Vistazo a la Feria del Libro de Miami

Maria Elena Lavaud con su publico.

HAVANA TIMES – Un auténtico tsunami de público inundó el boulevard Abel Holtz, campus del Miami Dade College, donde la amplia presencia de escritores propició el debate con los lectores, factor esencial de la creación literaria, cerrando así la Feria Internacional de Libro, desarrollada del 11 y al 18 de noviembre en esa emblemática ciudad del sur floridano.

Entre los muchos encuentros y presentaciones, destacaron este domingo el cubano Carlos Alberto Montaner, con la reedición de Las raíces Torcidas de América Latina, en tanto por los Estados Unidos sobresalieron Ben Rhodes y Dan Pfeiffer, además de autores menos publicitados, pero que otorgaron relevancia a una masiva y múltiple representación literaria que es actualidad cultural en nuestra gran área geográfica.

Hubo quienes afirmaron que la Casa Blanca invadió la Feria de Miami, pues entre los títulos más solicitados estuvieron The World as it, obra monumental del citado exasesor presidencial de Barack Obama, también el dueto de ensayos políticos Yes We (Still) Can y From the Left y Trump Must Go, ambos de Pfeiffer, quien aborda en reto contradictorio las dos últimas administraciones estadounidenses. Completaron la temática Michelle Obama y su impactante Becoming, así como John Kerry con Every Day is Extra.

The School Bully

Otras notas merecedoras de especial elogio, dado su impacto comunitario, fueron Gabrielle Oliver, quien a sus trece años clasifica como la escritora más joven de la Feria, abordando un tema definido en su título The School Bully, en el cual la chica jamaicana de origen desborda naturalidad por el impacto testimonial, mientras abundaron otras propuestas de incidencia social en la primera fila de carpas a la entrada del área de ventas, dedicadas a diversas propuestas de la llamada literatura de auto ayuda.

Muchos fueron los países presentes: Colombia, la mencionada Jamaica, y especialmente Perú, cuyo Stand destacó con los libros más pequeños del mundo junto a una oferta amplia, a la par barata, de textos de apoyo a la escuela. De acuerdo con la gestora Miriam López, la actividad editorial ha crecido en su país, tanto que no faltan en la Feria de La Habana desde el año 2000, evento también célebre por su magnitud.

Venezuela ocupó un espacio singular debido a la acción conjunta de Mel Proyects y Arts Connection, promocionando creadores propios junto a invitados de otras nacionalidades, entre estos últimos el cubano Fernando Pruna, autor de una meritoria lección histórica que ocupa el grueso volumen de La Habana 505. De la capital cubana también trata con éxito la venezolana Maria Elena Lavaud, cronista de notable éxito en Sudamérica, quien nos regaló La Habana sin tacones, aguda mirada a la realidad en la Mayor de las Antillas.

Lo cubano, tan influyente en la vida cultural de Miami, quedó bien afincado con otros títulos, destacándose la camagüeyana Sandra Gutiérrez, presente en la Feria junto a su novela Un tiempo para el amor y la revolución.

Varios de los autores antes citados, cubanos y de otras nacionalidades, accedieron a entrevistas que Havana Times irá ofreciendo paulatinamente como ecos de un encuentro cultural calificado de Éxito Mayor por la profesora del Miami Dade College, Mariela Gal, una de las coordinadoras del evento, personalmente a cargo de las letras hispanoamericanas.

Vicente Morin Aguado.   [email protected]