Cierre la cárcel de Guantánamo ya

Rosa Martinez

HAVANA TIMES, 20 ene — El pasado fin de semana mi Hija Tanía visitó Caimanera por primera vez. Anteriormente le había contado sobre la existencia de la Base Naval de Guantánamo, cuándo y cómo surgió y de lo que significa para la mayoría de los cubanos.

Caimanera esta ubicado justo al norte de la base naval.

Cuando supo de la base naval quiso saber qué se hacía allí, si los que vivían allí eran cubanos o norteamericanos, si hablaban inglés o español, si eran blancos o negros. Le expliqué.

Tania nuevamente está interesada en la base, su interés ahora es la prisión. Escuchó una noticia sobre los prisioneros de guerra que mantiene Estados Unidos allí, violando todas las leyes internacionales. Mi niña dice que Estados Unidos siempre hace lo que le da la gana, ¿porqué?

Caimanera es el municipio donde está enclavada la base Naval que Estados Unidos robó a Cuba en 1903, gracias a un sucio tratado. Desde hace una década la convirtió en una de sus más grandes vergüenzas.

Su existencia ya era una violación a las autoridades cubanas, pues es un territorio que pertenece a los cubanos por derecho propio, pero de eso no hablaré ahora.

Lo que es peor para el mundo entero es que en esta ignominiosa prisión permanecen todavía cerca de 200 detenidos, de los cuales unos 12 están desde que se inauguró  la cárcel  el 11 de enero de 2002.

De más está decir los múltiples maltratos y torturas a los que han sido sometidos esto detenidos en nombre de la lucha contra el terrorismo. El mundo entero conoce de estos atropellos, todos los hemos visto en videos, fotos, pero eso tampoco parece importarle al señor Obama ni a su camarilla.

De todos los prisioneros encerrados en Guantánamo,  uno fue condenado en el 2008, por una comisión militar a cumplir cadena perpetua, pero el resto no ha sido acusado formalmente de ningún delito. Según Amnistía Internacional Estados Unidos ha solicitado la pena de muerte para seis prisioneros que han sido condenados en juicios “injustos.”

Durante los diez años que cumplió la base este enero unos 750 detenidos han  pasado por ahí.  La aprehensión de estos hombres, las torturas y los vejámenes a los que fueron sometidos, así como todos los tipos de violaciones de los derechos humanos que allí se someten son una muestra más de que el gobierno de los Estados Unidos hace cuanto se le antoje.

Los países del mundo se pronuncian y ganan batallas en  la lucha contra la contaminación medioambiental, contra la homofobia, contra la violencia de género y la discriminación, así como el hambre y la pobreza.

Se necesitan esfuerzos similares para que Estados Unidos cierre esta injusta cárcel de una vez y por todas.