¿Quién dispone de la sangre de un pionero?

Erasmo Calzadilla

Cada mañana del año, entre lunes y viernes, llegan tempranito los niños a la Secundaria Básica “19 de abril” en el barrio de Alamar, mientras aún los pajaritos alborotan en el rocío de los árboles.

Es una escena que por rutinaria no deja de tener su encanto, al fin y al cabo la vida rebrota, una y otra vez, con bríos nuevos. Pero el regusto se me agria cuando a minutos de comenzar el matutino y a una orden de sus maestros los mozuelos repiten el lema de la escuela:

“Si de la sangre de un pionero depende de la soberanía…  Comandante en jefe ordene, puede contar con la mía.”

¿De la cabeza de quién habrá salido semejante aberración?

Convencido estoy que no de la de un niño.  Más parece la ocurrencia de alguien preocupado en sembrar cuanto antes, en el tierno cerebro de los adolescentes, el ambiente guerrerista que justificará la ausencia de la libertad, obnubilará de miedo su conciencia y los convencerá de la necesidad de ponerse a disposición del gran líder.

O tal vez no, puede que solo sea la obra de algún huérfano de imaginación deseoso de congraciarse con sus superiores…

Coros infantiles como este debieron estremecer los templos en la combativa Esparta, me los imagino en boca de los chicos de la Alemania nazi, gritados por los niños de la España de Franco, y no deben haber escapado de ellos los párvulos del extinto campo socialista.

¿Tendrán lemas semejantes los chinitos de hoy? ¿A quién ofrendarán la vida los nuevos pinos norcoreanos?

Importa poco quien haya sido el de la idea de poner a los pioneros a entonar semejantes himnos, si desde los padres hasta el Ministro casi todos lo aceptan o lo aplauden.

Los que se percatan de la barbaridad nada dicen, por no precipitar la ira sobre sus hijos, por mantener el puesto de trabajo, o por pura y simple apatía.  Da lo mismo entonces quien lanzó la primera piedra, el resto se hace cómplice con su silencio, y todo sigue igual. ¿Pero hasta cuando?

¿Cuánto tardará en despertar este pueblo?  ¿Cuánto más tendrá que aguantar antes de rebelarse contra la hegemonía de los brutos?  Creo que la cosa demora, pero últimamente se han hecho más frecuentes las señales.