Ser civilizado como los animales
Por Verónica Vega
HAVANA TIMES — De todos los problemas de Cuba, el que más me golpea cuando salgo a las calles es el de los animales abandonados. La impotencia ante su sufrimiento, la alarmante inconsciencia social y la ausencia de una Ley de Protección Animal para frenar el sadismo o la irresponsabilidad.
La insuficiencia de clínicas veterinarias y sobre todo el horario limitado de atención de estos centros que muchas veces significan la muerte de un ser irremplazable.
Por eso, cuando tengo ocasión de ser testigo de una iniciativa en favor de los animales en nuestro país, realmente siento alivio y un soplo de optimismo.
Fernando Gispert, médico veterinario y especialista en acupuntura y homeopatía, a quien ya entrevisté para HT, me avisó de una desparasitación masiva (gratuita) en la plaza Belén, de la Habana Vieja.
Yo llegué al mediodía y ya se había desparasitado a unos 500 canes. El ambiente era de feria: había música, sombrillas, carteles de promoción. Entre ladridos y sonrisas, los dueños mostraban tanta exaltación como sus mascotas.
HT. ¿Cómo y cuándo surgió la idea de hacer esto?
Fernando Gispert: Surgió en 2006 por iniciativa del Acuarium de La Habana Vieja. A ello nos unimos entusiasmados todos. Se requiere que varias organizaciones tengan la voluntad de unirse y trabajar en esta noble causa. Primero que nada está la Oficina del Historiador que siempre nos apoya con sillas, mesas, la radio base… en esta ocasión es una donación de Bayer Sanidad Animal
También Spanky Project Organization, liderada por Terry Shewchuck, canadiense amante de los animales y de Cuba. Su meta son los animales, no entran en conflicto con el gobierno. Nos apoyan con antiparasitarios, anestésicos, antibióticos, instrumentales, etc. Tampoco pueden faltar esas personas que aún con sus bajos ingresos nos ayudan como voluntarios.
Pero además está Patrimonio, Comunidad y Medio Ambiente, el Instituto de Medicina Veterinaria, la Comisión de Bienestar Animal, el Consejo Científico Veterinario, la Universidad de La Habana, el Convento de Belén que nos presta su plaza, y muchas más. También, claro, está la Clínica Veterinaria Laika, que es donde yo trabajo.
HT: La gente, por lo que veo, reacciona muy bien…
FG: La gente agradece mucho estos eventos porque ama a sus animales y valora su bienestar. Siempre insisto en que cuando el animal está enfermo eso afecta a la familia, las personas se estresan, se deprimen, es un problema social tan serio como cualquiera. No percatarse de ello es un error social.
Pero al hacer estas campañas esperamos que la gente incluya animales callejeros y hasta premiamos a los que cooperan con esto regalándoles productos para sus mascotas como el que usamos hoy: “Advocate” de Bayer Sanidad Animal, que tiene acción sobre pulgas y nemátodos (gusanos redondos). Ya ves que ellos (los animales), se portan muy bien.
HT: ¿Cómo hacen la difusión?
FG: A través de los medios: la emisora Habana Radio, Canal Habana, el periódico Tribuna de la Habana. Esto le corresponde a Comunidad y Medio Ambiente, que es quien organiza de manera protocolar la actividad.
HT: ¿Qué posibilidad hay de expandir iniciativas como estas a otros municipios donde se ven tantos animales sufriendo en las calles?
FG: Primero que nada hay que unirse. Hay mucha discrepancia entre las ONGs y las organizaciones gubernamentales, entre los protectores de animales y los no protectores… Están los que no quieren saber nada de estas campañas porque implican gastos para la economía del país y están los que quieren más desparasitaciones y esterilizaciones gratuitas, son dos extremos que no se ponen de acuerdo.
Pero es preciso dejar de discutir, dejar a un lado las diferencias de ideologías o de cualquier tipo para ponerse en función de algo objetivo, y bueno. Ser capaz de visualizar, como si atravesáramos un túnel, que al final está el animal, quien saldrá beneficiado, y por extensión la sociedad.
HT: Algo que me preocupa mucho es la cantidad de perros que veo atropellados en las calles, es un espectáculo terrible y deprimente.
FG: Lo que hace falta son campañas para que las personas no abandonen los animales en las calles, esterilicen a las hembras antes del primer celo; esterilicen a los machos a los 6 meses de nacidos y dejen la tontería machista de que «pobrecitos los machos…» Es necesario interiorizar que la sexualidad es un reflejo natural, mas, no imprescindible para la vida. La naturaleza la brinda para perpetuar la especie, pero ante una sobrepoblación puede eliminarse y no pasa nada. El animal incluso es más feliz.
HT: He visto que en varios municipios, los animales atropellados no son recogidos, y los cadáveres se descomponen lentamente, emanando hedores y haciendo la atmósfera irrespirable. ¿A quién le corresponde hacerse cargo de esto?
FG: Los animales atropellados y muertos deben ser recogidos por el Servicio de Comunales, el cual es encargado de la sanidad citadina. Solo que a veces no lo hacen. Por supuesto que es un problema de salud.
