Canciller nica visita al prófugo Martinelli en Panamá
Ricardo Martinelli se encuentra asilado en la embajada de Nicaragua en Panamá desde febrero pasado. Algunos incluso sugieren que dirigió las recientes elecciones presidenciales desde una hamaca en su refugio
HAVANA TIMES – El canciller nicaragüense Denis Moncada asistió a la toma de posesión del presidente electo Jose Raul Mulino en Panamá. Durante su viaje, también aprovechó para visitar al expresidente Ricardo Martinelli, asilado en la embajada de Nicaragua.
“Recibí la grata visita del honorable canciller de la hermana República de Nicaragua Dennis Moncada quien vino a la toma de posesión del presidente José Raúl Mulino”, compartió Martinelli en su cuenta de Instagram.
Martinelli también compartió una fotografía donde evidencia que el actual ministro de Relaciones Exteriores del régimen sandinista llegó acompañado de una comitiva nicaragüense que incluye al ministro de Comercio y la ministra del Interior. A la fotografía de este encuentro también se sumó la embajadora nicaragüense en Panamá.
Martinelli, desde su exilio en la embajada nicaragüense, expresó su felicidad y agradecimiento a Panamá por la oportunidad de cambiar el país.
“Ustedes no saben lo que yo estoy gozando aquí en mi hamaca un día como hoy, yo si estoy feliz y contento. Gracias Panamá, gracias por habernos dado la oportunidad de cambiar este país”, expresó Martinelli en un video.
Algunos panameños atribuyen el triunfo de Mulino a Martinelli, incluso sugiriendo que dirigió el proceso electoral desde su hamaca, un escenario que usa con frecuencia desde que se refugió en la embajada nicaragüense. Esta sede diplomática que también ha sido fuertemente criticada por utilizarse con fines políticos.
Durante su primer discurso como presidente Mulino recordó a su «amigo» Martinelli, a quien sustituyó para los comicios del pasado 5 de mayo después de que el exmandatario fuera inhabilitado políticamente por la condena a más de 10 años de prisión por blanqueo de capitales.
«Me enorgullece haber sido parte de ese gobierno que nos hizo soñar en grande y que el presidente Ricardo Martinelli, mi amigo, lideró en beneficio del pueblo. La receta fue simple: continuar lo que ya estaba bien, cambiar lo que no funcionaba y hacer lo que faltaba», señaló Mulino.