Turbas orteguistas golpean a sacristán de iglesia en Matagalpa, Nicaragua

La iglesia San Felipe de Molagüina, ubicada en centro de la ciudad de Matagalpa, ha sufrido varios ataques de turbas. Foto: Cortesía MosaicoCSI.com

“Son bestias que obedecen a matar” enviadas por el régimen Ortega-Murillo, denuncia monseñor Róger García tras condenar represión

Por Yader Luna  (Confidencial)

HAVANA TIMES – El sacristán de la iglesia San Felipe Apóstol de Molagüina, de Matagalpa, Michael Rodríguez, denunció haber sido golpeado en la cara por turbas orteguistas que llegaron al templo a acosar y fotografiar a los feligreses.

El joven, que además fue rociado con gas pimienta, narró que la tarde del martes 25 de febrero, cuando estaban a diez minutos de iniciar la eucaristía, escuchó  gritos de la secretaria del sacerdote en la entrada del templo. “Cuando salí a asomarme, veo que una mujer estaba forcejeando con la secretaria, que es una señora mayor, para quitarle su celular”, contó en entrevista con el portal matagalpino Mosaico CSI.

“Los feligreses también se unieron a ayudar a la secretaria porque habían entrado un grupo de personas a tomar fotografías al templo y a las personas que se encontraban esperando la misa”, explicó.

Rodríguez indicó que dos mujeres lo agredieron inicialmente enojadas porque apartó a una de ellas de la secretaria que estaba acorralada, cuando un hombre se acercó y le pegó un puñetazo en el ojo.

“Con el golpe caí al suelo, y en ese momento las mujeres me echaron algo en la cara que empezó a arderme. Fue la feligresía la que logró sacarlos y apartarlos”, expresó.

El sacristán aseguró que es extraño este ataque de turbas y la intimidación porque en la iglesia no había ningún tipo de protesta contra el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo. “Nadie les dijo nada, ni les hizo nada, si traían ese gas pimienta es porque ya venían directo a atacar”, insistió.

“Mandados por falsos pastores que dirigen Nicaragua”

El párroco de esta iglesia, monseñor Róger García, condenó el ataque y señaló que desde hace un tiempo las turbas sandinistas han asediado la parroquia, al igual que otras iglesias de Nicaragua.

“El atrevimiento y la agresividad con la que actúan estos hombres es increíble y no se entienden por qué este Gobierno que tenemos les da esa clase de autorización”, denunció.

Monseñor Róger García ha denunciado el asedio en la iglesia San Felipe de Molagüina en Matagalpa. Foto: Cortesía MosaicoCSI.com

Monseñor García ha cuestionado, en varias ocasiones, la represión en el país y manifestó que el régimen Ortega-Murillo transforma a muchos de sus seguidores “en bestias que obedecen a matar”.

 “Torturan y matan sin razón alguna, pasan como una aplanadora llevándose a quien sea por delante. Me quedé tieso viendo hasta dónde llega la maldad, para mí estos son nuestros gobernantes (los que dirigen estos ataques). Ellos (las turbas) no trabajan de forma independiente, ellos son mandados y son mandados por los falsos pastores que dirigen Nicaragua”, dijo el sacerdote.

“Los falsos pastores persiguen, devoran, comen, matan, ultrajan a sus corderos, al pueblo de Dios”, insistió.

Piden respeto a templos

La Diócesis de Matagalpa se pronunció sobre este ataque de las turbas orteguistas y explicó que el sacristán fue golpeado en el ojo derecho “por un grupo de personas que inusualmente llegaron a fotografiar el templo previo a la eucaristía”.

“Pedimos respeto a nuestros templos que son casa del Señor y suplicamos que al iniciar esta Cuaresma ofrezcamos oración, sacrificio y ayunos por nuestro país. Y que cualquier mensaje de paz y amor sea realmente efectivo”, expresó la Diócesis en un comunicado.

El 17 de noviembre del año pasado, pobladores de Matagalpa estuvieron encerrados por varias horas en la iglesia San Felipe de Molagüina, al centro de la ciudad de Matagalpa, cuando se realizaba una misa en memoria de Eddy Montes, preso político asesinado en la cárcel.

En esa ocasión turbas orteguistas lanzaron piedras y chibolas de vidrio a los feligreses, frente a agentes de la Policía que mantenían cercada la salida principal del templo católico.

En ese mismo ataque, un paramilitar se abalanzó sobre el periodista Eduardo Montenegro, a quien le despojó de una cámara valorada en más de dos mil dólares.