Cuba prevé activar en abril el nuevo cable desde Martinica

para mejorar la conectividad

Orange, a través de su filial en Martinica, propicia la construcción del cable submarino Arimao. (JR)

La empresa atribuye los cortes de internet a los apagones, mientras los usuarios piensan que fueron intencionados para silenciar las protestas

Por 14ymedio

HAVANA TIMES – Las autoridades cubanas prevén tener funcionando el nuevo cable submarino de conexión a internet en tres meses, según han anunciado en un artículo publicado por la prensa oficial en el que intentan responder a las múltiples quejas de escasa conectividad en las últimas semanas a través del monopolio estatal Etecsa, única puerta a internet de la Isla.

«Esperamos poner en marcha el cable submarino Arimao en abril», dijo Tania Velázquez Rodríguez, presidenta de la empresa, que explica lo corto que se ha quedado ALBA-1, la conexión entre Venezuela y Cuba puesta en marcha desde 2013. «Las capacidades que teníamos en ALBA-1 están saturadas, por lo que en esos horarios de alta concurrencia la demanda no es satisfecha. El nuevo cable ofrecerá capacidades importantes para la navegación. De igual forma, debemos incrementar las capacidades del software que habilita esa salida para que todo fluya correctamente», añade.

Arimao se anunció en diciembre, antes de la gira de Miguel Díaz-Canel en varias islas caribeñas, y prevé la conexión desde Martinica, desplegada por la francesa Orange a través de su filial en esta isla. El cable, de fibra óptica, tiene 2.500 kilómetros y llega al Puerto Tricontinental de Cienfuegos. La instalación marítima hasta Martinica quedó completada a principios de enero, momento en que comenzaron las conexiones terrestres. Cuando se hayan completado, llegará el momento de hacer pruebas.

    Velázquez Rodríguez ofrece cifras del crecimiento de la demanda de conexión en Cuba, que en 2022 aumentó en más de un millón de usuarios, alcanzando un total de 6,7 millones de clientes

En la nota de este miércoles, Velázquez Rodríguez ofrece cifras del crecimiento de la demanda de conexión en Cuba, que en 2022 aumentó en más de un millón de usuarios, alcanzando un total de 6,7 millones de clientes, la mayoría de 4G. Eso ha provocado una subida del volumen de tráfico de un 63%, al pasar de 189.000 terabytes en 2012 a 309.000 en 2022. La demanda media de usuario ha variado de 5,65 gigabytes a 7,23 en un año.

La infraestructura no ha crecido, sin embargo, lo que genera los problemas de congestión detectados por los usuarios. Según datos de Etecsa, más de dos millones de personas se conectan de manera simultánea entre las ocho y las diez de la noche, horario de mayor afluencia, lo que satura la red y provoca quejas en la población.

«El crecimiento no solo demanda inversiones en la red de acceso, sino que nos obliga a hacer trabajos en otras capas de la red que permitan el tránsito sin contratiempos de esa masa de datos que demandan los clientes. Igualmente, debemos tener en cuenta la salida internacional», agrega la directiva, en referencia, esto último a Arimao.

La promoción para quintuplicar el saldo ha estado en boca de todos a la hora de explicarse los problemas de acceso a la red. Velázquez Rodríguez confirma que estas ofertas tienen efectos, aunque justifica la necesidad imperiosa de obtener divisas por ese camino.

«Es un incentivo para estimular las recargas desde el exterior, pues desde la salida de los paquetes combinados ha ocurrido un desplazamiento hacia el consumo de los paquetes nacionales con pagos en CUP y decrecen los ingresos desde el exterior. A nosotros nos satisface muchísimo contar con ofertas en CUP que complazcan a la mayoría de nuestros clientes, pero también es importante ofrecer alternativas para captar las divisas que permiten sostener el servicio y hacerlo con calidad», dice.

La directiva también habla en la entrevista de cómo los apagones han afectado a la navegación y revela que las radiobases tienen baterías pero solo el 20% de las 5.000 que hay en la Isla tienen respaldo energético, lo que suspende la conexión.

    La directiva revela que las radiobases tienen baterías pero solo el 20% de las 5.000 que hay en la Isla tienen respaldo energético, lo que suspende la conexión

El argumento podría explicar técnicamente los cortes denunciados durante los largos apagones del pasado verano, que dieron lugar a multitud de manifestaciones en las que se responsabilizaba al Gobierno y se exigía la restitución de la corriente. Sin embargo, prevalece entre la población la sospecha de que los cortes de internet fueron intencionados para evitar que las protestas se divulgaran a través de las redes sociales y provocaran un efecto contagio.

La funcionaria añade que se ha tratado de conseguir más baterías, pero el costo por unidad (de unos 30.000 dólares) impide tener los suficientes. «Para nuestra empresa es satisfactorio exhibir crecimientos en el tráfico y en el número de suscriptores, aunque reconocemos que hay insatisfacciones respecto a la calidad», admite.

Velázquez Rodríguez hace referencia a otras áreas de telecomunicaciones, como la telefonía fija, que aumentará solo en 16.000 líneas para 2023 porque, aunque asegura que aún tiene mucha demanda en Cuba, la prioridad es la celular «por su rápido despliegue y amplia capacidad para asimilar clientes». Además, también ha hablado del lento despliegue de redes inalámbricas para la red de Nauta Hogar o la venta de equipos en pesos, que «se realizará cuando las condiciones económicas lo permitan».

Las frecuencias de transmisión o la digitalización de algunos servicios también aparecen en la entrevista, en la que, como novedad destaca el canal MiTransfer (una cuenta virtual de dinero asociada a un número móvil) como paso previo al monedero virtual a corto plazo.

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