Mi presentación en La Feria del Libro de La Habana

Irina Pino

Con la presentadora de mi libro y el director de la editorial Hermanos Loynaz

HAVANA TIMES – Acaba de presentarse mi tercer volumen: De las escaleras para abajo, publicado por la Editorial Hermanos Loynaz, de Pinar del Río, el pasado domingo 4 de febrero, en el recinto ferial de Morro- Cabaña.

El emblemático sitio, se hallaba súper concurrido, apenas se podía dar un paso por la gran multitud que escoge ese día para visitarlo.

Este evento, aparte de ser una especie de fiesta de la lectura, es como un gran picnic, algunos van a comer y lo que menos hacen es comprar libros. Antes de entrar, desde lejos,  se percibe un desagradable olor de fritangas que contamina el aire, por todos lados se ven largas colas de comidas rápidas.

Ahora, los niños disfrutan de los aparatos para montar, como en una feria normal; y los padres gastan más dinero en juguetes y chucherías.

La idea no es mala, y de seguro reporta elevados ingresos; pero se pierde la idea gestora: encontrar libros interesantes, aunque haya puestos donde te den mapas para que los busques en las diferentes salas.

Algo que no me gusta es la forma maratónica de las presentaciones, una editorial puede tener en su programa más de cinco libros en una tarde. Muchos presentadores no se dan cuenta y se extienden hablando del libro sin pensar en el presentador que viene a continuación. El ego, el protagonismo, perjudica a los otros. En algunos casos, estos hablan más que los propios autores, que solo alcanzan a leer un par de textos.

Presentaciones de la Editorial Hermanos Loynaz en la sala Lezama Lima

Persiste el tedio, la incomodidad, la gente no resiste varias horas, la atención se dispersa, deseando que todo termine rápidamente.

Eso me pasó a mí, no escuchaba de que iban los libros que me precedían, solo quería que llegara mi turno.

Durante mi presentación, que fue la última, ni siquiera me pusieron un pomo de agua, tampoco el libro en el stand de la mesa. Otro detalle: ni mi libro ni yo estábamos en el programa. ¿Olvido, quizás?

Después de los agradecimientos por el excelente trabajo de la editorial, a mi maravilloso editor y a la escritora que hizo un resumen de toda mi obra, pude leer al fin.

Cuando escuché los aplausos finales, no supe si fue por los textos que leí, o por las ganas que tenía la gente de que terminara aquella locura.

Mis libros, para los interesados en comprarlos, no estaban allí, los habían ubicado en un lugar diferente. O sea, que tuve que regalar a mis amigos parte de los libros que la editorial ofrece a los autores a precio de costo.

Es cierto que los firme y me agradó escribir dedicatorias, no obstante, a quien se le ocurre que un autor presente un libro y luego no haya libros para vender.

A pesar de las vicisitudes, los invito a comprar mi libro, por su carácter íntimo, donde se imbrican pasiones como la literatura, el cine y la música. Más que escrito, es un libro vivido a plenitud.

Irina Pino

Irina Pino: Nací en medio de carencias, en aquellos años sesenta que marcaron tantas pautas en el mundo. Aunque vivo actualmente en Miramar, extraño el centro de la ciudad, con sus cines y teatros, y la atmósfera bohemia de la Habana Vieja, por donde suelo caminar a menudo. Escribir es lo esencial en mi vida, ya sea poesía, narrativa o artículos, una comunión de ideas que me identifica. Con mi familia y mis amigos, obtengo mi parte de felicidad.

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12 thoughts on “Mi presentación en La Feria del Libro de La Habana

  • Hola Irina, si pudieramos hacer algo de la feria, me gustaria divulgar, dar a conocer. Dile a Circles que te de otras conexiones porque nauta.cu no funciona ahora.
    Felicidades.

  • Muchas gracias Vicente, ¿dime que deseas hacer?

  • Los presentadores debieran o desaparecer y ser sustituidos por fotocopias con las biografias de los autores del panel, o saber limitarse a presentar al autor, sin comentarios. La gente va a oir la lectura y a conocer a los autores. Pero el afan de protagonismo es muy grande y muchos ven en ese instante una opoertunidad para cobrar sus quince minutos de fama.
    Por lo otro que cuentas parece que la organizacion de la feria deja demasiado que desear.

  • Irina: muchas felicidades, querida amiga y colega, por tu libro, que me gustaría leer; ahora, te acompaño en los sentimientos de frustración y tedio, debido a la mala coordinación en el evento. Nunca he ido a la feria pero por lo que leo ha degenerado en un fenómeno de simulación de masividad más que en su esencia básica de promover la lectura y el acceso al libro. Que aunque se mantiene, ya va dejando de ser el “gancho” principal para atraer público. Atraerlo con ganchos banales o desasociados con la lectura o la cultura en general, es bueno para hacer bulto pero es malo para el evento principal y lo que cuentas lo confirma. Creo bueno lo de los ganchos, pero deben ser con cosas afines: música, teatro, temas tratados en libros que se promuevan, humor relacionado, no sé, pero jamás una feria carnavalesca, que tiene su valor pero en otro espacio diferente: allí solo distrae y desvía.

  • Sí, Osmel, tienes toda la razón, una idea genial sería mezclarlo a la música, el teatro y el cine. Pero seguramente muchas personas la considerarían elitista de alguna manera, y por supuesto, que no iría la masividad. Gente que va porque buscan otras cosas ajenas al libro. Para mí es más lógica, que esta que tenemos ahora, que es lo más parecido a un circo, pero no el “Circo del Sol”, que es arte puro y sofisticado, sino el circo peyorativo. Gracias por comentar.

  • Felicidades Irina, desde la distancia te acompaño y me hubiese tener el gusto de tener este libro de Poemas, espero poder acceder alguno de ellos en mi próximo viaje a Cuba, un abrazo desde Colombia, Ileana la Pintora

  • Claro, Ileana que te guardaré un ejemplar para cuando vuelvas. Otro abrazo para tí.

  • Buenas Tarde Irina. Sabes en que librería de la Habana están vendiendo “De las escaleras para abajo”? Me gustaría leerlo.

  • Felicidades Irina aunque presentar un libro en Cuba sea (por lo que he visto) casi siempre una experiencia tan incompleta. Como sabes, yo no he publicado en mi país pero pude presentar mi primera novela en la Torre de Letras, gracias a la gentileza de Reina María Rodríguez y fue una presentación atípica, intensa, única. Espacios alternativos son muy necesarios aunque sean dentro de las instituciones. La literatura no es un maratón, cada autor merece respeto y cada obra de arte merece su espacio sagrado.

  • Rolando: Gracias por tu interés. Mañana averiguo y te digo.

  • ¿Dónde se consigue tu libro, Irina?

  • Me dijeron que lo estan vendiendo en la libreria Ateneo, Cervantes, enfrente a la Moderna Poesía. También está mi libro anterior.

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