Tecnología móvil en Cuba

Rosa Martínez

HAVANA TIMES — Desde hace tiempo estoy intentando comprarme un celular, pero siempre aparece algo más importante y necesario en que gastar el dinero. Cuando no es zapatos para las niñas, es alguna reparación urgente en la casa, o si no los gastos comunes de comida y aseo que no dejan oportunidad para nada más.

Tengo un amigo italiano que siempre me dice que le doy más importancia de que la merece un celular, pero la verdad es que nunca lo he visto llegar a Cuba sin sus dos equipos, que cada vez son más modernos y sofisticados.

“Quisiera botarlo, esto no deja de sonar y sonar, no me deja vivir”, me dice, alégrate que no tienes ninguno”.

Llegué a pensar que mi amigo tenía razón, para qué empeñarme en comprarme un móvil, si en ocasiones no tengo dinero ni para comprar unas croquetas, imagínense mantener una línea de ETECSA.

Pero qué útiles son cuando se presenta alguna urgencia, como me ocurrió hace algunos días. Mi hermano menor había sufrido un accidente en Holguín, y gracias a su móvil supimos que, por lo menos él, no tenía daños graves y no tuvimos que salir corriendo como locos hasta esa provincia.

El pasado 3 de abril estos equipos cumplieron 40 años de haber sido usados por primera vez. Fue el ingeniero electrónico Martin Cooper quien realizó en Nueva York la primera llamada  desde un teléfono móvil, que pesaba casi un kilo y medio y tenía una batería que duraba solo 20 minutos.

Desde entonces esta tecnología ha cambiado mucho y ha revolucionado también la vida de millones de personas en el mundo y la forma en que se comunican entre sí.

Tuvieron que pasar 20 años para que este avance tecnológico llegara a nuestro país. Fue en febrero de 1993 que se activó por primera vez en Cuba el servicio de telefonía móvil, pero solo para empresas extranjeras y algunos intereses estatales.

Se fue extendiendo poco a poco hasta llegar a la población  el 14 de abril de 2008, pero todos conocemos cuales fueron los precios en sus inicios, y cuál es el precio ahora, todavía inasequible para la mayoría de los trabajadores.

Se dice que Cuba ya tiene más de 1 millón 600 mil usuarios de celulares, que superan incluso el número de líneas fijas, pero el servicio todavía es muy caro y presenta algunas irregularidades como las que contaba Osmel, que solo se puede ser dueño de una sola línea, y que esta debe pagarse mensualmente sino se pierde.

El celular cambió la vida de la población mundial y el funcionamiento de la economía. La mayor parte de las personas de las zonas urbanas del planeta están siempre localizables gracias a sus teléfonos móviles. Para muchos trabajadores como plomeros, electricistas, técnicos, ingenieros, el móvil es una especie de oficina.

El celular se ha convertido además en el número uno de acceso a Internet, medio de pago, pantalla de video, lector de libros, cámara fotográfica y de video, GPS, radio, entre muchas otras aplicaciones.

Se necesitaron 20 años para que llegara a Cuba, 25 para que llegara a la población cubana. Ya han pasado 40 de su invento y los cubanos no podemos explotar la mayoría de sus servicios por la falta de internet. Yo particularmente necesitaré otros 40 años para poder tener uno en mis manos, y quizás después necesite 40 más para mantener el servicio.