El tiempo, el implacable

Verónica Vega 

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Mitín de repudio. Foto: www.eltonodelavoz.com

HAVANA TIMES — Leyendo el post de mi colega Warhol P. “¿A dónde vamos a llegar en Cuba?”, no pude evitar una respuesta automática: Adonde hace tiempo llegamos.

El incalificable suceso vivido por la actriz Ana Luisa Rubio ha tenido en la isla precedentes más o menos ignorados que sólo las víctimas y familiares y amigos arrastran en diferentes niveles del subconsciente. Por razones obvias estos casos no se publican o tan siquiera se registran. Y la amnesia histórica es el monstruo más fácil de alimentar.

No sé cuántas víctimas hayan dejado tras sí los primeros “performances” admonitorios. Pero en cuanto a las turbas que humillaban y atropellaban en el 80 a aquellos que se atrevieron a confesar su descontento, los “huevazos” no siempre fueron el límite. La ira del vulgo, expresamente activada y acuciada, es incalculable.

Cuando Fidel lanzó su discurso donde aclaraba: “¡nuestro repudio es moral!”, fue precisamente para detener el tsunami.

Conozco a una mujer cuyo hermano murió por una de esas golpizas de “todos contra uno”, donde la única versión, el único enfoque posible es el de la vergüenza. ¿Su delito? Querer irse de aquí.

Pero por más que la ira sea la reacción inmediata ante la barbarie, en honor a la misma naturaleza humana es preciso parar ahí. No degradarse contraatacando. Primero porque entre violencia y violencia ya no es posible diferenciar al justo y al canalla.

Para desenmascarar la violencia hay que aislarla, dejarla sola. Es lo que hace la diferencia entre el hombre y la bestia, lo que deja al culpable expuesto en su totalidad.

En mi opinión, en el caso de la actriz, el punto más vulnerable radica en que es simplemente injustificable que un delito de lesiones, con el agravante de que los agresores son más de tres, no proceda, mucho más si se atestiguaron las lesiones a tiempo y la víctima requirió atención médica.

¿Dónde están los impedimentos legales para que esta denuncia se engavete? Aún ante el manido argumento de que fueron vecinos protagonizando una vendetta, o “el pueblo espontáneo y enardecido”, los agresores son criminales ante la ley.

Y si la voz oficial se alza para defender a los victimarios en vez de a la víctima, entonces la ley misma se degrada.

Desacreditar a la víctima es un recurso también tan viejo, que no sé cómo aún funciona. Es una burda estrategia para desviar la atención.

A la poetisa María Elena Cruz Varela, honrada en nuestra propia tierra con el premio Julián del Casal, después de la desarticulación del proyecto Criterio Alternativo y un masivo linchamiento, se le cuestionaba su nivel de escolaridad y se tildaba de “dudosa” su moral.

Pero el verdadero hacedor de justicia es el tiempo. Me encanta cómo ubica las cosas en su justo lugar.

Mientras María Elena emigró para borrar el pasado y seguir escribiendo y cosechando reconocimientos, como los premios Emilia Bernal y el de Novela histórica Alfonso X El Sabio, es fácil deducir que tanto linchadores como cómplices siguieron con sus vidas sin más distintivo que el anonimato, muy probablemente la miseria material y Dios quiera que el remordimiento.

Lamento también discrepar con mi colega acerca de lo que se lucha en Cuba en contra de la violencia a la mujer.

No sólo porque se cultiva el machismo afianzando la tradición y con la colaboración de los medios, sino porque la impunidad de que gozan los agresores amparados por la propia ley es despampanante. Desde los acosos sexuales hasta la agresión física. Y no sólo a mujeres que manifiestan su oposición política.

Recientemente una amiga llevó a juicio a su ex-pareja por golpearla y amenazarla de muerte frente al hijo de ambos, menor de edad. ¿El resultado?  Una multa de 30 pesos cubanos y un trato casi grosero por parte de la jurista. Ni soñar con la orden de alejamiento que solicitó.

