Andy Rodríguez: del grabado a la pintura
Por Helson Hernández (Cuadros de la serie Aguas Malas)
HAVANA TIMES — Un Joven grabador, devenido en un pintor con una interesante propuesta visual, que mostramos aquí en HT, valiéndonos de su más exitosa serie, “Aguas Malas”.
HT: ¿Qué especialidad definió su formación académica?
Andy Rodríguez: Mi formación académica transcurrió durante cuatro años de estudio en la Academia Nacional de Bellas Artes “San Alejandro”, en la especialidad del Grabado. En aquel entonces me impresionó la meticulosidad con que se aplicaban las técnicas tan desconocidas para mí. Ya yo había pintado antes de ingresar en la Academia, y creía que era más provechoso dedicar el tiempo en aprender algo nuevo. El Grabado era el escenario perfecto para experimentar nuevas formas de expresión en la escuela y aprender las técnicas tradicionales, y cómo estas eran eficaces para establecer un discurso contemporáneo.
HT: ¿Por qué el giro hacia la creación pictórica?
AR: Después de graduarme en San Alejandro, y descubrir algunos secretos en el vasto universo del Grabado, me sentí nuevamente como si no hubiera hecho nada, conocía técnicas pero me limitaban la matriz y el papel, y sobre todo las dimensiones en que muchas veces podía realizar mis grabados. Después de experimentar con otros medios como la Instalación, la Fotografía, y el Video-Arte, volví a donde me sentía verdaderamente realizado, a la Pintura. El medio pictórico me facilita mayor inmediatez tanto en la ejecución como en el fluir de las ideas; la espontaneidad y en cierta medida el descontrol, son aspectos que en pintura cobran contenido, sin obviar que la praxis misma del medio es una herramienta para la exteriorización y canalización del pensamiento.
HT: ¿Influenciado por alguna generación en particular?
AR: Yo no tomo influencia de una generación en particular, de hecho me nutro muchas veces de fuentes extra-artísticas. La sociedad contemporánea se halla ante la dificultad de encontrar sentido entorno al término novedoso, como concepto que define la contemporaneidad. Entonces todo lo contemporáneo es lo que ocurre en el ahora; desde obras que presentan una metodología tradicional hasta obras que solamente se pueden apreciar en la Net. Es por eso que todas las tendencias o generaciones siempre tienen algo que aportar, en dependencia de los objetivos que persiga cada quien en su obra.
HT: Caracteriza su trabajo exponer en grandes dimensiones.
AR: Se ha hecho una característica exponer en grandes dimensiones, pues a la hora de pintar necesito tener suficiente espacio en el cuadro para sentirme suelto, libre. También funciona para mí como un reto, por cuanto más grande es el gigante más grande es mi victoria. Por otra parte el nivel de impacto en el espectador es mucho mayor cuando los cuadros son más grandes, eso es indiscutible.
HT: ¿El contexto social de la Cuba actual ejerce alguna motivación conceptual en su propuesta visual?
AR: Si desde luego que el contexto de la Cuba actual me motiva a realizar obras que muchas veces parecen ser parte de las crónicas social de un país. Por ejemplo puedo citar la del custodio de embajada que pretende atrapar una Claria, o Pez Gato, en la calle; otro ejemplo que no forma parte de mi última exposición, es un cuadro en donde una agente de seguridad tiene una PC retenida a la entrada de un Centro Estatal, pero que a su vez del hombro de esta agente le cuelga un bolso de donde se le caen pomos de mayonesa, paquetes de espaguetis, y otro víveres. Tendría muchos ejemplos por mentar donde se evidencia una clara alusión a problemáticas sociales relacionadas con nuestro contexto nacional.
HT: ¿Si hablamos de definir su obra plástica basándonos en estilos o tendencias?
AR: No podemos enmarcar mi obra en un estilo o tendencia específica, por lo menos si se mira la producción en su totalidad, y no por alguna obra en específico. Considero la creación pictórica como un laboratorio donde se combinan los elementos según al artista le conviene para trasmitir la idea. Digo elementos no solo a los que se disponen en un cuadro compositivamente, sino a como se resuelve en cuanto a tratamiento en la pintura propiamente.
En otras palabras, el lenguaje de la pintura siempre está condicionado por el cómo se hace, o como se resuelve la visualidad a partir de los materiales, el formato y las técnicas empleadas. En mi caso opera mucho en ocasiones el anacronismo, dado precisamente por no respetar o perseguir un estilo único; pero esto puede que sea por algún tiempo y luego encuentre una metodología que me conduzca a una línea de trabajo más depurada. De cualquier forma estas etapas en las que el artista busca, experimenta, e inconformemente adopta distintas maneras de asumir la pintura se hace parte de todo el discurso en su totalidad.
HT: ¿Alguna idea para futuras exposiciones?
AR: Uno de mis mayores anhelos es exponer de forma personal fuera de Cuba. Sobre todo esta última serie “Aguas Malas” en la que me encuentro abnegado, ya que en mi última exposición personal que se llamó “Pregúntale a Mc Evelly”, solo puse algunos cuadros de esta. Mi sueño es poderlos exhibir por todo el mundo.
HT: ¿De su serie Aguas Malas, que estamos mostrando en Havana Times, más allá de la belleza visual, que busca en estas piezas?
AR: En esta serie que nombro Aguas Malas, es evidente una belleza visual impresionante no solo por el virtuosismo más o menos logrado en la pintura, sino por la belleza propia de estos animales de las profundidades marinas. Lo interesante para mí pudiera parecer precario para otros, pero lo cierto es que en medio de toda esta serenidad que trasmite cierta confianza por así decirlo, se esconde el dato de lo peligroso, lo dañino, lo mortífero.
Los títulos de los cuadros nos lleva a pensar en esa faceta del peligro, entonces ya no es la visualidad misma un espacio para el caos, sino que ese aspecto de lo irónico y sospechoso que han estado presentes en mis propuestas anteriores se encuentra ahora implícito en el suplemento verbal que acompaña a la obra. Por ejemplo títulos como: “Para enredar”, “Piñatas peligrosas” o “Mírame de lejos”, advierten que el sentido no está simplemente en el disfrute de la retina, sino que la metáfora lleva en si la contradicción entre lo realmente bueno y lo aparente.
HT: ¿Comercializar la obra artística?
AR: Yo pienso que la vía más factible para comercializar la obra de Arte, o al menos para que se promueva con ese sentido es la Internet. Pues no es secreto para nadie que en nuestro país no existe un camino para que esto sea lo suficientemente viable. Toda institución cualquiera que sea involucrada en el trabajo con el producto Arte, debe estar dispuesta a comercializar este producto sin temores ni censuras.
Aún sigue siendo un punto frágil en nuestro contexto nacional. Cuando hablo de producto Arte no me refiero al suvenir que se le vende al turista como la imagen de un país, sino a la producción seria de artistas emergentes que necesitan de alguna manera costear proyectos de verdadero interés en el Universo de las Artes Plásticas.
Muy lindas pinturas
Muy lindas las pinturas que muestra este artículo pero impresionantes todas las demás que realiza. Son magníficas las que he podido apreciar, algunas sin terminar ya muestran el explendor que las caracteriza. Mi primo: todo un talento.
Hola Andy:
Yo conservo en mi casa en la Hababa 3 obras tuyas que compre en el Hotel Nacional de Cuba, allá por el los años 1994-1995, no recuerdo la fecha exacta.
Éxitos en tu trabajo y que no decaiga nunca tu afán por mostrar al mundo la cultura cubana.
Un abrazo,
Jorge Gomez