¿Se acerca el fin de la Covid 19 en Cuba?
Por Pedro Pablo Morejón
HAVANA TIMES – Soy consciente que la manipulación descarada de la realidad por parte de la prensa oficialista es un hecho consuetudinario.
A modo de ejemplo, Cubadebate, el sitio digital que se autoproclama contra el terrorismo mediático no es otra cosa que un estercolero ideológico y su propio nombre, ya es, en sí mismo, delirante, al mostrar el discurso oficial por medio de un monólogo insulso donde el pluralismo y debate de las ideas brillan por su ausencia.
También su slogan, mejor debería plasmar algo así como “a favor del terrorismo mediático”, a juzgar, además, por los asesinatos de reputación que muchas veces se cometen contra personas opuestas al régimen.
Y ni qué decir de los comentarios que se vierten en dicho medio por lectores altamente fanatizados o con doble moral. Obviamente, las opiniones disonantes casi nunca son aprobadas. Soy testigo de primera mano.
Pues bien, a veces lo reviso, solo por ver la publicación del reporte de los casos diarios de La Covid 19. No porque crea en la veracidad de dicha información (tengo la teoría de que se debe multiplicar por cuatro el número de contagios y su letalidad) pero al menos me ofrece una idea del incremento o disminución de la enfermedad en nuestro país.
Admito que ni aun así hay modo de estar seguro pero el anhelo por terminar con esta crisis sanitaria nos hace agarrarnos de cualquier dato que nos muestre una luz al final del túnel. Para eso no queda otro recurso que acudir a las cifras oficiales.
Y por estos días la prensa reporta una disminución sustancial de las cifras de enfermos y fallecidos. Según expertos la curva irá disminuyendo gradualmente en la medida que la vacunación avance.
Los datos oficiales informan que hasta el momento ya más del 80% de la población ha recibido al menos una dosis de Soberana 02 o Abdala. Se calcula que para enero del 2022 todos los cubanos hayan recibido el esquema completo de vacunación.
Sí esto resulta verdadero, pronto el país estará en mejores condiciones para salir del flagelo y afrontar los retos de una economía desastrosa, provocada por el bloqueo interno, la pandemia y el embargo estadounidense, orden causal según mi apreciación.
El pueblo cubano ha sufrido demasiado con la nueva enfermedad. Cada día la voz de la calle reporta decenas de muertes a nivel de municipios y es común observar barrios o cuadras enteras con un alto número de enfermos, muchos de los cuales ni siquiera forman parte de las cifras reportadas por las autoridades.
Los apagones van a continuar, así como la escasez de alimentos, medicinas y otros bienes de primera necesidad. El bloqueo interno no permite al cubano ser libre ni resolver su propia crisis. Pero al menos nadie vivirá con la zozobra de perder la vida o la de alguno de sus seres queridos.
No debemos olvidar que a principios de año los portavoces del régimen anunciaron que para agosto el 75% de la población estaría vacunada contra la Covid 19. Todos sabemos lo que sucedió: un aumento exponencial de los casos de contagios y muertes.
El futuro tendrá la palabra. Ojalá que por esta vez no estén equivocados.
Es posible que estén bajando los números de casos, pero no es sólo por la vacuna, es que muchos ya han pasado el virus y tienen anticuerpos. Para los apagones no hay solución, todas las plantas generadoras están obsoletas y rara vez han recibido un buen mantenimiento, las van reparando cuando hay alguna avería, como los almendrones. La inversión es de miles de millones que no los hay, ni los habrá, será un gran problema porque ninguna economía puede despegar en esas circunstancias. A eso hay que sumarle que el precio del petróleo se ha duplicado en lo que va de año, no es negocio comprar petróleo en moneda dura para vender electricidad en pesos muy devaluados.
Pienso que en todas las sociedades humanas y en todos los tiempos ha existido la doble moral, esta la moral imperante, la impuesta por el poder y la moral de cada individuo. Todo aquel que manifieste la propia moral en contraposicion a la moral dominante sentira caer sobre él valangas de fango. En la Cuba comunista se ha exagerado.
Por ejemplo la moral dominante en occidente impone el pacifismo, cualquiera que se pronuncie a favor de la guerra necesaria le caera encima valangas de fango, como le ha sucedido a la “mafia de Miami”.
La revolucion francesa que por ser una revolucion burguesa tambien los comunistas le han botado encima toneladas de fango, proclamo dos principios que la revolucion proletaria rusa ignoro: Libertad e Igualdad, es decir, que todos los hombres son iguales ante la ley, todos los hombres pueden ser juzgados y condenados por Tribunales de Justicia, el mejor ejemplo: pena de muerte para la reina y el rey.
Un insulto a la inteligencia reportar menores nuevos casos de COVID-19 y afirmar que estan saliendo de la pandemia con cada vez menos examenes y ocultando las muertes.
En Francia era conocida una cita famosa atribuida a Luis XIV, el rey sol: “El Estado soy yo”Es una manera de proponerse al frente del Estado. De una forma claramente absolutista. Él es el pueblo. Representa no a la administración sino al pueblo todo.
A partir de ahí la historia de reyes absolutos, dictadores, caudillos, generalísimos y comandantes supremos que han querido salvar al pueblo es interminable.
Fidel Castro era Jefe de Estado, Jefe de Gobierno, Presidente de la ANPP, Primer Secretario del Unico partido PCC, Comandante en Jefe del Ejercito. Fidel Castro era el Estado.
La Revolucion burguesa en Francia fue contra el poder absoluto, despues por haber sido tan terriblemente violenta llevo a otro, Napoleon. La clase media internacional mal llamada “burguesia” ha aprendido la leccion la violencia solo lleva a la sustitucion de un poder absoluto por otro.
Asi la revolucion burguesa armada liderada por Fidel Castro llevo de la dictadura de Batista al totalitarismo castrista.