René, un cubano que lleva décadas trabajando por cuenta propia

Por Miguel Arias Sánchez

Esperando clientela en una pequeña cafetería de Centro Habana.  Foto: Juan Suárez

HAVANA TIMES – René Fernández (76) abrió su cafetería en los años 90, cuando se autorizó el trabajo por cuenta propia. Es uno de los que se ha mantenido en esa actividad, a pesar de lo variable que ha sido el contexto.

HT: ¿Cuáles eran las condiciones cuando comenzaste, allá por el siglo pasado?

RF: Cuando me decidí no tenía mucho, era un local pequeño que se adaptó para cafetería, lo hice con mis hijos, así empezamos, solo hacíamos pizzas y refrescos.

HT: ¿Cómo era lo referente a las licencias y la adquisición de los productos para preparar las pizzas?

RF: En aquella época todo era más fácil. Se pagaba de licencia 80 pesos nada más. En cuanto a los ingredientes, figúrate: una libra de harina costaba tres pesos, la de queso 18, la electricidad era muy barata, era un negocio muy rentable, la verdad. Lo malo es que había que adquirirlo todo en el mercado negro, porque no hay un mercado mayorista para los trabajadores por cuenta propia.

HT: ¿Podías contratar trabajadores?

RF: No, tenían que ser los mismos familiares. Yo contaba con mis hijos y mi esposa, no había contratación libre.

HT: Entonces, marchaba bien el negocio.

RF: Sí, no había más ninguna cafetería en los alrededores y, como es lógico, todas las personas de la zona venían aquí, a veces no dábamos a basto.

HT: Llegamos ahora al año 2019. ¿Se mantienen aquellas condiciones? ¿Ha cambiado para bien o para mal?

RF: La diferencia es muy grande, y a veces se hace muy difícil continuar. He pensado cerrar y ya. Hoy una libra de harina cuesta seis pesos, cuando no escasea como ahora; la de queso 30 ó 35 y siempre es por la izquierda, claro, igual que antes.

La electricidad ha subido cantidad, hasta el punto que dejé de hacer pizzas. Ahora oferto alimentos ligeros como dulces, refrescos, café, jugos, panes con jamón, queso, etc. Ah y actualmente tengo que pagar 600 pesos de licencia. Como ves, la diferencia es abismal, si lo comparas con los inicios. A eso hay que sumar que mis hijos ya no viven conmigo, me ayudan mucho, pero debo resolver las urgencias yo solo. Y estoy más viejo. Lo otro es que ya se puede contratar a personas ajenas a la familia.

HT: Pero todavía mantienes la cafetería, ¿es rentable?

RF: Bueno da para comer un poco mejor que otros y seguir viviendo.

HT: ¿Cómo te afectan las nuevas medidas establecidas sobre ese tipo de actividad?

RF: Los tiempos cambian y nuestro Estado ha tenido que ajustar ese tipo de trabajo a las condiciones económicas del país. La Mesa Redonda que hicieron al respecto, en el mes de diciembre, fue muy esclarecedora. Yo sigo en la categoría de cafetería, que es para vender alimentos ligeros. Allí explicaron lo referente al local, la higiene y su cuidado y, sobre todo,  su mantenimiento. Conozco personas que solo se preocupan por la limpieza debido a las inspecciones y eso es un error, porque si algún cliente se enferma por culpa nuestra se sabrá de inmediato.

HT: ¿En qué caso te podrían retirar la licencia?

RF: Si no pagas los impuestos a tiempo (tanto los tuyos como lo de los trabajadores), si el local no cumple con las normas de higiene, si se manipulan mal los alimentos, en fin, lo que hay es que cumplir todas las normativas.

HT: ¿Qué pasa con la cuenta bancaria que tienes que abrir?

RF: Eso nunca se había pedido, es nuevo y aún no lo entiendo bien, pero hay que hacerlo.

HT: ¿No lo entiendes, pero lo vas a hacer?

RF: Primera vez que tengo que hacerlo, ya no soy un joven que capta rápido las cosas y estoy algo confundido, pero la tengo que abrir, si no me quitan la cafetería. Tengo que tener un saldo mínimo y de lo que deposito, según la categoría; puedo extraer dinero que debo justificar para qué es y dejar un 15% sin tocar. Yo no entiendo por qué tengo que justificar efectivo que saco de una cuenta mía y reingresarlo antes de los 10 meses, pero bueno es una ley, y la ley hay que cumplirla.

Entiendo que antes había personas que abrían un negocio, a veces no le daba la cuenta, entregaban la licencia y no la pagaban; se iban debiendo dinero al fisco. Ahora si cierran o se van y no han pagado la licencia, se le descuenta de ese 15%. Creo que es así.

HT: ¿Y si paga en tiempo y el dueño muere el Estado se queda con ese dinero también?

RF: Según la explicación de la Mesa Redonda, no. No se puede poner beneficiario, pero en caso de muerte su familia tiene el derecho a recibir el monto de la cuenta.

HT: ¿A ti, estas medidas te benefician en algo?

RF: No tienen un impacto directo de beneficio, pero bueno, en el mundo entero hay que pagar el fisco y nosotros somos parte de ese mundo y nos gusta inventar. O lo tomas o lo dejas, es así de simple. Muchos han entregado la licencia por temor, por el rigor con que serían chequeados, o porque no quieren abrir las cuentas, no sé; el tiempo dirá los resultados, ahora hay que esperar.

HT: ¿Piensas seguir o vas a colgar los guantes?

RF: Mira, en estos momentos ni yo mismo lo sé. Creo que voy a seguir por ahora, a medida que pasen los días tomaré la decisión final. Lo que si te puedo asegurar algo, sigo y seguiré manteniendo mis principios y mi fe en el Estado y la Revolución, si sigo con la cafetería será cumpliendo a cabalidad las disposiciones y los reglamentos establecidos, todo, absolutamente todo dentro de la ley. Después de viejo no voy a caer en errores que luego me hagan arrepentir.

One thought on “René, un cubano que lleva décadas trabajando por cuenta propia

  • Esas son las contradicciones que no entiendo, según dices, eres revolucionario, cumples con el gobierno, pero que robe otro para que mi negocio funcione, compadre dígale al presidente y al del comité que eso es doble moral…eso sí, para salir adelante en el cuenta propismo que ejerces, donde compras la cantidad de panes que necesitas, y el queso, y el jamón, esto es ilegal, pues en Cuba no hay un lugar para que ustedes compren al por mayor, obligado lo hacen por la izquierda.… y dices hacerlo todo en la ley…compadre!!iii

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