Economistas dedicados a Cuba se reúnen en Miami

Por Vicente Morín Aguado

Silvia Pedraza en La Habana

HAVANA TIMES – El próximo 25 de julio comenzará en Miami la conferencia anual de la Asociación para el Estudio de la Economía de Cuba (ASCE en inglés), con la segura presencia de varias decenas de profesionales, representativos de universidades y demás instituciones afines de los Estados Unidos, otros países americanos y de Europa.

Los economistas residentes en Cuba rara vez aceptan las invitaciones, pues en la Plaza de la Revolución no firman el visto bueno a su presencia en el evento.

Desde el pasado año, la profesora Silvia Pedraza, una villareña a cargo del Departamento de Sociología en la Universidad de Michigan, preside la Asociación. Su razón de ser fue definida por ella misma en julio de 2018:

“ASCE es una de las muchas instituciones cubano-americanas fundadas para preservar el pasado de los fundadores, y continuar aportando para su tierra natal, contribuyendo a su futuro como una sola nación.”

Con optimismo, ante la encrucijada de un inevitable cambio generacional, la profesora afirmó que  “¡El año próximo duplicaremos la cantidad de profesionales presentes aquí!”

A las puertas de una nueva conferencia, nuestra entrevistada responde al reto de aquel momento:

“ASCE sí ha estado creciendo. Creo que en esta conferencia se verá que hemos logrado atraer a más profesionales que están a la mitad de sus carreras (mid-career professionals) y gente joven.”

La XXIX Conferencia ha convocado a participar bajo el título Cuba: crecimiento o declive, ¿Ha muerto la Revolución?”, confirmándose una destacada presencia de ponentes residentes en la Isla, quienes abordarán temas tan variados como La Nueva Constitución, la agricultura, los problemas sociales vinculados a la modernidad, entre ellos la Internet y los derechos de la comunidad LGBTIQ, además  del trabajo por cuenta propia, este último con la presencia de emprendedores actuantes en su país, iniciativa de ASCE que ya cumple un lustro de realizarse.

La valoración del programa de trabajo para tres jornadas tiene su centro en los 60 años de la Revolución, título recurrente en varios de los trabajos que pueden considerarse a priori de mayor relevancia, destacándose el profesor emérito de la Universidad de Pittsburg, Carmelo Mesa-Lago, quien abrirá el cónclave con su conferencia La economía cubana después de 60 años de revolución: continuidad y cambios.

También ocupan destacada atención asuntos claves de actualidad internacional, especialmente las relaciones Cuba-EE.UU., marcadas por la agresividad de la Administración Trump al darle curso a los títulos III y IV de la controversial Ley Helms-Burton, junto a asuntos de la geopolítica del Caribe, donde aparecen en primer plano el petróleo, la colaboración cubana con Venezuela y las potencias en pugna: Rusia y Estados Unidos.

Detalle altamente significativo de la conferencia por comenzar es la participación de graduados en la Cuba de Fidel Castro, ahora emigrados a otras latitudes donde ejercen con notable éxito sus profesiones. La condición de una doble experiencia, la Patria y el exilio, confiere a sus trabajos un interés especial para la mejor comprensión de la problemática cubana.

¿Qué puede esperarse de tan amplia agenda? La presidenta de ASCE opina:

Foto: Larry Wiggs

“Los economistas y otros politólogos que estudian la sociedad cubana siempre tienen aportes concretos y propuestas constructivas para un mejor futuro de la Isla. Naturalmente, enfatizan la necesidad de que hayan cambios más profundos para que la economía pueda marchar adelante.”

Es penoso que un esfuerzo de tal magnitud sea despreciado por quienes tienen la obligación de escuchar las mejores propuestas para el bienestar de los ciudadanos cuya representación proclaman. Se desconoce otra reunión similar por su amplitud de temáticas, junto a los participantes, en el ámbito de los estudios económicos específicos sobre la Isla.

Anticipándose a cierta frase repetida por la propaganda del partido gobernante en Cuba, que pretende demeritar las instituciones fuera de su control, calificándolas de mercenarias, obedientes a un oscuro dictado de Washington que es difícil identificar en la práctica, repetimos la opinión de la presidencia de la Asociación para el estudio de la economía de Cuba, vísperas de su próxima conferencia anual:

“Preferimos autofinanciarnos, por eso andamos con fondos escasos. Por eso también podemos responderle a cualquier invitado que es bienvenido sin discriminación alguna, eso sí, la agenda no la puede definir ni el Gobierno de La Habana ni sus opositores, la agenda la pone ASCE.”

 

Vicente Morín Aguado: [email protected]