Parlamento cubano reúne por un día

Marino Murillo es el hombre fuerte de la económia cubano. Foto: cubadebate.cu
Marino Murillo es el hombre fuerte de la económia cubana. Foto: cubadebate.cu

HAVANA TIMES (dpa) —  El Parlamento cubano celebra hoy su primer pleno del año, en la que es a la vez la primera sesión de la cámara elegida en febrero al inicio del segundo y último mandato del presidente Raúl Castro.

Castro, de 82 años, anunció al ser reelegido en febrero por un segundo periodo de cinco años que dejará el poder después de su actual mandato. El menor de los Castro asumió la presidencia en 2006 de forma interina tras la enfermedad de su hermano Fidel y fue elegido formalmente para el cargo en 2008.

El Parlamento formado en febrero celebrará hoy su primer pleno del año, centrado como es habitual en asuntos económicos y de presupuesto. Las comisiones permanentes del Legislativo se reunieron en los últimos días para los debates previos al pleno.

Uno de los temas centrales debe ser el avance de las reformas económicas de los últimos años. Bajo la presidencia de Raúl Castro, la isla impulsa una “actualización” de su modelo económico con elementos de mercado.

Pese a ello, Castro ha subrayado en varias ocasiones que el país mantendrá sus premisas socialistas y el monopolio del Estado en los principales sectores de la economía.

“En Cuba no hay un cambio hacia el capitalismo, no hay una transformación de la propiedad, ni tampoco un flirteo con los preceptos de ese sistema”, detalló el viernes la web oficialista Cubadebate explicaciones del vicepresidente del Consejo de Ministros Marino Murillo, considerado el “zar” de las reformas económicas.

Después de ajustes para liberar parcialmente el mercado automotriz e inmobiliario y para impulsar el trabajo por cuenta propia, entre otras medidas, se estima que Cuba busca impulsar también reformas de mayor calado. Uno de los cambios barajados para los próximos es el fin de la dualidad monetaria.

Se espera que Raúl Castro vuelva a mencionar asimismo la lucha contra la corrupción, una de sus principales banderas desde que llegó al poder.

El parlamento cubano reúne dos veces al año por tres o cuatro días, primero en comisiones y después el plenario. Casi siempre todos los decreto-leyes del ejecutivo son aprobados con unanimidad.