Mi familia y yo tuvimos suerte
Por Safie M. González
HAVANA TIMES – Por más de un año, mis padres y yo logramos evitar la enfermedad que hoy en día sigue cobrando vidas. En realidad, nos cuidábamos mucho, nuestras medidas de higiene eran extremas, pero, por algún lugar el virus se coló y estamos enfermos.
Hemos pasado días muy difíciles. Gracias a buenos amigos logramos hacernos el test rápido (antígeno) y PCR, (Reacción en Cadena a la Polimerasa). Resultamos todos positivos. Decidieron dejarnos ingresados en casa, tomando las medidas pertinentes y, por supuesto, pasando el médico a visitarnos todas las mañanas.
No quiero entrar a debatir ciertos y determinados puntos que son sumamente importantes y que al final no se cumplen como está orientado. Pero lo más importante es que ya estamos medicados y con la esperanza de sentir mejoría poco a poco.
Sí hay algo en lo que quiero hacer énfasis, y es en la solidaridad de los vecinos y amigos. Que han venido a traer comida y medicamentos. Ha sido conmovedor, realmente. Muchos no se arriesgarían, pero, bastó con saber que estaríamos encerrados en casa por un buen tiempo, y llegaron hasta nuestra reja para dejar viandas, granos, frutas y medicamentos. Todo ello sin cobrar un centavo.
Actitudes como esta nos recuerdan que todavía hay muchas personas que conservan sus valores y son capaces de dar el paso al frente cuando se necesita. En momentos tan difíciles por lo que atraviesa el país, cuando los alimentos escasean, y los que hay se venden a precios muy elevados, no puedo más que agradecerles a todos, aunque muchos de ellos no logren leer este artículo.
Somos cubanos, y ya de por sí, ese solo hecho dice mucho, porque siempre hemos sido solidarios. Cierto es que últimamente muchos valores se han degradado en nosotros, porque pensar que hay personas capaces de vender un tratamiento de antibiótico en 3 mil y 4 mil pesos, me decepciona de la calidad humana. Es tan triste como bochornoso lucrarse con la necesidad de medicinas de tantas y tantas personas que pueden hasta morir.
Mi familia y yo tuvimos suerte. No necesitamos gastar un centavo en medicamentos y por ello estoy inmensamente agradecida con todo aquel que de la manera en que pudo, nos los hizo llegar. Sin duda alguna, esta pandemia maldita, ha enseñado a muchos a valorar quizás la importancia de la vida. Allá quienes solo han visto beneficios para seguir llenando sus bolsillos.
es triste lucrar con la salud de los demas, yo tengo mucho problema con eso, porque te puedes comprar un auto caro y despues no poder pagarlo, ese es TU problema, pero una enfermedad nadie la quiere, nadie la desea, esa te llega y tienes que lidiar con ella a como sea, en ese caso ESA no fue una decision que pudiste tomar, fue algo impuesto por la vida.
Dios bendiga a los que todavia hoy, bajo las horribles condiciones en que se encuentra cuba, tienen en su corazon una gran dote de humanidad y bondad para con sus coterraneos.
lexter dijo:
Sigo sin entender la razón por la que se ve tanta diferencia entre los fallecidos que informa Duran y la cantidad de carros que están transportando fallecidos aquí en Ciego de Avila.
El propio articulo del Invasor dice que no hay consenso entre los números de Duran y los de la Provincia pero esa falta de consenso sigue y las personas hablando mal de la prensa, de Duran y de ahí hacia arriba.
¿Te enteras, sopla tubo?