La odisea de conseguir zapatos ortopédicos

Mercedes González Amade

shoe-repair-personHAVANA TIMES — Los zapatos ortopédicos, según tengo entendido, son como una especie de medicina, pues corrigen posturas o ayudan al paciente a caminar con más seguridad.  Muchas personas dependen de este calzado especial para su vida cotidiana, sean jóvenes, niños o adultos mayores.

Aquí en la capital solo hay dos centros especializados en este tema. En uno se realizan zapatos para todo el que vaya allí, pero en el otro o solo se atienden a los residentes de ese municipio o los que necesiten el calzado especial para ortesis o calipe (es decir, para aparatos).

Las demás personas tienen que pasar una odisea para lograr comprarlos. La demora que hay entre la entrega de la receta, la toma de las medidas y, finalmente, tener los zapatos en la mano -o mejor, en los pies- puede ser de seis meses hasta un año. Considero a esos padres  que tienen niños en esta situación, pues esos angelitos crecen por días y, en seis meses, las medidas cambian.

Luego está el tema de la calidad, que no es la mejor, sin contar que los modelos son horrorosos, por lo que cuesta trabajo que un joven o adolescentes los use; hay que hacerles la conciencia de que es como tomar una medicina.

Lo único positivo es que su precio es módico.

Pienso que deberían estar disponibles o al alcance de las personas como yo, que los necesito  permanentemente para poder caminar.

Como no tienen buena calidad, y su compra es limitada y difícil, hay que acudir a los cuentapropistas, quienes los venden a un precio elevadísimo (20 veces su valor) y a veces, por no decir siempre, no los hacen con los requerimientos que necesitamos. Por lo que al final de cuentas, nos desgastamos en su búsqueda y captura… y no siempre cumplen su objetivo.

Entonces, los vemos como una medicina, pero sería mejor que nadie los usara, pues las personas enferman en la lucha por conseguirlos.

 

 

Mercedes González

Mercedes González Amade: tengo 38 años y soy discapacitada. Sobre muletas o en silla de ruedas lucho a diario en esta vida. Tengo un niño de 12 años que es mi inspiración principal y por el que lucho a brazo partido. Ocupo un cargo en la institución gubernamental que atiende a los discapacitados de mi municipio y en las tardes practico Tenis de Campo bien lejos del lugar donde vivo. Mi intención con Havana Times es contribuir a contagiar el deseo de vivir y de hacerlo dignamente, sobre todo en personas con dificultades físicas y motoras.

Mercedes González has 32 posts and counting. See all posts by Mercedes González

3 thoughts on “La odisea de conseguir zapatos ortopédicos

  • mi hijo tiene 50 anos y cuando vi el titular,le dije a mi esposa : oye a ver si te suena este lamento cubano actual….y le lei el titulo de este comentario….ella me respondi : la vida sigue igual !!!!! Que tragedia los zapatos ortopedicos de mi pequeno hijo !!!!

  • Lo mismo decía mi madre cuando yo era chiquito; y ya tengo 54.

  • Si hay zapatos ortopédicos, pero tienes que pagárselos más caros ( por la izquierda) en los talleres que lo producen. Yo hace unos 15 años viendo que nunca me llamaban para los zapatos ortopédicos de mi hijo, fui personalmente al taller y hablé con dinero en mano con la administradora y la siguiente semana mi hijo tenía sus zapatos ortopédicos en sus pies.

    En el socialismo cubano los medios de producción si son de los trabajadores, lo único es que dan un servicio caro por debajo de la mesa para quedarse con el dinero que el gobierno les roba de los salarios. Lo mismo pasa en los dentistas, oficinas de tramitación de documentos, panaderias, la ONT, los inspectores, los almacenes, los taxistas, los choferes, etc.

Comentarios cerrados.