En una encrucijada, las relaciones Cuba-EE.UU. (I)
Alberto N Jones
HAVANA TIMES, 24 de diciembre — En mayo del 2008, Barack Obama, en un esperado discurso pronunciado en Miami en medio de su campaña electoral, denunció que el entonces presidente George W. Bush había fracasado en su política aislacionista contra Cuba.
El dijo que si resultaba electo, nombraría a un enviado especial para Latinoamérica, invertiría millones de dólares en una región que había estado desatendida, abriría los viajes a Cuba, especialmente para los cubanoamericanos, porque ellos serían los mejores embajadores de la democracia y, además, expresó su voluntad de discutir las diferencias políticas existentes con el gobierno cubano.
Dos años después de este discurso, la única promesa que ha cumplido el ahora presidente Barack Obama, ha sido la de aflojar las regulaciones de viajes de los cubanoamericanos, un empujón a la económica de Miami relacionado con Cuba, y un increíble 64 por ciento de aprobación en esta ciudad, en una reciente encuesta de Bendixen.
Al mismo tiempo, la mayoría de los cubanoamericanos de toda la Unión han expresado su apoyo a estas nuevas regulaciones, votando en masa con sus pies, viajando masivamente hacia la patria, a pesar del trato poco amistoso y hasta hostil por parte de los funcionarios de la aduana cubano y de inmigración que siguen viendo a los cubanoamericanos como posibles enemigos.
Por todo esto es casi obligatorio que mejoren las relaciones de los funcionarios del aeropuerto con los visitantes cubanoamericanos, para poder consolidar este nuevo desarrollo, creando una atmósfera de bienvenida mucho más amistosa, como existe en todas las terminales aéreas del mundo.
El precio de los tickets es otro importante asunto que debería tenerse en cuenta por el impacto negativo que tiene en cientos de ancianos cubanoamericanos con bajos ingresos, a quienes se les niega la posibilidad de visitar su país de origen por el alto impuesto a sus pasaportes y visas cubanas y por tener que comprar uno de los pasajes de avión más caros del mundo.
Prueba de esto es el hecho de que un boleto de viaje Miami-República Dominicana o Miami-Haití, cuesta solo 225.00 dólares, mientras que el de Miami-Santiago de Cuba, que es solo la mitad de tiempo de vuelo de los dos primeros, cuesta 500.00 dólares.
Además cientos de ciudadanos de la tercera edad y otros que temen volar, se podrían beneficiar con el posible servicio de un ferry Fort Lauderdale-Habana y uno Fort Lauderdale-Santiago de Cuba, que podrían doblar o triplicar el volumen de pasajeros y a un menor precio.
Quizás algunos crean que estas ideas se han apartado del tema principal. Al contrario, la intención es promover, desarrollar y expandir la única medida entre Cuba-Estados Unidos que el presidente Obama ha promulgado.
El nuevo Congreso promete mucho menos acción con respecto a Cuba
Las elecciones intermedias del 4 de noviembre de 2010 que tuvieron un desastroso resultado para el Partido Demócrata, pues Concejales, Alcaldes, legisladores estatales, Gobernadores, Jueces, Congresistas y Senadores de Estados Unidos fueron barridos de las oficinas como basura. Fue la peor derrota política del Partido Demócrata en sesenta años.
Más debilitado y desmoralizado, ninguna de las promesas hechas durante su campaña, —que el presidente no pudo cumplir por su indecisión, por miedo a mantenerse en su posición y una tendencia a los compromisos aunque él tenía la mayoría en el Congreso y en el Senado—, se cumplirán en la segunda mitad de su cargo presidencial.
Por el contrario, el Partido Republicano y el Tea Party se fortalecen y aumentan su autoridad, dándoles la posibilidad de seleccionar para ocupar los más altos puestos a los políticos más reaccionarios, religiosos, fundamentalistas y xenofóbicos de la historia reciente de Estados Unidos.
El ala derecha de la delegación de cubanoamericanos en el Congreso nunca antes estuvo en una posición de liderazgo, desafiante y de tal magnitud. Desde ese punto de vista y con la ayuda de nuevos radicales, ellos podrán reformular sus ideas, así como trazar y dirigir un largo e importante segmento del gobierno de los Estados Unidos.
Con el nombramiento de la congresista Ileana Ros-Lethinen como jefa del poderoso Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, ya podemos imaginar las propuestas de leyes agresivas y belicosas que emergerán de su oficina; mientras todo aquel que intente comprender, dialogar o mantener lazos amistosos con gobiernos que ella odia y con los cuales sueña con destruir, no verán la luz del día.
El resultado neto en las relaciones Cuba-Estados Unidos después de las desastrosas elecciones intermedias se pueden tomar como el más importante revés político en los últimos 50 años que pudiera llegar a una confrontación política y militar, similar a los trágicos días de 1962 durante la Crisis de los Misiles.
Durante 50 años, Cuba se ha defendido de todo tipo de agresiones, denunciándolas a través de los medios de comunicación, apelando a todo tipo de organización internacional de reputación, grupos de solidaridad, escolásticos reconocidos mundialmente, ganadores del premio Nobel de la Paz, etc.
Ni siquiera los 19 años consecutivos que la Asamblea General de las Naciones Unidas ha condenado y demandado el cese del bloqueo contra Cuba, ha hecho que este presidente o ningún otro de sus antecesores responda.
De lo único que estamos seguros en este momento es que el pueblo cubano ha sufrido demasiado, está cansado y reclama un momento de paz, felicidad y tranquilidad para su patria y para sus hijos.
Después de revisar cuidadosamente este escenario, no es exagerado llegar a la conclusión de que si el embargo no es desarticulado de forma efectiva y llevado a su abrupto final, puede fácilmente perdurar junto con la población cubana, durante los próximos cincuenta años.
En nombre de la paz, la armonía, el amor y el entendimiento entre los pueblos de Cuba y Estados Unidos, brindaré al mundo, algunas sugerencias no solicitadas, empíricas, que no se han intentado jamás y con la cuales no tenemos nada que perder; si funcionan, despedazarán la base del embargo impuesto a nuestro pueblo.
Continuará…