Expertos: Crisis en Nicaragua deja panorama económico “desolador”

Por Johnny Cajina (dpa)

HAVANA TIMES – Más de 184.000 personas perderán su empleo en Nicaragua al cerrar el año 2018 debido a la grave crisis política que estalló el 18 de abril, advirtieron expertos, que pronostican además un “panorama desolador” para el país de continuar el conflicto.

En entrevista con el Canal 100% Noticias (privado), el economista Néstor Avendaño señaló que al concluir este año, 184.200 personas se van a quedar sin puestos de trabajo en el sector de servicios (comercio, restaurantes y hoteles) afectado por la estampida de turistas tras el inicio de la crisis el 18 de abril.

Otros sectores golpeados son la ganadería, que registra un “desplome” del 20 por ciento en la producción de leche, y un “descuido severo” en el ciclo agrícola 2018-2019 que se traduce en “poco acceso al crédito y a los insumos”, añadió el economista.

Avendaño, director de la ONG Consultores para el Desarrollo Empresarial (Copades), suma al gris escenario el actual declive de la inversión en el sector construcción, además de un menor desempeño productivo en la industria manufacturera y una caída de las agroexportaciones que será evidentes desde noviembre hasta mayo de 2019.

“Cae el volumen de las exportaciones, de las importaciones, del consumo y de la inversión, es un panorama desolador (y) el impacto en la economía es más grave que el de la recesión económica mundial de 2009, advirtió el experto, que estimó una caída del 3,5 por ciento del producto interno bruto.

Un contexto sombrío similar visualizó la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides, independiente), que planteó “dos potenciales escenarios, en los cuales la crisis se prolonga por el resto del año”.

“Un primer escenario supone que las personas y las empresas se adaptarán a una ‘nueva realidad’, donde a pesar del contexto de crisis continúan realizando sus actividades económicas a menor intensidad” mientras la economía se contrae un 2,1 por ciento respecto a 2017, con pérdidas de 946.2 millones dólares.

Pero si se intensifica la violencia en el marco de la crisis política, advirtió que las pérdidas se elevarían hasta los 1.214,2 millones de dólares en valor agregado, “afectando en mayor medida al comercio, los servicios empresariales y la actividad del sistema financiero, principalmente por el continuo retiro de los depósitos en los bancos comerciales”.

“Ambos escenarios implican impactos devastadores, tanto para el empleo como para la profundización y ampliación de la pobreza”, añadió el organismo, estimando “que a julio de 2018 ya había 347.000 personas despedidas o suspendidas de sus puestos de trabajo”, lo que elevó del 29,6 al 34,8 el porcentaje de personas en situación de pobreza en el país.

“Lo anterior reitera la importancia de que exista voluntad política por parte del Gobierno para buscar una salida pacífica a la crisis sociopolítica actual, que ponga fin a la represión y la criminalización de la protesta”, concluyó la fundación.

Para Avendaño, la situación es tan grave que en 2018 el ingreso per cápita de cada nicaragüense será de 2.182 dólares, muy lejos de los 2.400 dólares a los que se aspiraba hasta antes del 18 de abril.

Mientras, Funides advirtió que un agravamiento de la crisis política retrocedería a Nicaragua -el segundo país más pobre del continente- a los niveles de pobreza “observados en la primera mitad de la década de los 90, donde prácticamente la mitad de la población” era pobre.

Nicaragua vive desde abril la peor crisis política de las últimas décadas, que se inició con una protesta estudiantil y que, según ONG de derechos humanos, ha dejado 481 muertos, en su mayoría jóvenes manifestantes producto de la acción de policías y paramilitares. El Gobierno reconoce 198 decesos.