¡Un patrocinador, necesitamos un patrocinador!
HAVANA TIMES – Tras el anuncio del nuevo proceso de parole para cubanos y la necesidad de contar con un patrocinador que desde Estados Unidos inicie y sostenga el proceso, se ha desatado la polémica, entre el chiste y la tristeza.
¿Qué hace una persona que necesite salir de Cuba y no cuenta con un patrocinador? ¿Está exento el proceso del peligro de trata de personas, abusos y estafas? ¿La medida para frenar la entrada irregular de cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos a EE. UU. garantiza la protección de los derechos humanos de los migrantes?
Mientras los precios y el desabastecimiento continúan en ascenso en la isla, las personas que desean migrar deben clamar y hallar un patrocinador que les garantice la entrada a territorio estadounidense. Las rutas, el peligro y el negocio a través de Nicaragua y demás países centroamericanos termina a más de un año de que el Gobierno de Daniel Ortega, en contubernio con la Administración de La Habana, permitiera que los cubanos entraran sin visado a su territorio.
Esta semana también trascendió que el Tribunal Supremo Popular revocó la sanción de limitación de libertad que cumplía el trovador cubano Fernando Bécquer por abusos sexuales. Ahora tendrá que cumplir los tres años y cuatro meses de sanción “en régimen interno, en un establecimiento”.