Toc Toc es una obra para reírse

Irina Pino

La gente está deseosa de reírse para olvidarse de sus problemas cotidianos, de lo complicada que está la vida en nuestra Isla, por el calor excesivo, la falta de comida y otros recursos

De la obra Toc Toc

HAVANA TIMES – Los trastornos obsesivos compulsivos hacen mucho daño. Causa malestar observar a la gente que los padece…, aunque esta vez sirven de base en la obra del dramaturgo francés Laurent Baffie, estrenada por la compañía teatral cubana A teatro limpio.

Ha sido tanta la concurrencia de público, que se ha presentado en diversas salas como El Sótano, Raquel Revuelta, y ahora se encuentra en cartelera en el Centro cultural Bertholt Brecht.

Salas llenas y público que no pudo adquirir los billetes, demuestran que la gente está deseosa de reír para olvidarse de sus problemas cotidianos, de lo complicada que está la vida en nuestra Isla, por el calor excesivo, la falta de comida y otros recursos. Así que no viene mal disfrutar de esta hilarante comedia para anestesiarse por dos horas.

Su autor recurre a un escenario sui géneris: una consulta de Psiquiatría. Sus seis personajes sufren de Toc: Transtorno obsesivo compulsivo; Vicente se la pasa haciendo cálculos aritméticos; Blanca limpia todo, por el miedo a los gérmenes, y hasta su color favorito es el blanco; Alfredo tiene el Síndrome de Giles de Tourette: no puede dejar de soltar malas palabras a cada momento, y cuando grita “maricón”, o “me los tiemplo a todos”, no resulta un acto insultante, sino muy cómico, por ser inesperado.

Uno de los personajes de más gancho es Lily, que tiene Pailalia y Ecolalia, repetición de palabras y frases, como si fuera un papagayo. Ese rol es interpretado por la joven actriz Ana Pomares.

En general, hay un buen desempeño de todo el elenco; Hugo Vargas, su director, se luce en su propuesta con expresiones cubanas intercaladas en los diálogos. Sin embargo, después de ver la adaptación cinematográfica española de 2017, dirigida por Vicente Villanueva, con Paco León (el Luisma, en la serie Aída), Rosy de Palma (chica Almodóvar), y Oscar Martínez (actor argentino de comedias y dramas), se harán comparaciones, porque el cine es un medio en el que prevalece el carisma.

Pero eso no importa, porque lo interesante del teatro es que se renueva en cada puesta en escena, sus artistas tienen la oportunidad de mejorar, vinculándose más a sus personajes y a sus perfiles psicológicos.

Los invito a ver Toc Toc, viernes y sábado, a las 8 y 30 de la noche, domingo a las 5 de la tarde, por todo el mes de agosto. Les prometo un rato entretenido.

Posiblemente nos veamos retratados en algunas de esas compulsiones, porque en realidad nadie es normal.

 

Irina Pino

Irina Pino: Nací en medio de carencias, en aquellos años sesenta que marcaron tantas pautas en el mundo. Aunque vivo actualmente en Miramar, extraño el centro de la ciudad, con sus cines y teatros, y la atmósfera bohemia de la Habana Vieja, por donde suelo caminar a menudo. Escribir es lo esencial en mi vida, ya sea poesía, narrativa o artículos, una comunión de ideas que me identifica. Con mi familia y mis amigos, obtengo mi parte de felicidad.

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