Día de los enamorados 2013 en La Habana Vieja

Fortorreportaje por Daisy Valera

HAVANA TIMES — El 14 de febrero es un día de transformación para la ciudad. La Habana Vieja es tomada por asalto por parejas y familias que buscan recrearse en las principales plazas y sus calles aledañas.

Aunque el cambio no influye sobre  aspectos característicos como los vendedores de libros, los dibujantes o el puesto de venta de naranjas de la Plaza de la Catedral, este sector de la ciudad luce diferente.

No solo porque los principales establecimientos estatales hayan anexado un cartel de dos pajaritos al de Fidel Castro con los 54 años de la Revolución.

Se llena la entrada de la principal y más cara florería de La Habana (donde una rosa cuesta 2 CUC y un ramo 20), una cola crece en la puerta del Museo del Chocolate, las cremerías como El Naranjal, vacías otro día del año también son ocupadas y los músicos ambulantes acosan a los turistas con canciones de amor en lugar de La Guantanamera.

Pero el lugar que más se ha transformado es sin dudas la Plaza Vieja, con más de su mitad cercada y una inundación de mesitas blancas y lazitos rojos. Por el precio “módico” de 30 CUC por persona se ofrece para esta noche una gran cena concierto con Ivette Cepeda.

Ha sonado un disparo, el día ha sido diseñado para consumir y los habaneros responden al llamado.

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