Esto que estamos viendo es la descomposición que empezó hace décadas, alimentada como siempre por el egoísmo, individual y colectivo, y por el también viejo recurso del reciclaje de generaciones, donde la última desplaza a la anterior con nuevas sugestiones, tragedias y escándalos.

Pero ninguna desintegración es eterna, y el proceso que sigue, inevitablemente y por más que tarde, es el de la regeneración. El tiempo, el implacable, una vez más disolverá los nudos, las confusiones, las traquimañas.

Ninguna manipulación o hipnotismo, por más masivo que sea, se resiste al peso de la verdad. Si no, miren al fascismo, cuyo recuerdo todavía abochorna al mundo.

Veronica Vega

Verónica Vega: Creo que la verdad tiene poder y la palabra puede y debe ser extensión de la verdad. Creo que ese es también el papel del Arte, y de los medios de comunicación. Me considero una artista, pero ante nada, una buscadora y defensora de la Verdad como esencia, como lo que sustenta la existencia y la conciencia humana. Creo que Cuba puede y debe cambiar y que sitios como Havana Times contribuyen a ese necesario cambio.

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9 thoughts on “El tiempo, el implacable

  • Muy buen post Verónica, te felicito. la violencia contra la mujer es un problema social y de largo alcance. No se atreverían a arrastrar y golpear a las mujeres opositoras si en la sociedad no fuera una práctica usual en otros ámbitos públicos y privados.
    Y en cuanto al a impunidad de los agresores, es sintomático de la ilegalidad que reina en el país, empezando por las autoridades. Al escritor Ángel Santiesteban lo condenaron a 5 años de prisión y no existió ningún certificado médico de alguna lesión física contra su ex esposa ni ninguna prueba de amenaza de muerte. Sin embargo en el caso que cuentas le pusieron al ex esposo 30 pesos de multa y ni siquiera aceptaron otorgarle a la víctima la restricción de acercarse a ella. Esos son los mensajes de las autoridades a los ciudadanos, ni te protegemos y además si te sumas al descontento, te aplicamos la violencia con uniforme o sin él. La crisis de las instituciones y de la legalidad en el país es en la actualidad muy peligrosa.

  • Veronica, felicitaciones por muy buen articulo!

    Se puede ser de izquierda, se puede luchar por los trabajadores y los humildes pero cuando se permite la violencia y mas aun se motiva y estimula la violencia contra las personas indefensas que se opongan desde cualquier punto de vista eso es una bajeza de proporción infinita. Un día llegara que todos tengamos que sentarnos y ver de que somos responsables.
    Unos por hacerlo y otros por no protestar cuando se ha hecho lo malo.
    Hay que hablar y hay que protestar y ponerles los puntos a las i para que se vea claramente de lo que hablamos. Que no son fantasías de unos pocos inadaptados sociales. Estos hechos insólitos han ocurrido en estos 50 años de revolución y con el beneplácito y la autorización de las autoridades en el poder.

    Reinaldo Escobar escribió un articulo donde menciona una frase de Pedro Luis Ferrer

    “Nadie sabe el pasado que le espera!”.

    Solo cada uno de nosotros es responsables de ese pasado. Un día quizás algunos tengan que responder por lo mal hecho.
    Que dirán? Cual sera su defensa?

    http://www.desdecuba.com/reinaldoescobar/?p=504

  • Ah no, pero Elio dice “ella se lo buscó”. Que alguien le explique que esa es una frase clásica para justificar la violencia contra la mujer.

  • ¡Bravo!

    “…pero cuando se permite la violencia y mas aun se motiva y estimula la violencia contra las personas indefensas que se opongan desde cualquier punto de vista eso es una bajeza de proporción infinita”

    AMËN.

  • Yo tambien la felicito, un alto nivel de justicia.

