El abakuá reconoce la hombría, la sociedad masculina en Cuba

Fotorreportaje por Elio Delgado Valdés

HAVANA TIMES – El abakuá reconoce la hombría, la respeta y exalta; quizás eso traduce los preceptos sociales que acompañan la aceptación para la iniciación en esa sociedad de carácter masculina. Pero jurarse parece en estos tiempos un fenómeno social que toma fuerza en los jóvenes, aunque la decisión es libre y voluntaria.

Para ser aceptado, se requiere de un padrino que de fe de los principios que rigen a un abakuá: ser hombre, buen hijo y buen amigo; además, se es sometido a un proceso de verificación sobre su conducta social, familiar y sus principios morales, para eso existen comisiones que circulan sus datos por todos los juegos.

Luego de aceptado, el indísime (así se le llama al aspirante a abakuá) formaliza la decisión ante las plazas del juego elegido; el derecho a iniciarse tiene un costo de 200 CUC.

Luego de la ceremonia de iniciación, consistente en la juramentación, los aspirantes son consagrados como obonekue o ecobio del juego, luego viene la fiesta que termina con la procesión y se degusta el chivo.

El diablito, personaje enigmático, dirige el cortejo, baila y purifica el ambiente para ahuyentar los malos espíritus; detrás va Isué, el sacerdote, que sostiene con los dientes la cresta de un gallo y entre sus manos el tambor eribó. Le siguen tres grandes dignatarios del juego, mientras un oficiante esparce con ramas de albahaca un poco de agua bendita que alejará lo negativo del lugar.

Esos ritos atraen la atención de muchos, acercándose al plante para compartir la música, los bailes y bebidas; otros, temerosos, no quieren que se les hable de estos hombres catalogados como diabólicos, rechazan esa liturgia, pues, según afirman, siempre termina con violencia o criminalidad.

Los antecedentes de la Sociedad Abakuá en Cuba, originaria del área del Calabar en Nigeria y parte de Camerún, surgida en La Habana, en el ultramarino pueblo de Regla en el año 1836, siendo además Matanzas y Cárdenas otros asentamientos.

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