Gobierno y FARC piden a la ONU supervisar el fin del conflicto en Colombia

Por Isaac Risco (dpa)

Se saludan Juan Manuel Santos y Timoleón Jimenez tras la firma de los acuerdos en septiembre de 2015. Foto: Ladyrene Pérez/ Cubadebate.
Se saludan el presidente colombiano Juan Manuel Santos y el jefe guerrillero Timoleón Jimenez tras la firma de uno de los acuerdos en septiembre de 2015. El anfitrion es Raúl Castro (c).  Foto: Ladyrene Pérez/ Cubadebate.

HAVANA TIMES (dpa) — El Gobierno colombiano y las FARC anunciaron el martes un acuerdo para crear una misión de observadores de paz bajo mandato de la ONU, un nuevo paso para intentar poner fin en breve al largo conflicto en el país sudamericano.

Las dos delegaciones de paz comparecieron de forma conjunta en La Habana para anunciar que pedirán a la ONU “desde ya” que cree la misión internacional que debe supervisar el cese el fuego definitivo.

El grupo debe “monitorear” y “verificar” el acuerdo sobre el fin del conflicto y el desarme de los grupos armados que las partes esperan alcanzar en las próximas semanas, según el cronograma fijado para el tramo final del proceso de paz.

“Hemos decidido crear un mecanismo tripartito de monitoreo y verificación del acuerdo sobre el cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo y la dejación de las armas”, señaló un comunicado conjunto leído en La Habana.

La misión debe durar 12 meses, con posibilidad de ser prorrogada, y estará integrada por observadores de países latinoamericanos, según el anuncio. En ella participarán también el Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

“Hemos acordado que ese componente internacional será una misión política de la ONU integrada por observadores de países miembros de la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños)”, indicó el comunicado.

“Con ese propósito, hemos decidido solicitar al Consejo de Seguridad de la ONU la creación desde ya de esa misión política con observadores no armados por un período de 12 meses, prorrogables a petición del Gobierno Nacional y las FARC”, agregó el texto.

El jefe negociador del Gobierno de Juan Manuel Santos, Humberto de la Calle, saludó el acuerdo al igual que el líder de la delegación de las FARC, Luciano Marín, alias “Iván Márquez”.

De la Calle y “Márquez” coincidieron en asegurar que se trata de un paso definitivo hacia el fin del conflicto armado interno que vive el país desde hace más de medio siglo.

Posteriormente, en una declaración desde la Casa de Nariño, su sede de Gobierno, Santos explicó que se trata de observadores no armados y consideró que el acuerdo es “el paso más concreto” que las partes “han dado hasta ahora, el que hace el proceso más irreversible”.

El mandatario reconoció en compañía de senadores de todos los partidos políticos, a excepción del Centro Democrático que es liderado por el ex presidente Álvaro Uribe, que pese a los puntos pendientes, “la dejación de armas por parte de las FARC con todas las garantías es una condición necesaria para la paz”.

“La paz requiere de unidad”, reiteró Santos al invitar a sus compatriotas a unirse “en torno a ese objetivo supremo de la nación”.

Ambas partes anunciaron en septiembre del año pasado que quieren alcanzar un acuerdo de paz definitivo a más tardar en marzo de este año.

Pese a que la guerrilla ha señalado en varias ocasiones en las semanas pasadas que el acuerdo final podría retrasarse un poco, Márquez se mostró hoy confiado de alcanzar el cierre exitoso del proceso de paz “en el curso de este 2016”.

El Gobierno colombiano y las FARC negocian desde noviembre de 2012 en Cuba para intentar poner fin al conflicto de más de cinco décadas en el país sudamericano. Se estima que la guerra ha dejado desde mediados de los años 60 más de 220.000 muertos y millones de desplazados en Colombia.

Las FARC, una guerrilla de origen rural e inspiración marxista, son el principal grupo armado que combate al Estado colombiano. Desde el inicio del proceso de paz, ambas partes han cerrado con acuerdos cuatro de los cinco puntos de la agenda de paz pactada.

Tras alcanzar compromisos referentes a una reforma agraria, la futura participación política de la guerrilla y la lucha contra el narcotráfico y el cultivo de drogas, la mesa de diálogos anunció en diciembre un acuerdo para resarcir a las víctimas del conflicto.

Las partes negocian actualmente las condiciones para poner fin al conflicto, así como sobre varias salvedades hechas a los cuatro acuerdos previos.

Después tienen previsto debatir sobre los mecanismos de implementación de los acuerdos. El Gobierno de Santos ha anunciado que celebrará un referéndum para refrender el texto del acuerdo de paz al que llegue con las FARC.