Un cubano aspira al Nobel  y la prensa oficial guarda silencio

Por Pedro Pablo Morejón

Leonardo Padura.  Foto: infobae.com

HAVANA TIMES – El escritor Leonardo Padura no necesita mucha presentación. Su nombre suena hasta en los oídos de muchos cubanos que no son precisamente amantes de la lectura.

Se trata de uno de los escritores más leídos en lengua española de estos tiempos y su extensa obra literaria ha sido traducida a varios idiomas. Ha sido premiado en disímiles concursos literarios, pero basta decir que obtuvo el Premio Nacional de Literatura en el 2012, Premios de La Crítica en 2011 y 2014 y el muy codiciado Princesa de Asturias en el 2015.

Todos lo conocen, fundamentalmente, por su peculiar personaje de Mario Conde, un policía nostálgico que aspira a ser escritor y que en nada se parece a los arquetípicos y predecibles investigadores policiacos creados por autores adscriptos al discurso ideológico oficial. Es, de hecho, el principal exponente de la novela negra en Cuba.

Pero además de la tetralogía de novelas sobre Mario Conde y las subsiguientes, posee obras de alto valor literario como La novela de mi vida y El hombre que amaba a los perros, por poner solo dos ejemplos. Esta última le valió el Premio de la Crítica y al decir de Gina Picart, prestigiosa escritora y editora de nuestro país constituye la mejor novela cubana escrita en las últimas décadas.

Lo anterior le ha otorgado suficiente credibilidad para merecer su inclusión entre los candidatos al Premio Nobel de Literatura, que se otorgará en octubre de este año, el mayor galardón que se le reconoce en el mundo a un escritor, lo cual debe ser motivo de orgullo para la cultura cubana.

En un país con tanta producción literaria de calidad indiscutible ningún cubano ha podido obtener el supremo reconocimiento, aunque hemos tenido tres premios Cervantes en los casos de Alejo Carpentier 1977, Dulce María Loynaz 1992 y Guillermo Cabrera Infante 1998.

Pues bien, la prensa oficialista no ha dado cobertura a este hecho. Algo que para nada es sorprendente si tomamos en cuenta que el autor más leído en este país lleva años padeciendo silencio por parte de los medios y las instituciones culturales.

El propio escritor ha dicho al respecto “Lo cierto es que tengo más presentaciones, ediciones, reconocimientos fuera de mi país que dentro de él, y esas presentaciones, ediciones y reconocimientos apenas tienen eco en Cuba, cuando creo que deberían ser elementos de los que se congratule la cultura cubana, pues soy un escritor cubano, que incluso, vive y escribe en la Isla. ¿Quién o quiénes determinan tal estado de cosas? No lo sé. ¿Por qué? Tampoco… Ese quien o esos quienes lo sabrán y supongo que alguna vez sabremos sus razones”

Los motivos podemos imaginarlos, pues Leonardo Padura ha sido un literato incómodo para los gobernantes cubanos, al retratar en su narrativa la dura realidad cubana, diferente a la presentada por la publicidad oficial. De ahí el silencio.

De ahí también la casi nula mención de su premio Princesa de Asturias y el contrastante tratamiento mediático con el mismo premio obtenido por Javier Sotomayor, figura más útil a los intereses políticos, al igual que la Brigada Médica Henry Reeves, sobre la que se ha montado una gigantesca campaña para su promoción al Premio Nobel de la Paz.

Sin embargo, en caso de que obtenga el Premio Novel de Literatura, la prensa dependiente recibirá órdenes de publicitar semejante hazaña y acogerlo como un digno hijo de la cultura. ¿Alguien duda? Lo mismo se hizo con Guillermo Cabrera Infante cuando obtuvo El Premio Cervantes.

Pedro Morejón

Soy un hombre que lucha por sus metas, que asume las consecuencias de sus actos, que no se detiene ante los obstáculos. Podría decir que la adversidad siempre ha sido una compañera inseparable, nunca he tenido nada fácil, pero en algún sentido ha beneficiado mi carácter. Valoro aquello que está en desuso, como la honestidad, la justicia, el honor. Durante mucho tiempo estuve atado a ideas y falsos paradigmas que me sofocaban, pero poco a poco logré liberarme y crecer por mí mismo. Hoy soy el que dicta mi moral, y defiendo mi libertad contra viento y marea. Y esa libertad también la construyo escribiendo, porque ser escritor me define.

