Gobierno y oposición venezolanos aceptan grupo acompañante

Caracas. Foto: Caridad

HAVANA TIMES – Representantes del Gobierno y la oposición de Venezuela acordaron hoy en Santo Domingo la conformación de un grupo de países amigos, formado por México, Chile, Bolivia y Nicaragua, para acompañar una nueva etapa de diálogo en busca de una solución a la crisis venezolana, reportó dpa.

Así lo informó el presidente de República Dominicana, Daniel Medina, después de una reunión de más de seis horas de las delegaciones venezolanas.

“Podemos informar que la reunión de ayer fue buena y que la de hoy fue mejor. Avanzamos en la definición de una agenda de los grandes problemas de Venezuela y se acordó (la conformación de) una comisión de países amigos, como comisión de seguimiento, integrada por México, Chile, Bolivia y Nicaragua. Es probable que se anuncien dos países adicionales”, declaró a los periodistas.

Medina agregó que las delegaciones del Gobierno y la oposición se volverán a reunir el 27 de septiembre, nuevamente en Santo Domingo, en lo que será una tercera reunión exploratoria para formalizar la nueva fase de diálogo.

El jefe de la delegación del Gobierno, el dirigente oficialista Jorge Rodríguez, dijo que hoy las conversaciones marcharon “mucho mejor” y confirmó la aceptación del grupo de países amigos y un próximo encuentro el 27 de este mes.

“Es el diálogo el que se impone. Un diálogo de paz es el que se debe instalar para que Venezuela pueda dirimir sus asuntos entre venezolanos y venezolanas. A pesar de las dificultades que hemos tenido que sortear, de las agresiones que hemos recibido del imperio más poderoso de la historia, de los bloqueos a nuestra economía, insistimos que el diálogo es el que se debe imponer”, señaló.

Además de acordar la conformación del grupo de países amigos, “hemos avanzado en puntos importantes de la agenda de trabajo y ya nos convocamos para el 27 de septiembre, aquí en República Dominicana”, añadió.

En Caracas, la alianza opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) difundió una declaración en la que señala sus condiciones para concretar un proceso de negociación con acompañamiento internacional.

Dijo que su objetivo es sustituir constitucionalmente al Gobierno de Maduro, pues “solo a través de un cambio democrático y no violento será posible superar la actual tragedia social y económica que azota a todos los venezolanos”.

La MUD señaló que atendió la invitación de Medina y de la ONU a la reunión exploratoria de Santo Domingo, donde expuso sus condiciones para el inicio de un proceso de “negociación serio” y con sólido soporte internacional.

Indicó que las condiciones sobre las que se está avanzado tienen que ver con la participación de países amigos que sean garantes, instituciones multilaterales y “testigos en la negociación”.

“Hemos decidido conjuntamente seis países que contribuyan a garantizar el eventual proceso de negociación y su cumplimiento. El establecimiento de un cronograma de implementación de acuerdos con garantías y acompañamiento internacional y la definición de un país neutral sede para las negociaciones”, indicó.

Señaló que entre los puntos indispensables para una negociación y eventual acuerdo están: la renovación equilibrada del Consejo Nacional Electoral (CNE), el establecimiento de un cronograma electoral con garantías de pulcritud, sin inhabilitados, fechas precisas, incluyendo la elección presidencial (prevista para fines de 2018) y una calificada observación internacional.

Además, la liberación de políticos presos, el retorno de los exiliados y el cese de la persecución política, la normalización constitucional del país y la inmediata atención a la emergencia humanitaria.

“Por último, hemos planteado la necesidad de someter a un referéndum popular aprobatorio cualquier acuerdo que surgiese del eventual proceso de negociación”, planteó.

Las conversaciones en Santo Domingo tuvieron como facilitadores a Medina y al ex jefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, además del ex presidente dominicano Leonel Fernández.

Un esfuerzo de diálogo a fines de 2016, también en República Dominicana, fracasó debido a la imposibilidad de llegar a acuerdos sobre las exigencias de la oposición.

Las diferencias se profundizaron entre abril y julio, debido a las protestas contra el Gobierno que dejaron más de 120 muertos, después de que dos sentencias del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) despojaran a la Asamblea Nacional de sus atribuciones.