Santuario Nacional de San Antonio de Padua de La Habana
Fotorreportaje por Irina Pino
HAVANA TIMES – Hace poco hice un fotorreportaje sobre la Iglesia de Jesús de Miramar, y no quise dejar de tomar imágenes del Santuario Nacional de San Antonio de Padua, situado en 5ta y 60, perteneciente a la Orden de los Franciscanos. Este templo fue construido en 1949, por los arquitectos Salvador Figueras y Eloy Norman.
Es un edificio de estilo neorromanico, con una torre que termina en una cruz. Se nota a simple vista su solidez, por sus fuertes muros de piedra. Adentro, es sencillo, destaca el vitral del altar mayor, donde se dibuja una cruz, dando entrada a la luz solar, efecto que provoca serenidad en el observador. En sus paredes hay grabados alegóricos al Vía crucis, pero la curiosidad es que son solo rostros.
San Antonio de Padua
San Antonio de Padua, Fernando de Bulhöes, nace entre 1191 y 1196. Escogió la Orden Franciscana, el modo de vida pobre, renunciando a su familia de clase acomodada. Inteligente y estudioso de las sagradas escrituras, impartió clases en la Universidad de Padua, donde tuvo gran impacto en sus estudiantes. Lo llamaban El Arca del Testamento, por su erudición y gran oratoria, que lo llevó a dar sermones, predicando la fe en los Evangelios y el amor al prójimo por toda Europa. Siendo uno de los más sobresalientes predicadores de su época. Fue canonizado el 13 de julio de 1232, por el papa Gregorio IX, a los 352 días de su fallecimiento.
Se le atribuyen milagros, como la resurrección de un niño, la curación de enfermos, y la aparición del niño Jesús en sus brazos. Treinta años después sacaron el cadáver del sarcófago y vieron que el cuerpo estaba corrupto, menos su lengua, todavía intacta. Este hecho provocó más devoción hacia el santo, siendo él mismo, un milagro.
Oración a San Antonio de Padua
San Antonio, glorioso siervo de Dios, famoso por tus méritos y potentes milagros, ayúdanos a encontrar las cosas perdidas, danos tu ayuda en la prueba e ilumina nuestra mente, en la búsqueda de la voluntad de Dios.
Felicidades, Irina. Haz abierto un canal de información sobre el soporte arquitectónico del catolicismo en La Habana, oportuno y valioso sobre todo por la visualización de los enclaves, lo cual es muy motivador ya se ha dicho que una imagen vale más que muchas palabras, creo que más de mil, no importa cuántas; es un hecho, y eso moviliza, uno quiere ser testigo, estar allí, verificar.
Estoy seguro que tu trabajo en este sentido pone sobre ti un destino.
Felicidades.