Se presenta antología erótica femenina
Por Irina Pino
HAVANA TIMES – Una antología de cuentos eróticos, Alamar, te amo, se presentó el 22 de noviembre en la librería Alma Mater, en La Habana.
Realizada por la Editorial La Palma, Madrid, es un proyecto de una colección de literatura cubana que surgió en 1997 con el libro Toda esa gente solitaria.
Las narraciones pertenecen a catorce escritoras, entre las que se encuentran: Verónica Vega, Jamila Medina, Legna Rodríguez, Lien Carranza, Yusimí Rodríguez, Marvelis Marrero, Susana Haug, Rita Martín, Irina Pino, Dazra Novak, Odette Casamayor, y Haydée Sardiñas. Muchas de ellas han sido galardonadas con premios en Cuba, y publicadas su obras en el extranjero.
Al principio iba a ser un volumen para ambos sexos, pero luego sus editores, Ignacio Rodríguez y Jorge Carpio, se percataron del potencial que tenían las mujeres, todas con un denominador común: lo erótico dentro de sus cuentos.
Son historias que atrapan por sus disímiles lenguajes, la inteligencia con que fueron relatadas, unas desde la perspectiva de la crudeza, otras pletóricas de imágenes sugerentes, tampoco falta el humor, el abuso infantil, el teatro y el discurso poético.
Con un exquisito prílogo (no prólogo), de la periodista y narradora Teresa Dovalpage, nos permite adentrarnos en lo constituye el erotismo desde sus respectivas visiones. A manera de testimonio, Dovalpage las instó a hacer sus propias confesiones acerca del tópico: como un striptease, sea o no autobiográfico.
El libro es entretenido e invita a la lectura, no solo por la peculiaridad de sus cuentos – algunos escritos con una prosa de belleza impresionante–; ostenta, además, el ingrediente picante de la obra del artista cubano Leonel López-Nussa, con sus dibujos minimalistas en los que el trazo puede tener la forma de un pene, un seno o una vagina.
La presentación estuvo a cargo de los editores y las autoras Yamila Peñalver y Anisley Negrín.
A pesar de las condiciones del salón, que no fueron óptimas (solo con ventiladores), ya que la librería hace varios meses tiene averiada su climatización, hubo un público mayoritario que acudió con ganas de adquirir los libros, demostrando una vez más cuan necesaria es la lectura cuando la obra lo merece.
Yo quería ir pero no me fue posible, me interesaba la presentación y además aclarar que por un lamentable error, el cuento que se me adjudica no es el mío, y el mío se le adjudica a otra autora. Son errores que no tienen justificación y violan el derecho de autor.
a mi me encantaria leer las historias que TU constaste, porque si se parecen a las de aqui, se me van a parar todos los pelos, toditos, toiticos.