Entrevista a la reverenda cubana Niuvis Georgina Pernas
Por Lien Estrada
HAVANA TIMES – Niuvis Georgina Pernas es pastora jubilada de la Iglesia Bautista de la Fraternidad de Holguín. Vive sola. Una hija e hijo viven en Santa Clara, otro en Las Vegas, Estados Unidos. Ha sido y continúa siendo una fuerte activista feminista cristiana. Tuvo la gentileza de concederme está entrevista.
¿Cuáles son sus orígenes?
Niuvis Georgina Pernas: Nací el 16 de enero de 1941, en Guantánamo. Cuba y me crié con mi familia paterna. Una familia de la clase media profesional y comerciante. Me formé en la Primera Iglesia Bautista de Guantánamo. Hice la primaria en el colegio Bautista José de la Luz y Caballero. Los maestros y consejeros de la iglesia y del colegio, teniendo como guía al Dr José Luis Molina, pastor y director de la escuela, influyeron mucho en mi formación cristiana y patriótica.
Nunca olvidaré que al llegar este el 11 de marzo de 1952 al aula, el profesor de Historia y de Educación Moral y Cívica nos dijo: Hasta hoy fui su profesor, porque con este golpe de Fulgencio Batista en Cuba no habrá moral ni civismo, y se ha roto la historia.
Al llegar a casa pregunté qué era un golpe de Estado. Aquella actitud marcó mi vida. Además de los principios que me enseñó mi familia me hicieron sentir una responsabilidad con mi Patria que se incrementó después de ser una adulta. Con el énfasis de «El cristiano y su compromiso social» que desarrollaba la Coordinación Obrero, Estudiantil Bautista.
Por el año 1960 mi familia paterna era muy rígida en cuanto a conceptos morales, llenos de prejuicios, muy patriarcal. Cuando fui a estudiar arquitectura a la Universidad de La Habana fui miembro de la Unión Bautista de Estudiantes Universitarios, cuya sede era en J entre 25 y 27, Vedado, y allí nos hospedábamos estudiantes bautistas de todo el país.
Fue un espacio donde desarrollé mi liderazgo. Ocupé varios cargos en la directiva y desarrollé una vida social muy agradable, además de contribuir en misiones, cantando en coros, y otras tareas en iglesias cercanas.
En la Universidad tuve profesores muy valiosos, ellos incrementaron en mí el amor por las artes. En aquel momento existía un destacado desarrollo cultural en La Habana.
Tuve el privilegio de participar en el Congreso Internacional de Arquitectos, en el Hotel Habana Libre en 1963. En La Habana vi actuar a Alicia Alonso con su partenaire Azari Plietzasky, Maya Plisétskaya; a Benny Moré el bárbaro del ritmo, a Bola de Nieve, La Lupe, etc. El asistir a las presentaciones de esos grandes me hizo proclamar a nuestro Dios como creador, además de Salvador, el Artista de los artistas. «En el principio creó Dios los cielos y la tierra» Génesis 1:1.
¿Cómo llega a los caminos de Cristo?
Clara Bertha Pernas, mi tía paterna, me llevó a la 1era Iglesia Bautista de Guantánamo. A los nueve años en una campaña evangelística, en el campo deportivo del colegio Bautista de Guantánamo, del Dr Luis Manuel Agüero, pastor bautista de la convención occidental, di testimonio público de mi fe.
En el colegio Bautista mi pastor era anticlerical, pero un seguidor ferviente del Padre Félix Varela, José Agustín Caballero y José de la Luz y Caballeros. Además, muy Mariano y cubano. Supe que quedó solo en Guantánamo con su esposa padeciendo demencia, y sus hijas residentes en los Estados Unidos lo llevaron a su lado. Y terminó sus días diciendo: «Quiero ver las palmas de Cuba».
¿Qué le motivó a estudiar Teología para servir en el gran Ministerio?
Me inspiraron las biografías de muchos misioneros y de mi pastor y la misionera Miss Alleport, por sus vidas de sacrificios. Y Albert Schweitzer quien tardíamente estudio medicina para servir en África como médico misionero. Decía que debía ayudar a pagar algo de la deuda que el hombre blanco tenía con el hombre negro. Pues habían ido a sus tierras a extraer su oro, su marfil, esmeralda, etc. Venía a Europa para dar conciertos y con lo que ganaba comprar material quirúrgico para el leprosorio que construyó él mismo en Lambarene, Gabon. Y fue en su tiempo el mejor intérprete como organista de Juan Sebastián Bach. Fue galardonado Premio Nobel de la Paz en 1953.
¿Donde estudió teología?
En el Seminario Bautista de Cuba Occidental, en La Habana. Me gradué en 1967. Ejercí en varias iglesias en el país. Como los bautistas no aceptaban ni aceptan mujeres casadas en el ministerio, acepté trabajo con los bautistas libres. Me llamaban misionera pastora. Luego trabajé cuatro años con los Metodistas. Y finalmente hasta mi jubilación con la Fraternidad de Iglesias Bautistas de Cuba.
Actualmente presto mis servicios en cualquier área del ministerio que me pida una iglesia de cualquier denominación. Pues mi espíritu ecuménico desde niña lo asimilé en la Iglesia donde me formé, que pertenece a la Convención Bautista Oriental, fundadora del Consejo de Iglesias Evangélicas de Cuba en 1941.
