La Habana: Avenida de los Presidentes

Fotorreportaje por Elio Delgado Valdés

HAVANA TIMES — La Avenida de Los Presidentes, más conocida como calle G, en la barriada de El Vedado en La Habana, es una de las avenidas más hermosas de la capital cubana.

Esta vía de doble circulación con un parque a casi todo lo largo, con bancos y árboles bien cuidados, comienza en  la avenida Salvador Allende (antes Carlos III) y termina en el Malecón.

En sus inicios tiene un busto del Mayor General  Bartolomé Masó, último presidente de la República en Armas, luego hay un bello monumento al presidente José Miguel Gómez, pero del resto de los presidentes cubanos durante la época capitalista, no se ha colocado ninguna estatua, busto, ni monumento.

En la actualidad la Avenida de los Presidentes cuenta con varias estatuas y bustos de presidentes latinoamericanos que se han destacado por su labor a favor de sus pueblos y de la integración latinoamericana.

Al final de la Avenida, ya en el Malecón,  se encuentra una estatua ecuestre del Mayor General Calixto García.

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6 thoughts on “La Habana: Avenida de los Presidentes

  • Lugar de interés omitido en la nota publicada:
    En la Avenida de los Presidentes, no lejos del Malecón, junto a la calle Calzada, se encuentra un monumento en forma de plazoleta circular, en cuyo centro se levanta el pedestal de una estatua, que fue cortada al nivel de los tobillos del personaje representado en ella. En ese lugar han quedado, como detalle grotesco a la vista de todos, los pies truncados de lo que fue la estatua, a la que además le fue borrada de su base la dedicatoria que la identificaba. Se trata del monumento a Tomás Estrada Palma, el primer Presidente de Cuba en su etapa republicana.
    Junto al pedestal, y formando parte del monumento, se encuentra la figura de bronce de una mujer sentada, vestida con una túnica, con una pluma y un pergamino en sus manos, en actitud de escribir.
    Todo lo aquí descrito lo ven a diario los miles de transeúntes que circulan por ese céntrico lugar, situado entre el Hotel Presidente y el edificio del MINREX. También puede verificarlo todo el que disponga de acceso a Internet, haciendo uso de la aplicación Google Earth.
    Sería interesante conocer el motivo por el cual se ignoró este sitio en la nota publicada, sin mencionarlo ni incluir fotos del mismo, pues su tamaño y el lugar donde se encuentra hacen imposible que pase inadvertido al recorrerse la Avenida. De todos modos ahí se encuentra, y el no mencionarlo no lo elimina de la realidad objetiva.

  • Me molesta que me tomen por estupido. Cuando este señor dice que “del resto de los presidentes cubanos durante la época capitalista, no se ha colocado ninguna estatua, busto, ni monumento” omite que las cortaron a ras de los tobillos y por eso le decian avenida de los zapaticos. El unico monumento restaurado es el del asesino de negros JMG, por obra y gracia de LEAL. Y nada mas.

  • Nada, que se sigue queriendo cambiar la historia.

  • Muy buen tema.

    Me sumo a la misma línea de Carlos Paz, pero en el caso de Salvador Allende.

    Nótese, que está cortado al nivel de la cadera, justo donde debía ir el cinto. Como diciendo que a Allende le faltaban pantalones.

    La mano tenía una manera rarísima de salir del pedestal. Porque el brazo izquierdo está en una posición pegada al cuerpo dirigiendose ligeramente hacia delante, como si se fuera a tocar la portañuela, pero al estar cortado a nivel de la cadera la mano izquierda no debería verse. Justamente como pasa con la Venus de Milo, ves los hombros y sabes que las manos deberían ir cubriéndose el pubis. Yo pensaba que la autora había querido decir que Allende se masturbaba con la izquierda.

    Pero la mano se veía. A veces. Otras veces no se veía. Estaba entre los dos niveles de arriba, como si la hubiera metido por debajo del podio y la hubiera sacado, pero extremadamente lejos del brazo que estaba pegado al cuerpo. Pocas veces se ha visto una mano tan fea, más bien parecía un guante vacío tirado en una esquina. En esta foto de Elio no veo la mano, que me parecía un detalle artísticamente interesante por lo incongruente. No se si es que se cae y la ponen o que se mueve. O si alguien decidió que no quedaba bien. O si un gracioso se la roba como se robaban los espejuelos en la estatua de Lennon. Pero una mano igualita está en las otras esculturas de la misma autora.

  • Yo corroboro el comentario de Carlos Paz y lo apoyo porque viví muchos años cerca de esa esquina de Calzada y G, exactamente frente a la cancillería del MINREX, en la Mansión Elsa donde vivía una tía de Bruno Rodríguez el flamante canciller cubano, su nombre era Salud y era la presidenta del CDR (!) pero volviendo al tema de la Avenida… No sólo fue la Estatua de Estrada Palma la que la chusma verde olivo y barbuda derrumbó en los inicios de la barbarie comunista, fueron las de otros presidentes de la era democrática en Cuba que fueron derrumbadas. Ahora (esto no llegué a verlo) han llenado la calle G con estatuas de presidentes foráneos, bueno no es tan malo, estoy seguro que el día que a Cuba vuelva la democracia, esas estatuas permanecerán allí y junto a ellas levantaremos nuevamente la de los Presidentes de la Cuba republicana.

  • Quisieron borrar la historia de Cuba quitando las estatuas de los presidentes, que para bien o mal, fueron escogidos en las urnas.

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