El agua y su precio
Mercedes González Amade
HAVANA TIMES — El inicio de año fue bastante seco y, a estas alturas, las lluvias apenas se han visto.
La gente anda tensa con el nuevo periodo especial, y no es para menos. Si ya tenemos problemas con el abasto de agua, ¿cómo será a partir de ahora?
Hay zonas donde el preciado líquido llega cada tres o cinco días, es muy preocupante que ese ciclo se vea más alargado. Es triste ver a personas cuya única opción es esperar durante horas para llenar sus cubos o tanquetas, y hasta agredirse en el intento.
Los que tienen más recursos, aunque también están afectados, utilizan sus posibilidades y pagan pipas de agua al precio que sea; esto se ha convertido en un negocio lucrativo para los que tienen en su poder ese control. Las pipas son estatales y dejan de llegar a los lugares que le son asignados para ir directo a las casas de los que le pagan por la izquierda, afectando aún más a los menos favorecidos.
Otro asunto es el tema del ahorro. Soy consciente de su importancia, pero en varios puntos de la ciudad se despilfarra por miles de salideros y por otras negligencias…
Cerca de mi casa surgió un manantial, allí, en épocas de escasez total, algunos pocos resolvíamos cuando se demoraba en llegar el agua a la cisterna. No llamaba la atención hasta que empezó a acumularse agua y se formó un criadero de mosquitos; ya sabemos los problemas que eso trae. Todas las enfermedades de la zona se le achacaban a ese charco. La gente se quejaba, las autoridades sanitarias también… hasta que alguien apareció y decidió llevar ese manantial a Aguas Residuales para evitar el recorrido del líquido por las calles del barrio.
Ahora, con esta escasez, la gente recuerda el manantial con añoranza; las protestas por el charco-foco-de-mosquitos pudieron haber derivado en otra cosa, no en algo tan radical que perjudica a todos. Nos vendría tan bien esa agua pura que no costaba ni un centavo…
El Estado está tomando medidas serias con aquellos que negocian con la necesidad de otros, pero no es suficiente. La sequía aumenta, el agua es más difícil de conseguir, el negocio sigue y el precio aumenta.
Y eso solo es el comienzo de lo que viene después que caiga el chavismo en Venezuela.
“El Estado está tomando medidas serias con aquellos que negocian con la necesidad de otros, pero no es suficiente” dice Irina. El estado puede estar persiguiendo a los vendedores de agua pero a la vez planea construir varios campos de golf los cuales son considerados los mayores consumidores de agua dulce. Los centros turisticos, incluyendo las gigantescas picinas no carecen de agua, el 60 % del agua “dicen que potable” se malgasta en salideros. Pero es mas facil atacar al vivo que se aprovecha de las dificultades, lo mismo que estan hacienda con los choferes de autos particulares de alquiler. No crees?
y quien toma medidas cuando es el estado quien negocia con la necesidad del pueblo..??
¿Quién es el responsable de la falta de agua? El gobierno de Raúl Castro y antes su hermano mayor. Si hubieran elecciones democráticas en el país este y todos los demás asuntos de infraestructura del país ya estarían resueltos. Pero tenemos un gobierno incompetente que se la pasa aplicando “la solución del sofá”.