Fantasmagorías surrealistas
Ensayo fotográfico por Ernesto González Díaz
HAVANA TIMES – El surrealismo es un movimiento artístico o estilo creativo surgido en Francia en la década del 20 del siglo pasado, como parte de las llamadas vanguardias artísticas. Tiene sus bases fundamentales en el dadaísmo de Tristan Tzara y su principal exponente fue el escritor André Breton. Era una época en que fotógrafos y escritores trabajaban muy unidos, incluso algunos escritores hacían sus propias fotografías para ilustrar sus textos. Salvador Dali, Man Ray, Bill Brandt, Marcel Duschamp, entre otros destacados artistas fueron sus principales cultores dentro la tremenda revolución creativa vivida en las décadas de los años 20 y 30 del siglo XX, el llamado periodo de las entreguerras.
El surrealismo pretende sobrepasar lo real impulsando lo irracional y lo onírico. En la fotografía surrealista se tratará de expresar lo que esconde el mundo del subconsciente y de los sueños, que según la mayoría de los artistas surrealistas, esconden las inquietudes más profundas del ser humano. Es bueno destacar que cuando hablamos de sueños se hace desde el punto de vista neurofisiológico, lo que soñamos cuando dormimos, no a los sueños entendidos como aspiraciones personales, sociales, profesionales, etc.
Lo onírico, lo fantasmagórico, la presencia-ausencia de ese ser o seres, con los que se sueña a diario, que habita solo en nuestras mentes, en nuestros sentimientos, en nuestros pensamientos, que nos visita en las noches y nos roba el sueño, que no existe en la realidad y sin embargo nos hace despertar cada día para seguir en su búsqueda. Seres reales-irreales, amorfos y difusos en ocasiones, desconocidos e irreverentes, son los protagonistas fundamentales de estas imágenes. Una mujer sin rostro que intenta volar, otra que me vigila en las noches, una que juega beisbol desnuda y otra que encara la muerte, son fantasmas del pasado y del presente que conforman esta selección.
En la fotografía surrealista se pueden encontrar dos vertientes bien diferenciadas. Una es el surrealismo técnico basado en la intervención y manipulación fotográficas que se considera una ruptura de la realidad. La otra concibe la imagen como un instrumento documental que transmite los “objetos encontrados” por el fotógrafo, que es el caso de las imágenes que mostramos en este trabajo, Imágenes que no tienen intervención digital, que han sido logradas con técnicas de fotografía directa.
Lo interesante de este estilo es la búsqueda espontanea de la conexión entre realidad y subconsciente, lo que soñamos y lo que vivimos.