Aquí en Cuba no estamos preparados para el COVID-19

Por Miguel Arias Sánchez

HAVANA TIMES – El mundo vive un momento tenso y difícil; en China, donde apareció el brote de coronavirus, los infectados se cuentan por miles y las muertes otro tanto. Igual invade el continente europeo, con Italia a la cabeza entre los países más afectados.

Según datos de la OMS, la mayoría de las personas, un 80%, se recupera sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial: 1 de cada 6 personas que contrae el COVID-19 desarrolla una enfermedad grave, tiene dificultades para respirar y requiere hospitalización. Quienes padecen de hipertensión, problemas renales, cardíacos o diabetes, tienen más probabilidad de desarrollar un estado grave.

Ante tos y dificultad para respirar debemos buscar atención médica. El período de incubación oscila de 1 a 14 días y en general 5. Se transmite principalmente por contacto con otra persona enferma, más que por el aire. Cuando estornudan o tosen delante de nosotros, las goticas que expelen podrían infectarnos, por eso insisten en que la distancia que debemos guardar de otra persona sea de 1 a 1,5 metros, y en evitar las aglomeraciones.

Todavía no se ha encontrado la vacuna que ayude a frenar su avance. Entre las medidas sanitarias que promueven internacionalmente – nuestra televisión en particular- repiten lavarse las manos constantemente con agua y jabón, y con un desinfectante a base de alcohol. Evitar tocarse los ojos, la boca y la nariz. Para toser o estornudar cubrir la boca con un pañuelo o servilleta desechable, o hacerlo con el antebrazo. La contaminación por el contacto con paquetes u otro objeto de uso manual es baja.

Con todos estos datos, es lógico que en Cuba haya inquietud. Antes era preocupación, pero ahora que han confirmado varios casos, es temor. Más allá de que estemos acostumbrados a saludarnos con besos y hablar bastante cerca uno del otro, ¿cómo podemos evitar aglomeraciones? ¿Separarnos más de un metro en una guagua? ¿En las colas?

Tengamos en cuenta que cada cubano adulto hace, al menos, una cola diaria para adquirir un producto necesario, no para lujos. Y ni mencionar la escasez de productos de aseo como jabón o servilletas que escasean a pesar de que ya estamos en marzo, mes que en un principio se dio como límite para regularizar la presencia de los artículos de aseo en el mercado nacional; luego lo pospusieron para abril, esperemos que no sigan corriéndolo.

El uso de antibióticos está contraindicado, pues no son eficaces salvo para casos específicos, pero si no fuera así también tendríamos un problema, pues en estos días es difícil conseguir medicamentos, así como el alcohol para desinfectar nuestras manos.

Y, para colmo, cuando muchos países están cerrando sus fronteras para evitar una mayor propagación del coronavirus, el Ministerio del Turismo alienta a los turistas a venir, promoviendo que tendrán una buena estancia.

Tenemos todas las condiciones para que el coronavirus se establezca y goce de buena salud en nuestra pequeña isla. A nivel mundial es terrible, hace unos días hubo más de 4000 nuevos casos en solo 24 horas. Entonces, no nos queda más remedio que, sin crear pánico o terror, estar conscientes a nivel personal e intentar hacer lo que esté en nuestras manos para enfrentar esta terrible situación por la que atraviesa el mundo.