El agua que necesitamos en La Habana Vieja

Por Ivett de las Mercedes

HAVANA TIMES – La irregularidad en el servicio de agua potable a la población se ha tornado alarmante para las familias del municipio de la Habana Vieja. José Manuel Jiménez, residente en la calle Suárez, nos ofrece su testimonio.

HT: ¿Cómo le afecta la escasez de agua?

José Manuel: Vivo en el 5to piso de un edificio de seis plantas, cercano al tencent de Montes, y desde hace más de un mes no tenemos agua. Nadie puede imaginar el estrés que eso ocasiona a una familia en la que todos tenemos que trabajar y los hijos ir a la escuela. Ese líquido se necesita para todo: cocinar, bañarse, lavar la ropa, limpiar la casa. La falta de agua se ha convertido en una verdadera locura.

HT: ¿Qué han los vecinos del edificio al respecto?

JM: Después de ir en reiteradas ocasiones al Gobierno municipal y a la Empresa Aguas de La Habana, logramos que nos asignaran una pipa, que no se sabe nunca cuándo puede aparecer: puede ser que llegue mientras estemos trabajando o durmiendo. Algunos vecinos, incluso, han dejado de trabajar para poder esperarla. El caso es que mientras esperamos por la pipa y el dichoso combustible para hacerla rodar, la ansiedad se transforma en ira e impotencia. 

HT: Lidiar con este problema debe ser difícil

JM: Si, muchos pobladores han tenido que recurrir a sus familiares o amigos. En mi caso, mi familia vive en otro municipio. He resuelto indistintamente un cubo de agua por aquí y otro por allá para bañarnos mi esposa y yo; mis dos hijos han acudido a sus compañeros de clases. Lo curioso es que nunca antes habíamos tenido problemas con ese servicio. La cisterna siempre estaba llena.

HT: ¿Considera que el derroche y los salideros que abundan en la ciudad sean la causa de esta carencia?

JM: Creo que es una vergüenza oír hablar de los salideros, de los herrajes y flotantes por reparar en los tanques y tasas sanitarias, de la pobre gente que infla una piscina para que sus hijos se diviertan en los portales y las azoteas. Estoy harto de escuchar hablar de la sequía, del manto freático y las cuencas hidrográficas por llenar, mucho más de las tormentas eléctricas que provocan el paro en las redes de abasto. Mucho se habla de reforzar los planes de la economía y la agricultura, pero sin agua cómo van a hacer posible esas cosas.

HT: ¿Usted trabaja por esta zona?

JM: Si, tanto que se toca el tema de las medidas de protección e higiene del trabajo, en mi centro uno no puede ni lavarse las manos a la hora del almuerzo, qué decir si uno tiene que ir al baño, las tazas sanitarias se encuentran a tope, si no haces tus necesidades en el piso corres el riesgo de salpicarte y coger una infección.

Como ve, me mantengo en estrés todo el tiempo, pero eso no es lo peor: la familia de mi esposa vive en Pinar del Río y nos han contado que en el hospital la situación es terrible, esta provincia es una de las más afectadas por la falta de agua. ¿Se imagina usted ser paciente o trabajador de una institución de la Salud, donde tienen que cambiar las bolsas de colostomía o las sondas o curar quemaduras o someterse a una operación y que no haya agua?

Mi esposa dice que hay otros peores que nosotros y que solo los que saben adaptarse pueden sobrevivir. Por supuesto que hay otros peores, uno de mis vecinos tiene un niño pequeño y ha salido a ofrecerle a los choferes de las pipas hasta 20 cuc para poder lavar los pañales de su bebé; no lo juzgo, hay que estar en esa situación para entender, si yo tuviera ese dinero también se los daba, no al chofer de la pipa, sino a cualquiera que nos alquilara una habitación con agua hasta que esto pasara.

Para colmo, en estos días, increíblemente, nos han cortado la luz en varias ocasiones, y no unas horas, sino el día entero, se imagina con este calor no poder bañarnos, ni dormir. La primera vez nos sorprendió sin una vela y estuvimos a oscuras toda la noche, la vecina de al lado tiene una madre anciana que le teme a la oscuridad y se pasó la noche gritando. Fue un verdadero infierno.

HT: ¿Cree que haya una pronta solución para el problema del agua?

JM: Quiero pensar que sí, me duelen los oídos cada vez que escucho que en temporada de vacaciones siempre se derrocha agua; qué vacaciones cree usted que van a tener nuestros hijos. Es muy fácil decir que ahorremos el agua, precisamente ahora que no hay. Quiero ver qué excusa van a darnos si sigue lloviendo todas las tardes y la situación se mantiene. ¿Seguiremos entonces sacando nuestros cubos para recoger agua de lluvia?