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8 thoughts on “Un cubano aspira al Nobel  y la prensa oficial guarda silencio

  • NO estoy de acuerdo en darle en que esa novela, El hombre que amaba los perros sea la mejor novela escrita ni mucho menos. En la literatura cubana hay muchos autores mejores que él. El novel a quien se lo merezca, es risible escojer a Padura para ese galardón. Mario Conde no es un personaje profundo ni que aporta nada a la cultura cubana. Padura usa metáforas ridículas.

  • Es bueno y su obra me encanta, la he leído absolutamente toda, al menos la publicada; su “El Hombre que amaba a los perros ” me parece de lo mejor que se ha escrito en Cuba en los últimos 20 años, posiblemente la mejor novela cubana de esos cuatro lustros. Pero no creo que merezca el Nobel, al menos no, todavía haya esa enorme deuda con Jorge Luis Borges, al que no se lo dieron por ser de derecha y no ocultarse ante nadie para proclamarlo.

  • Estimada Irina, concuerdo en algunas cosas contigo.En mi modesta opinión las novelas sobre Mario Conde son buenas aunque no tanto para la reputación que se les ha otorgado. Que merezca el nobel o no ya es algo bastante subjetivo y no me atrevería desde mi humilde conocimiento a tener un juicio exacto al respecto. Ahora, en cuanto al hombre que amaba a los perros sí creo que es una de las mejores novelas escritas no solo en Cuba sino en lengua castellana…y mira que he leido obras premiadas de Vargas Llosas o gracía márquez, por poner dos ejemplos.

  • El tipo me cae mal y lo de Conde no hay quien se lo meta pero El Hombre que Amaba a los Perros es una gran novela sin duda.

    ¡Gracias Fidel!

  • Irina:
    ” Dije: “la mejor novela cubana de los últimos 20 años”, no dije en ningún momento que fuera la mejor novela que se haya escrito en Cuba, ni mucho menos. Pero si crees que no tengo razón, cítame una novela escrita en los últimos cuatro lustros que la supere.

  • No está aspirando al nobel, lo dieron como propuesta, pero no lo nominaron. Saludos

  • Padura maneja muy bien las técnicas del guión cinematográfico y es un excelente periodista, combinación que ayuda muchísimo a un narrador de policíaco, pero es un escritor tramposo y muy manipulador. El hombre que amaba a los perros es una novela de estructura cinematográfica muy sólida, pero apela a recursos de una gran teatralidad, y el lenguaje no es literario. Como dijo Victor Fowler una vez hablando de otra cosa, “la literatura es una manera de poner las palabras”. Padura no tiene ese don o se desentiende de eso. Además, casi todos los escritores cubanos arropados por la industria editorial española ganan premios fuera de Cuba y consiguen cosas que los que están sembrados aquí no pueden alcanzar ni aunque estiren tanto los brazos que se los partan. Cuba no promueve a sus escritores más allá de nuestras costas. Es una triste realidad. Como si no fueran personas de interés como los músicos o los pintores o el Ballet Nacional. Lo cierto es que si en lugar de haber sido Padura quien se en contró con Beatriz de Moura hubiera sido Alberto Guerra, ¿…? La agencia Balcells ha aceptado a OTROS ESCRITORES CUBANOS, MUY POCOS, ES VERDAD,Y EN UN CASO, UNO DE ELLOS LUEGO NO LES ENVIÓ NADA. NO ES SOLO PADURA: HAY MÁS Y MEJORES EN CUBA.

  • El hombre que amaba a los perros es un thriller suculento y haría un muy buen guión para un filme. Yo me lo leí con gusto, pero en Cuba hay novelas mejores. Estamos hablando de literatura, digo, eso creo, no de pasiones ni de arrebaticos. Y acoto que como mismo hay escritores geniales, buenos, regulares y malos, hay lectores jugando en todas esas mismas categorías. Ya lo dijo Carpentier: “Hay buenas y malas sensibilidades”. Mario Conde es un tango de la Revolución, una victrola de 197… que ya sonó demasiado, no tiene discos nuevos y en verdad nunca tuvo nada realmente meritorio como creación de un personaje, siempre fue un manojo de clichés, o de anticlichés, para ser más exacta. Padura es un buen escritor para el mercado del policíaco de grandes ligas, pero no para un Nobel, al menos todavía, pues mañana puede publicar una novela que deje a Borges como un dibujito plano sobre el asfalto. Es difícil, pero no imposible. Y conste: en ninguna crítica, reseña ni artículo de periodistas, críticos, ensayistas o escritores cubanos de prestigio he visto lo que se cita en este artículo. Nunca he visto esa declaración en ninguna parte y tengo la seguridad casi total de que jamás fue hecha. Una cosa sí es cierta: en Cuba hay muchísimos, pero muchísimos escritores peores que Padura. ¡¡¡Malísimos!!! Al César…

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