Detenciones y mitos detrás de la “fiebre” por las hojas de eucalipto en Nicaragua

Un hombre vende hojas de eucalipto, consideradas como preventivas ante el coronavirus, en una avenida de Managua (Nicaragua). EFE/Jorge Torres | Confidencial

Tras la fiebre por las hojas de ecualipto, la Policía detuvo a un grupo de vendedores ambulantes que las ofrecían como remedio contra covid-19

Por Confidencial 

HAVANA TIMES – La Policía de Nicaragua detuvo este jueves a un grupo de vendedores ambulantes que ofrecían hojas de eucalipto. Esta detención se da luego de varios días de fiebre por las hojas de eucalipto anunciadas por los vendedores como medicina natural y preventiva contra la pandemia del coronavirus.

Los detenidos fueron cuatro personas, dos mujeres y dos varones, quienes fueron subidos a una patrulla policial, junto con hojas de eucalipto como evidencia, hacia una estación, según imágenes transmitidas por el medio digital, Artículo 66, reportó Efe.

Las hojas con sus ramas son vendidas en semáforos, mercados, junto a los bulevares, y hasta se ofrecen en entregas a domicilio. Y los nicaragüenses las compran, como si se tratara de la esperada vacuna contra el coronavirus, o como si se tratara de mascarillas N95 a bajo costo.

Como medida de prevención

La fiebre por las hojas de eucalipto, desatada por la pandemia de covid-19 en Nicaragua, aparece en un contexto en el que según el Ministerio de Salud (Minsa), hay 279 infectados y 17 muertos. Aunque conteos independientes como el del Observatorio Ciudadano COVID-19 reportan 1594 y 351 fallecidos. Las hojas de eucalipto, que hasta el pasado fin de semana no valían nada, hoy son vendidas a precios que van desde entre diez y cincuenta córdobas (0.3 a 1.5 dólares), reportó la Agencia.

“Yo estoy usando eucalipto con mi familia por prevención. No estamos infectados”, explicó un nicaragüense en sus redes sociales. “Yo por eso tengo mi propio árbol de eucalipto en el patio de mi casa, ¿ya vieron por qué es importante sembrar árboles? ¡Tendríamos hasta un mejor clima!”, celebró otra ciudadana, que probablemente desconoce que la especie seca los suelos a su alrededor.

Lo que anima a los nicaragüenses a enfrentar la pandemia cargados con hojas de eucalipto probablemente son sus propiedades. Según la Fundación Centro Nacional de la Medicina Popular Tradicional, el eucalipto es: “descongestionante, antiséptico, antibronquítico, anticatarral, antitusivo, bactericida y balsámico”, características ideales frente a neumonías y gripes.

Eucalipto y su “efecto placebo”

“Realmente lo que hace es un efecto placebo, crees que te va a ayudar y, de repente, te sentís mejor, no es trascendente para enfrentar el covid-19, aunque sí hay pacientes que toman eucalipto y asocian su mejora a eso”, señala José Antonio Vásquez, médico y cirujano.

Vásquez, quien es miembro de un equipo de especialistas que brindan teleconsultas sobre el covid-19 de forma gratuita, reconoce las propiedades del eucalipto, pero explica que una taza de té con ese ingrediente no hará diferencia en un paciente con el nuevo coronavirus.

La rapidez con la que los árboles de eucalipto en algunos bulevares de Managua y de otras ciudades pierden sus ramas, muestran cuánto los nicaragüenses lo asocian como arma efectiva ante la pandemia por covid-19.

Aprovechan fiebre por eucalipto

El negocio de las hojas de eucalipto atrae hasta a los niños de los semáforos. Pero también a las personas que no quieren pagar por algo que hace unos días tomaban gratis. “Estoy ganándome ahora el centavito con la rama”, dijo a Efe, una mujer que vende hojas de eucalipto en un semáforo de Managua.

Otro vendedor ambulante afirmó haber ganado el equivalente a 25 dólares con las hojas de eucalipto en su primer día. Una cantidad soñada para la mayoría de los habitantes del segundo país más pobre de Latinoamérica detrás de Haití.

Eso ha provocado que la Policía Nacional realice rondas nocturnas, y más recientemente, detenciones, para cuidar los árboles. Esto es algo que nunca habían hecho las autoridades, ni siquiera cuando aparecen empresas haciendo cortes prohibidos por la Ley para cuidar los cables eléctricos.