  • El caso de la poetisa María Elena Cruz Varela galardonada con el Premio Nacional de Poesía, conviene destacarlo. Si vida cambió fatídicamente el 19 de noviembre de 1991. A las cinco de la tarde unas trescientas personas llegaron en vehículos oficiales a la puerta de su casa en Alamar. Entraron violentamente en su casa donde María Elena estaba con su hija Mariela y su amiga Gladys González. Le retorcieron el brazo detrás de la espalda y la lanzaron contra la pared, golpeándose la cara. Entre insultos y golpes la arrastraron escaleras abajo fuera de la casa y la obligaron a arrodillarse. Entonces delante de su hija y a la vista de los vecinos le ordenaron que se comiesen un escrito. Ella cerró la boca con fuerza mientras presionaban el canutillo contra los dientes. Finalmente aflojó la boca y le empujaron el rollo de papel hacia dentro de la garganta. Empezó a notar el sabor amargo de su propia sangre que resbalaba fuera de la boca hacia el suelo. Al verlo una mujer entre la chuspa gritó:

    “¡Que le sangre la boca, coño, que le sangre”

    La policía se llevó a María Elena a la Unidad de Policía de Alamar, donde le interrogaron durante seis horas. Entonces dejaron que volviese a su casa, donde se encontró con que el mitin de repudio continuaba. Aterrorizada y bajo estado de shock entró en su casa para recoger algunas pertenencias entre insultos y empujones. La policía la volvió a detener y la mandaron a Villa Marista donde la mantuvieron incomunicada y sin dejarle ver ningún abogado. A los seis días le hicieron un juicio a puerta cerrada acusándole de asociación ilícita. Pasó un año y ocho meses encarcelada en la prisión de alta seguridad Combinado del Sur en Matanzas. Allí la sometieron a continuos interrogatorios una fuerte luz que le dañó la vista. Ahora vive exiliada en Madrid, a donde obviamente no emigró por motivos económicos.

    ¿Cuál fue el escrito que intentaron que se comiese y que causó todo esto?

    Se trató de un manifiesto donde se pedía, entre otras cosas:

    la cooperación “de los gobiernos democráticos, de las Naciones Unidas, de la Unión Europea y de la Organización de Estados Americanos, así como de los partidos políticos, la prensa, las instituciones y la intelectualidad comprometidos con las libertades y los derechos humanos”, para que “el pueblo de Cuba se libre del caudillismo castrista y recupere su soberanía”.

    Los firmantes decían en el texto que “el traspaso provisional de poderes de Fidel Castro a su hermano Raúl responde a la voluntad continuista de la dictadura que ambos encabezan y que, durante casi medio siglo, ha negado las libertades democráticas al pueblo de Cuba. Este régimen, además, ha arruinado el país y ha dividido a la sociedad cubana”.

    En fin, se trató de un documento que más de veinte años después sigue teniendo plena vigencia.

    María Elena tiene un blog donde se le pueden consultar todos los detalles:

    http://cruzvarela.wordpress.com

  • Veronica ojala pudiera ver este y escucharacto de repudio y lo que le gritan a una dama de blanco;”Machete,machete que son poquitas”..http://sonidodirectocuba.wordpress.com/2013/10/17/acto-de-repudio-a-las-damas-de-blanco-en-el-segundo-aniversario-de-la-muerte-de-laura-pollan/..retratan su cobardia……si fueran muchas darian machete tambien?..Olvidaron que el “actor intelectual del Moncada”como llaman al apostol escribio:
    ¿De mujer? Pues puede ser
    que mueras de su mordida;
    ¡pero no empañes tu vida
    diciendo mal de mujer!

  • Gabriel,
    creo que has mezclado datos.
    El traspaso provisional de poderes de Fidel a Raul ocurrió en el anio 2006. Asi que el escrito con el que torturaron a Maria Elena en el anio 1991 no podía mencionar ese asunto.

  • Es cierto. Eso me pasó por fiarme demasiado de una fuente secundaria, en lugar de recurrir al texto original, un texto que está en la red pero no he sido capaz de encontrar.

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