentó.

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