En pocos días Venezuela tendrá un nuevo presidente
Caridad
HAVANA TIMES – Que sea un nuevo presidente es algo muy raro, teniendo en cuenta que hay muchas probabilidades de que continúe Nicolás Maduro en el poder. Y en caso de que no lo hiciera, y el nuevo gobernante resultara ser Henry Falcón…tampoco sería “nuevo”, de sobra se conoce la amistad entre esos dos, la facilidad de Falcón para moverse entre el oficialismo y la oposición.
Pero el 20 de mayo habrá un nuevo presidente, porque, a decir de Maduro, si los venezolanos votan por él entonces sí comenzará a gobernar como debe ser y a resolver los problemas existentes en el país. Borrón y cuenta nueva, todos estos años de desgobierno no contarán en su currículo presidencial. Incluso ha lanzado su candidatura a través de un nuevo partido, nada de viejos PSUV para el nuevo Maduro. A partir del 20 Maduro es un nuevo líder, porque lo ha decidido él y punto.
A pesar de que cada día aumenta la cantidad de venezolanos que emigran, que la situación económica y social se deteriora a cada minuto, de que muchos ni le verán sentido ir a votar, pues no saben cuál de los candidatos causa más risa, Maduro está seguro de su victoria.
Ya hablamos de los bonos, esas limosnas que entrega cada mes a través del carné de la Patria. Quienes han sido obedientes o “vivos” y tienen ese carné, saben que solo votando a favor de Maduro pueden continuar recibiendo esas limosnas. La gente sabe que su voto no es tan secreto como cuenta el CNE, y pocos de los que reciben esas limosnas querrán arriesgarse a perderlas por nada.
Porque, mientras tanto, Falcón apuesta a prometer dólares para los nuevos salarios, camina por las calles lanzando falsos billetes de dólares con su nombre impreso en ellos. No está de más recordar que estoy viviendo en el mismo estado donde, hasta hace unos meses y por varios años, Henry Falcón fue gobernador. Su mayor proeza entonces fue comprar en Italia una virgen bañada en oro, la patrona del estado de Lara.
Del candidato evangélico sobran los comentarios, su mejor propuesta son las ollas de sopas comunitarias.
Da igual quién reciba la mayor cantidad de votos. Habrá mucha abstención, los medios oficiales dirán que votaron los soñados 10 millones, que es la cifra a la que siempre aspiró en vano Chávez, (¿y Fidel?). Habrá un gran bono millonario para quienes voten por Maduro, que les alcanzará para comprar una barra de pan o, con suerte, medio cartón de huevos. Venezuela va a seguir hundida en la miseria por un buen tiempo, gane quien gane, pero apuesto a que será Maduro.
Desde la primera eleccion que salio Chavez Venezuela se autocondeno, la naturaleza iluminada de esta gente es tal que si el 99% de las personas votan contra ellos , ellos consideran que fueron manipuladas ; cuando un grupo considera que ellos son la encarnacion de la patria, la historia , la virtud o cualquier cosa parecida, de seguro que se va ha aferrar al poder con todas sus fuerzas.
Ojalá salga Maduro y los venezolanos sigan así, como se merecen!!!
Excelente Caridad, en pocas lineas has descrito el circo politico del socialismo castrista de Venezuela. Espero que hayas tomado algunas fotos de las calles vacias para constrastarlas con las cifras de CNE donde Maduro le pusieron mas de 6 millones de votos.
Caridad creo ahora si debes ir pensando alejarte del manicomio Venezuela. Aquello se va a poner bien malo con las sanciones de USA y la UE ademas del aislamiento de todos los paises de la region.
Te noto adaptada de pleno al “madurismo”, engendrado aquí el mismo día que mataron a Chavez, dispusieron enquistar las fuerzas armadas y hacerlos nuestros eternos surtidores de petróleo. Te noto adaptada a ese no haber, aunque aquí ha habido gran forma de prepararse a ello. Lo que no distingo en tus líneas es el miedo o la intensión de moverte hacia otro punto(“aunque sea Bolivia”), sabiendo que no hay rumbo con los chamos, inclusive la guerra civil se ve lejana, infinitamente lejana… opciones como el golpe de estado, con un ejército controlado por los de aquí, sanciones económicas por los organismos internacionales, (que afectarían triplemente ya a la ciudadanía), e inclusive el magnicidio, no son ni medianamente posibles… ante ese panorama qué puede quedar: la estrategia que tanto se ha empleado en tantos países de latinoamérica, dejar que la situación en cuestión se pudra. Suerte, y mejor considéralo, a caminar.