Iglesia del Carmelo, en La Habana, Cuba
Fotorreportaje por Irina Pino
HAVANA TIMES – Llevo años recorriendo la calle Línea, en El Vedado, y al llegar a 16 me detengo a observar la Iglesia del Carmelo. A pesar de que sólo la había visto desde afuera, siempre me atrajo por su sólida fachada. Como curiosidad, en un costado del jardín, se alza una escultura de Cristo, mientras que, a su izquierda, adentro de una vitrina de cristal, está la Virgen de la Caridad del Cobre.
Este templo pertenece a la Orden de los Carmelitas Descalzos. Que fuera instaurada por Santa Teresa de Jesús. La regla era una vida dedicada a Dios, con humildad y pobreza, similar a los primeros ermitaños del Monte Carmelo.
En el interior de la nave, en el altar mayor, podemos ver a la Virgen del Carmen; también hay otros santos y el Vía Crucis. Todas estas figuras están hechas en pequeño formato.
Para mí, lo más atractivo de este ámbito, son los cuatro murales del pintor español Antonio Martínez Andrés (1917-1966), La Virgen del Carmen entregando el Escapulario a San Simón; el Encuentro de Santa Teresita con el papa León XIII, las Misiones Carmelitas; Primera Misa de San Juan de la Cruz; y Santa Teresa huye de Ávila con su hermano Rodrigo buscando el martirio.
La obra del artista madrileño es moderna, aunque no se divorcia de lo académico, sino que alienta una estética más humana sin perder el espíritu religioso. Sus piezas decoran varios recintos habaneros, como la Iglesia San Juan de Letrán, la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, la Iglesia San Francisco de Paula, y el Hogar de ancianos Santovenia.
Una amiga me cuenta sobre la huella que dejara el padre Marciano García, uno de los sacerdotes que más tiempo estuvo oficiando este templo. Graduado de Psicología antes de tomar los hábitos, fungió como profesor de la Universidad Pontificia Católica de Santo Domingo.
Los devotos y las personas del barrio lo recuerdan como un guía espiritual con el que se podía conversar de cualquier tema, por su inteligencia y su vastísima cultura.
Para la gente que profesa el catolicismo, o los interesados en apreciar este espacio de culto, por sus valores artísticos, pueden llegarse hasta acá las tardes de los jueves. Y si así lo desean, asistir a la misa el domingo, que comienza a las diez de la mañana.
Wow
Muy interesante
Y hermoso
Gracias por publicarlo
Una vez más me quedo esperando !! Me gustaría saber más de la Iglesia y de sus colaboradores!! Hay tanta información q nos perdemos en este día a día de sobrevivientes !! Muy ameno e interesante el artículo como es costumbre en esta magnífica escritora !!
El trabajo de visitar, investigar, recopilar información y luego procesarla en estos artículos que, aunque breves son de gran densidad de contenido se aprecia sin mucho esfuerzo como una valiosa obra aunque sean breves sus muestras. Es tanto y tan valioso el rescate y difusión a nivel artístico, religioso y social que constituye un camino de realización. Gracias por tu dedicación a esta obra sobre edificaciones religiosas, ojalá que cuando termines con las de La Habana sigas con todas las de Cuba o al menos añadas los templos de las otras denominaciones como son las ortodoxas, protestantes, islámicas, etcetera
Las iglesias cubanas, y las fotografías de Irina nos permite disfrutar de lo hermoso en nuestra cultura arquitectónica. Además de su historia, en este caso las iglesias católicas.