Aterrorizan a artistas y funcionarios cubanos

La Seguridad del Estado

Por Lynn Cruz

HAVANA TIMES – Continúan las represalias y el terror contra los artistas cubanos. Adonis Milán, un talentoso y joven director de teatro, quien además pertenece a la Asociación Hermanos Saíz (AHS), ha recibido una citación del Ministerio del Interior, que no tiene ningún basamento, pues él no ha cometido otro delito que no sea: “El derecho a la libre filiación”.

A raíz de que Milán se incorporara a la #00Bienal, organizada por Yanelis Núñez y Luis Manuel Otero Alcántara, además de surgir entre ellos una afinidad en cuanto a la idea de crear al margen de las instituciones, donde ha resistido de manera admirable Perséfone Teatro, bajo la dirección del propio Milán.

Este joven ha llevado a cabo una labor digna de respeto y admiración. En medio del caos nacional, como parte de una generación que ha nacido con la única idea de no parecerse a sus padres, quienes malgastaron su vida al apostar por un ideal, que los condujo a ninguna parte.

Ellos quieren escribir su propia historia, ser los protagonistas de su drama, alzar su propia voz;  de ese modo, Milán le paga un salario mínimo a sus actores, de su propio bolsillo, puesto que la AHS solo le brinda un espacio, que lo cuestiona, muchas veces irrespeta, y hasta lo censura.

No es extraño que a la iniciativa de convocatoria a esta bienal independiente, donde Núñez y Alcántara, sus autores, han pagado un precio alto que incluye el encarcelamiento injusto, por medio de argumentos absurdos, que constituyen una voluntad política de amedrentarlos, y ahuyentar a todos los que colaboren con ellos.

Es cada vez más visible la incapacidad de la institucionalidad cubana y de sus funcionarios, contra los que el propio Gobierno ha arremetido y aterrorizado también, pues la reciente expulsión de Noel Bonilla del Consejo Nacional de las Artes Escénicas  no es más que una manera de escarmentar a todos los que como él, desempeñan cargos públicos.  

Recientemente la AHS organizó una gira para Perséfone Teatro a Santiago de Cuba, con su obra  Máquina Hamlet, estrenada el pasado mes de octubre en la Madriguera, sede de esa organización en la ciudad de La Habana.

Al llegar a Santiago, se sorprendieron de que la obra aún debía ser valorada por los políticos santiagueros, cosa que no fue aclarada pues al parecer todo estaba coordinado entre las instituciones de ambas provincias.

De modo que los gastos de pasaje, alojamiento, alimentación, podrían haber sido en vano, y además malgastados los recursos del estado, sin que nadie siquiera, pudiera cuestionar el absurdo de estas decisiones.

Resultó finalmente ser vista y  juzgada por un jurado censor del Consejo Provincial de las Artes Escénicas de Santiago de Cuba, quien finalmente aprobó las funciones programadas para el viernes 24 y sábado 25 de noviembre, pero pudieron mostrar la obra una sola vez, porque la seguridad del estado, suspendió la segunda función alegando que: “la obra ponía en duda, la figura de Fidel Castro”.

Otra estrategia de coacción empleada en su contra fue, desmoralizarlo ante sus actores, quienes ahora temen trabajar con él. Una de las actrices le confesó que un oficial sin nombre, pero evidentemente de la seguridad del estado llamó a su casa, y habló con su mamá, preguntándole qué estaba haciendo su hija,  y qué obra estaba montando con Adonis.

Así lo han hecho extensivo al resto de los intérpretes como pasó con el joven Carlos Chaviano, quien desapareció misteriosamente por un tiempo largo.  Antes, Milán se había ofrecido para tratar de conseguir un permiso especial, como le han sido otorgados a otros actores noveles, para suspenderle la entrada al servicio militar, por encontrarse trabajando en una obra de teatro.

Juntos se dirigieron al CNAE y a la AHS para emprender esta lucha, que tenía el argumento: “Objetor de conciencia”, reclamando el derecho a estar en contra de la guerra, y así exigir la voluntad de no querer ser parte del servicio militar activo. Evidentemente ellos ignoraban que ese hecho en sí mismo representaba una manifestación de oposición política, nada menos que contra el Ejército.

El protagonista de Máquina Hamlet, otro joven actor, Ernesto Pazos, teme por el puesto de sus padres, pues cree que también hablaron con ellos, y anunció su salida próxima del grupo.

Milán no se presentó a la citación de la Seguridad del Estado, pues en ese momento se encontraba viajando, y ahora lo volvieron a llamar con el argumento de sostener con él: “Una conversación amistosa”.