Ecos cubanos del Censo homofóbico 2012
Isbel Díaz Torres
HAVANA TIMES – El año pasado denuncié en estas páginas la grosera manipulación realizada por la dirección del Censo de Población y Viviendas, con el fin de invisibilizar la existencia en Cuba de parejas homosexuales conviviendo bajo el mismo techo.
Como recordarán, en aquel entonces se supo que en las orientaciones a los numeradores había sido tachada con bolígrafo la referencia a conyugues del mismo sexo, y al lado habían estampado la aclaración de que “las parejas deben ser de sexo diferente”.
Un año más tarde han comenzado a publicarse los resultados finales de la investigación, y resulta que el indicador del estado civil, que se le preguntó a los mayores de 12 años, refleja que “la proporción de personas con vínculo conyugal es de 56,8% a nivel nacional; el 21,7% declaró estar unidas”.
Aunque muchas personas homosexuales declaramos estar unidas, y como tal fue plasmado en las planillas; los numeradores tenían orientado borrar esa información al salir de las viviendas.
De tal modo, ni siquiera las personas LGBT que asumimos nuestra orientación sexual públicamente, y declaramos estar unidas, y vivir bajo el mismo techo, estamos contemplados en ese 21,7%.
Hace once años que tengo una relación estable, hace más de dos años que vivimos juntos, pero eso no es “estar unidos” para la burocracia cubana.
La distorsión no parece que será reparada en lo inmediato. Según fuentes fidedignas (imposibles de rebelar), a raíz de las denuncias el pasado año el director nacional del Censo, Juan Carlos Alfonso Fraga, prometió que en 2013 realizaría una encuesta exclusivamente para reflejar esa y otras variables al interior de la comunidad LGBT.
Culminamos noviembre, y nada de encuestas para los gays cubanos. Seguimos invisibles para los papeles, aunque se nos presente en las telenovelas. Difícilmente puedan diseñarse políticas inclusivas y no discriminatorias, si el Estado ni siquiera se atreve a recopilar información sobre nosotros.
Pues nada , Isbel, que hay que seguir dando batalla, tocando puertas y despertando conciencias.
Amigos, no voy a entrar en que si esta bien o no ser LGBT, pero creo que es ridiculo eso de que te tengan en cuenta para esto o aquello, ser LGBT no es ni una enfermedad, ni una raza, ni un posicion social, ni siquiera define el sexo de la persona, es una inclinacion, un deseo (distorcionado o no). Entonces porqué hacer estadisticas sobre los que tienen cierta inclinacion o cierto deseo. Habria que tambien hacer estadistica de los que tienen mascotas, de los que les gusta el chocolate o los que le gusta el frio o el calor. Eso es ridiculo amigos.
Hola Isbel, en aquel momento tambien comente en este mismo sitio, que cuando a mi y a mi esposa nos preguntaron que quien era el jefe de nucleo le dijimos que los dos , el encuestador(de 18 años) nos miro con cara de carnero degollado y dijo que yo tenia que ser el jefe porque habia que poner a alguien, si no reconocen ni la igualdad entre hombre y mujer que vamos a esperar de los matrimonios del mismo sexo.
De nada vale que se toquen puertas y se batalle hasta el cansancio, mientras Cuba siga bajo un regimen dictatorial donde no se respete el derecho a las libertades de las personas de ser, pensar , actuar y hacer (dentro de la ley ) como mejor les plazca , todo sera como echar agua en un barril sin fondo.
Que mas batalla se va a dar si ‘la maxima hijisima’ del dictador se la pasa gastando el dinero del pueblo haciendole propaganda al trono de su malvado padre diciendole a todo el mundo los derechos que LGBT tienen en Cuba , haciendo la propaganda para que vayan a Cuba ha hacerse el cambio de sexo, todo facil, en Cuba no se les dara el mas minimo dolor de cabeza, sin respetar la moratoria del tratamiento psicologico requerido, el proposito es que entren dollares a las arcas del patrimonio.
Queridos amiguitos, esto no es mas que la misma burla que siempre han usado con el pueblo de a pie, siguen siendo los mismos expertos en marginar, homophobicos, racistas, clasistas de antan`o , pero lo mas triste es que siga habiendo cubanos con el animo de mantener la fe en que van a cambiar.
Y seguimos con la doble moral oficialista. Mientras se ignoran a los gays en el censo, mientras la Asamblea Nacional se niega a “aprobar” el matrimonio gay la infanta Mariela Castro viaja por el mundo declarando las bondades del sistema con los gays: algún que otro cambio de sexo, las congas en los días del orgullo gay los derechos que tienen los gays en la sociedad y los logros que su centro, el CENESEX ha logrado y todos sus esfuerzos personales ante su padre para que estos derechos sean discutidos de una vez. claro, todo es pura pantomima.
Esto es pelear por minucias. En un tiempo a los homosexuales les metían en campos de concentración, las famosas UMAP. Eso sí que era discriminación. Ahora hay que pelearse por una anotación en un censo.
yo te pregunto Isbel si te cambia la vida salir o no en el censo , vas a dejar tu pareja p’q no apareces en un papel ?????? es mas importante tener otros derechos como el derecho de poder casarse o mejor todavia poder adoptar ninos que no aparecer en un papel no crees
lagiraldilla:
Por supuesto que esos derechos son más importantes. Pero imagínate, si un derecho tan elemental, que ni siquiera implica cambios en el esquema institucional cubano, es negado, ¿qué quedará entonces para otros más fundamentales? Justamente, el reclamo por este derecho va en el sentido de hacer ver que existimos, y que estamos dispuestos a luchar. Por demás, el censo es una herramienta de investigación muy importante para el diseño de políticas. Pudieran pensar los burócratas, si no saben que existen muchas parejas homosexuales viviendo juntos, que no es necesario el matrimonio gay.
Por último, en la vida no solo hacemos “lo más importante”, de modo que no son excluyentes los reclamos por aparecer reflejados en el censo, y los reclamos por el derechos a casarnos. Puedo hacer ambas cosas. Además, en ninguno de los dos casos, si pierdo en la batalla incluso, dejaría a mi pareja.