Pero evitar que haya animales deambulando en las calles es tarea de Zoonosis. Aunque es una institución muy criticada y vilipendiada (no sólo en Cuba sino en todo el mundo), evita epidemias y desastres sanitarios. Sólo que en Cuba, la forma de recoger los animales es inhumana y la forma de eliminarlos también. Hay una diferencia entre el “Sacrificio” y la “Eutanasia”.
En otros países se recoge humanamente con una vara controladora que es cara ($250.00) y se les pone a dormir con productos caros ($80.00-500.00). En Cuba no existen esos productos por lo que los recogen bestialmente, los tiran contra el fondo de una camioneta, se los llevan para Punta Brava y allí dan rienda suelta a la imaginación sádica: les dan estricnina (cuando la tienen) los matan a cabillazos, palazos, corriente eléctrica, los ahogan con monóxido de carbono o con agua y otras maneras secretas que no han salido a la luz….
Nuestra lucha actual, luego de admitir que no hay solución respecto a la necesidad de recogerlos de la calle, es que donen a Cuba productos para eutanasia que estén aprobados por la OIE. En la Carta de los Derechos de los Animales, concebida por la ONU en 1976, se enfatiza el derecho del animal a ser tratado con respeto.
Los animales viven en manadas, pero el hombre vive en comunidad, es decir con varias manadas: hombre, perro, gato, pájaro. Lamentablemente el hombre no sabe vivir en armonía con la comunidad. Los animales sí.
No entiendo por qué el hombre no comprende que es un animal más, por qué se cree superior, cuando los animales nos superan en tantas cosas: ven mejor que nosotros, corren más que nosotros, oyen mejor que nosotros, sienten mejor que nosotros.
Solo los superamos en inteligencia, y eso es cuestionable… ¿Puede haber algo más estúpido que destruirnos entre nosotros mismos, destruir la naturaleza y provocar guerras? Por eso entiendo a Roberto Carlos cuando dice «yo quisiera ser civilizado como los animales».
No saben la alegría y admiración. Q me dio leer este artículo y todo lo q hacen esos médicos veterinarios por los animales en la Habana, deseo felicitar de corazón a todos los involucrados en esta y otras campañas, en favor de animalitos, es verdad q da pena como hay gente q abandona a sus animales, o los maltrata, por eso la única solución es Esterilizar, esterilizar a todos los animalitos, sólo así,se estará sus sufrimientos…adelante pues veterinarios y buen vecino q quiere y apoya a los animales, corazones bondadosos con los animalitos, dios y la vida, les dará mucha suerte.
Desde Perú, les deseo lo mejor a cada campaña q ofrezcan en favor de los perritos,gatos y cuanto animalito tenga la suerte de ser atendido por los veterinarios….No abandonen a sus mascotas, no los maltraten.
Yo tengo a dos amigos peludos. Los que me sirven y quiero. Una braco y un pitbull. Los perros son animales de los que debemos aprender los humanos,
Yo comparto la opinión de Estrella y quisiera enviar mi agradecimiento a Verónica por haber tratado el tema que, espero, no sea la última vez se escriba sobre ello.
La iniciativa de estos veterinarios debemos tratar de propagarla no solamente a otros municipios (de La Habana supongo que Verónica haya tenido en cuenta) sino a toda Cuba. Es allí, fuera de La Habana (ciudad), donde he sido testigo de varios maltratos a animales (caballos que traccionan coches en Varadero y por cansados han sido golpeados por sus ddueños, vacas en la zona de Las Villas, perros). Yo cada vez que veo algo semejante interfiero y, normalmente la gente entiende. En un solo caso en Santa Marta el cochero se enfadó y me miró con ira pero yo no cedí. Luego mi hermana me dijo que ese hombre es conocido y le dicen «el matón». Es allí donde más falta hace sustituir las eternas campañas políticas por acciones como estas. Comenzar desde temprano en la escuela a enseñar a los niños a respetar a todo ser vivo, a no maltratar y a cuidar el medio.
Felicidades Veronica por este trabajo. Yo creo que el amor a los animales va mucho mas alla de controlar la reproduccion de mascotas y darles la debida atencion. Es necesario educar a los niños, jovenes y no tan jovenes a que maltratar a cualquier animal, ya sea una lagartija o un gorrion, no se diferencia mucho al maltrato a un ser humano. aquel que es capaz de abusar de un animal, de hacerle daño, de ponerlo a sufrir es potencialmente capaz de hacerlo con otra persona pues esos instintos negativos salen de la misma parte del cerebro. No hay una zona para el amor al ser humano y otra para el amor al resto de las cosas.. Yo personalmente estoy en contra de la venta de animales, de los circos que los utilizan para entretenernos, de su uso en tareas duras, incluso de mantener animales presos en un zoologico. Debe existir una legislacion bien fuerte contra el abuso animal no importa la especie que sea. Hay leyes que prohiben la caza de aves endemicas, sin embargo , su venta y captura se hace donde quiera ante la mirada inconsciente de las autoridades. Es hora de que si queremos una sociedad mas civilizada y menos violenta, empezemos a educar a las nuevas generaciones en lo que es bueno y lo que es malo.