¿Cómo fue su experiencia pastoral en esos inicios de la Revolución cubana?
Considero que me tocaba vivir una etapa diferente donde existió incomprensión tanto del Gobierno como de las Iglesias. Tuvimos que sufrir la exclusión por razones religiosas, como los que fueron enviados a la Unidad Militar de Ayuda en la Producción (UMAP). Fue un golpe muy fuerte. Sufrimos medidas inmerecidas: la depuración de los cristianos en la Universidad, la (UMAP), etc.
Después sufrimos el encarcelamiento de alrededor de 40 pastores y líderes bautistas. Lo que creó una gran crisis en la iglesia.
Ahora bien, mi trinchera siempre ha sido la del evangelio de Jesucristo. No considero que el sistema socialista que se instauró, ni el anterior, llenaban todas las expectativas del ser humano. Aunque contribuí como maestra voluntaria, maestra alfabetizadora, jornadas agrícolas, etc.
Pero siempre manteniéndome en mi trinchera. Fueron muchos los que se fueron. Pero los que nos quedamos teníamos claro que Cristo era para todos los tiempos.
¿Desde cuándo ejerce el pastorado?
Desde 1967, de forma oficial.
¿Cuáles han sido los tiempos más difíciles para el ejercicio del pastorado?
Para el obrero cristiano no ha habido tiempos fáciles. En Cuba hemos tenido que vivir la dispersión de las ovejas. Pero tenemos que lograr que escuchen Su voz. Todos los tiempos han sido difíciles. El sacerdote Arnaldo Aldama me comentó una vez: «que tiempos más fuertes para ejercer el pastoreado recientemente». Imagínate predicar la esperanza en nuestro país.
Pastora, cuéntenos sobre aquellas fiestas de la 1era Iglesia Bautista de Guantánamo que sustituyeron el Halloween del principio.
(la pastora se ríe)
Contribuir con la recreación en las iglesias porque estas están en el deber de hacer reír. Recuerdo cuando me formé en la 1era Iglesia Bautista de Guantánamo que celebrábamos el Halloween. Que se decoraba con brujas y calabazas.
Pero en 1959, por los cambios producidos en la política y en lo social en la Isla, los y las jóvenes de la iglesia decidimos entonces celebrar la Fiesta de la Malanga. Se realizaban antes de las Navidades.
Y lo celebrábamos con flanes, budines, y dulces de Calabazas.
Estamos en Adviento. ¿Cuál es el tiempo litúrgico que más le gusta a usted y por qué?
Navidad. Porque es nacimiento. Y para mí esto significa que pueden seguir naciendo muchas cosas hermosas entre nosotros y nosotras.
¿Cuál es su pasatiempo preferido?
Escuchar música mientras leo poesía. Cuando cumplí 48 años por primera vez se manifestó la fibra poética en mí. Vale la pena decir que en la iglesia que fundé en Holguin, «Monte de los Olivos», los primeros hermanos y hermanas que participaron en la liturgia eran jóvenes poetas que se acercaron. Y Dios me dio la oportunidad un domingo de Resurrección de decir un poema ante más de 12 mil personas en el Ateneo deportivo de Holguín.
¿Qué fue lo que más le atrajo realizar en su ministerio pastoral?
Me gustó trabajar mucho en los barrios más marginales. Con las personas más excluidas. Personas afectadas por el alcoholismo, madres solteras, homosexuales, personas con discapacidad. Tengo una gran satisfacción, porque siento que di mucho de mí. Por ejemplo, en la creación del reparto el Progreso, de Holguin. Construimos casas dignas para aquellas familias que vivían en viviendas precarias que antes le llamaban los trenes, porque las casas eran construidas con pedazos de cartón y de lata pegados uno al lado del otro, como los coches de los trenes, en la falda de la Loma de la Cruz.
Y también me gustó mucho trabajar en la capacitación de líderes de distintas comunidades.
Tengo entendido que también ejerció como profesora de Matemáticas.
Sí, por 17 años. Y trabajé también en la empresa de transporte por un tiempo. Considero que el pastor obrero en el sistema socialista genera mejor testimonio.
¿En qué lugares ejerció el pastorado?
Muchos. Reparto Mañana, en Guanabacoa; el Distrito Los Pinos-Calabazar-Bejucal-Párraga, La Habana. Unión de Reyes, Pedro Betancourt, Matanzas. La Esperanza, Las Villas. Jaruco, La Habana.. Santa Cruz del Sur, Camaguey. y Holguín donde me radiqué hasta hoy.
Un mensaje que quisiera compartirnos para despedir este año y recibir el 2025
Considerar las ovejas que no son de este redil.
La gente que ha vivido siempre del cuento de los amiguitos del cielo, me asquea sobremanera.
Sra. Lucía Alejandra. y a los demás nos repugna los comentarios como el suyo. ¡Que mala leche tienes !
Camarada Rusbel, que le hace creer que Ud. tiene el derecho exclusivo sobre la opinion de los demas? Ud. tambien tiene amiguitos imaginarios en el cielo? Atiendase eso, es una enfermedad mental.
Sra. Lucía Alejandra, mis más profundas gracias por su consejo. Lo tendré en cuanta en lo sucesivo, sobre todo por su delicadez y educación. ¿Pudiera preguntarle si para su esmerada educación estuvo una institutriz inglesa , o tal vez estudió en la univesidad de Oxford?