Piezas del museo rodante habanero
Fotorreportaje por Ernesto González Díaz
HAVANA TIMES – Se les puede ver por toda La Habana, rodando y resolviendo miles de problemas. Son empleados incluso como taxis y los que en mejor estado se encuentran, están a disposición de los siempre entusiastas turistas siempre prestos a dar un paseo en la máquina del tiempo.
Chevrolets, Fords, Cadillacs Dodges, y demás marcas y modelos todos anteriores a 1960, son una muestra del ingenio e inteligencia del cubano, que prácticamente ha estado puesta a prueba desde nuestros inicios como nación.
Probablemente ni el más optimista de los fabricantes de estos autos pensó que casi 70 años después seguirían funcionando.
Esta es la parte de Cuba que desde mi punto de vista le da un grandioso atractivo turístico. El poder ver ese tipo de vehíclos, el disfrutarlos montándote en ellos es algo que hasta donde yo se, solo se puede hacer en Cuba de una manera tan natural. Cuba es una pieza de arte que vive en el presente y en el pasado.